La empresa municipal Aguas de Cádiz ha detectado en las últimas semanas diferentes vertidos en la red de saneamiento de la ciudad procedentes de establecimientos de restauración, que “están provocando atascos y malos olores para los residentes de la zona”.
Además de ello, se alerta sobre el daño medioambiental que supone este tipo de vertidos en el alcantarillado: “un litro de aceite usado puede contaminar hasta 1.000 litros de agua ya que el aceite forma una capa superficial que impide el intercambio de oxígeno y afecta a la vida acuática”. Además, los vertidos de jabón, pinturas, aceites y desechos de forma continuada “crean masas de residuos que llegan a provocar daños importantes como rotura de tuberías”. Dichos vertidos ilegales provocan además “condiciones de insalubridad para el vecindario atrayendo insectos y roedores”.
En la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, Aguas de Cádiz recuerda que lleva a cabo anualmente dos “grandes campañas de limpieza” de la red de saneamiento en los colectores más importantes de la ciudad, Mirandilla y Lubet, retirando toneladas de residuos de la red de alcantarillado; además realiza un mantenimiento diario de estas redes para garantizar el correcto funcionamiento de las canalizaciones.
Y durante el pasado mandato, ya lanzó una campaña de concienciación instalando placas metálicas en los imbornales con el lema ‘El Mar empieza aquí’ para incidir en que dichos elementos deben recoger el agua de lluvia y un mal uso de los mismos puede causar problemas medioambientales. Ahora vuelve a realizar este llamamiento a la ciudadanía, solicitando un “buen uso” de las alcantarillas.