Los trabajos de búsqueda de víctimas de la represión franquista en la capital gaditana, en el antiguo cementerio San José, promovidos por la concejalía de Memoria Democrática, siguen dando sus frutos: de momento se han hallado los restos de cinco asesinados más, cuatro de ellos identificados.
A principios de marzo comenzó la ejecución de una nueva fase, la quinta, de estos trabajos que conllevan la excavación arqueológica de las sepulturas colectivas, conocidas como ‘medias sepulturas’, con el objetivo de la localización y exhumación de parte de las 37 víctimas de la represión franquista desde 1936 a 1937 enterradas en este tipo de sepulturas.
En concreto, con esta intervención se pretende la localización de las 24 sepulturas colectivas de las que se tiene constancia a través de documentación. Actualmente se están excavando cinco sepulturas del patio 3 del cementerio y se han exhumado un total de 51 cadáveres y tres osarios. Entre todos ellos, según informa el Ayuntamiento en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, se ha localizado a cinco individuos con evidencias de fallecimiento por armas de fuego corta y larga.
A expensas de la finalización de estas sepulturas, los cadáveres localizados –partiendo de los libros de registro y el contexto arqueológico- corresponden a: Ramón Real Jiménez, José Gutiérrez Braña, Manuel Moreno Cortés y Bartolomé García Peña. Falta una quinta persona por identificar, ya que sus restos se encontraron a finales de semana.
La ‘medias sepulturas’ que se están excavando están ubicadas en los patios 3 y 6 del cementerio clausurado, y su localización no tiene dificultad, pues la delimitación de la mayoría de las estructuras funerarias que componen estos espacios se ha realizado durante las intervenciones arqueológicas anteriores.
Esta excavación está siendo coordinada por el arqueólogo municipal José María Gener Basallote, y esta fase se ejecuta a través de la empresa pública Cemabasa (Cementerio Mancomunado Bahía de Cadiz). Se invierte casi 40.000 euros para unos cuatro meses de trabajos.
A estos hallazgos se suma la celebración, alrededor del 14-A, en conmemoración del aniversario de la proclamación de la Segunda República, las VI Jornadas Memorialistas de Abril organizadas por el Consistorio. Y que como actividad principal ofrece el mismo miércoles visitas guiadas muy reducidas (por los protocolos anti-Covid, hay que inscribirse previamente) al antiguo camposanto para dar a conocer los trabajos que se vienen realizando en los últimos años.
PERFIL DE LAS ÚLTIMAS VÍCTIMAS LOCALIZADAS
La Plataforma de Memoria Histórica de Cádiz ha detallado por su lado datos de las cuatro víctimas ya identificadas a raíz de la ejecución de la actual la quinta de labores.
— Ramón Real Jiménez. Su cadáver fue encontrado en los alrededores de la plaza de toros y fue enterrado el 20 de septiembre de 1936 en una sepultura sin causa de fallecimiento, “como suele ser habitual en estos casos”. Tenía 45 años, era natural de Chiclana y vivía en Cádiz en la calle San Juan, 42. Catalogado como hombre de acción y dirigente de la CNT. Perteneció al Comité Pro presos.
— José Gutiérrez Braña. Su cuerpo fue encontrado también en los alrededores de la plaza de toros, enterrado el 28 de septiembre de 1936 en una sepultura sin indicación de causa de fallecimiento. Había ingresado en la prisión provincial el 26 de septiembre a disposición del gobernador civil y fue sacado al día siguiente para, en teoría, ser trasladado a la prisión de El Puerto.
— Manuel Moreno Cortes. También parece que fue fusilado en la plaza de toros, y enterrado el 28 de septiembre de 1936 en una sepultura sin causa de fallecimiento. Estaba casado con María Paredes Mateos con la que tenía al menos una hija. Ingresó en la prisión provincial el 17 de septiembre y fue sacado el 27 de septiembre para, en teoría, ser trasladado a la prisión portuense.
— Bartolomé García Peña. Igual que los anteriores, el cuerpo se halló en los alrededores de la plaza de toros, y enterrado el 1 de octubre de 1936 en una sepultura sin indicación de causa de fallecimiento. Vivía en la calle Trille, era un jornalero, casado con Luisa Puche Chulián y con nueve hijos. Ingresó en la prisión provincial el 7 de agosto y fue entregado a la justicia militar golpista el 13 de agosto para ser trasladado al vapor Miraflores. Aquí se pierde su rastro hasta la aparición del cadáver.