Unos 1.100 alumnos procedentes de las 16 escuelas públicas de la ciudad de Cádiz se han inscrito en las II Olimpiadas Escolares, que se celebrarán los días 30 de mayo, y 1 y 2 de junio. En esta ocasión es el colegio Campo del Sur quien ha asumido la organización, después de que el año pasado el evento estuviera a cargo del colegio Santa Teresa.
Como novedad, este 2019 se contará con la participación de alumnos de Secundaria, que de forma altruista, colaborarán con los árbitros y los jueces auxiliares para velar por el buen desarrollo de los eventos deportivos.
Las II Olimpiadas Escolares, según se ha trasladado a DIARIO Bahía de Cádiz, contarán con cuatro categorías: Querubín (alumnado de Infantil), Prebenjamín (alumnado de 1º y 2º de Primaria), Benjamín (alumnado de 3º y 4º de Primaria) y Alevín (alumnado de 5º y de 6º de Primaria).
Las disciplinas deportivas en las que va a participar los niños son las de fútbol, baloncesto, salto altura, ajedrez, maratón, patinaje, mini fútbol, indiaka, tiro con arco, tira soga, dardos, ping pong, equitación (prueba para los alumnos de Infantil con caballos de madera), futbolín, bolos finlandeses carreras de relevo y carreras de saco, entre otras.
La concejala de Enseñanza, Ana Fernández, en la presentación de la cita, ha destacado la importancia de esta actividad “en cuanto a la promoción y apoyo a la escuela pública se refiere”. “Como Ayuntamiento, como institución pública, es nuestro deber hacer cuanto está en nuestra mano para poner en valor la educación pública. Lo hacemos a través de las inversiones en los centros educativos para mejorar las instalaciones y lo hacemos también con actividades de este tipo en las que se fomenta el compañerismo, la solidaridad, la cooperación y el trabajo en equipo” apuntaba la edil de Por Cádiz Sí se puede.
Por su lado, la presidenta del Ampa del colegio Campo del Sur, Montserrat Ruiz, ha reconocido que ha sido “un año de intenso trabajo de colaboración con todos los centros ya que en esta segunda edición tenemos representación de los 16 colegios públicos de la ciudad”. A decir de Ruiz, “estas olimpiadas son una gran oportunidad para potenciar la relación de los niños de diferentes centros además de poder potenciar el deporte y los hábitos saludables”. La presidenta de la Flampa Gades, María Gil, y el director del colegio Campo del Sur, Luis Calvo, también participaron en la presentación de las Olimpiadas.
CELEBRADAS LAS I OLIMPIADAS DE ORTOGRAFÍA
Por otro lado, también se ha celebrado en las últimas semanas en centros públicos de la capital gaditana las I Olimpiadas de Ortografía. El departamento de Lengua y el de Cultura Clásica del IES San Severiano han sido los organizadores.
Los centros participantes (seis institutos de Secundaria y cinco colegios de Primaria) desarrollaron una primera fase preliminar en sus dependencias en la que sus alumnos tuvieron que escribir correctamente 50 palabras al azar en una hora. Y de hay se clasificaron a la final “reñidísima” del pasado 26 de abril: más de 140 chavales se enfrentaron al “rigor ortográfico y al tiempo”, en la que debieron deletrear palabras como astigmatismo, convicción, carabela o apabullante, sin equivocar letras ni olvidar acentuación en su caso.
Los premios han consistido en las categorías inferiores en entradas de cine y en las categorías superiores en cheques de 40 euros en material escolar o libros. Los ganadores han sido: en el Nivel I, Sergio Macías del CEIP Tierno Galván; en el Nivel II, Martín de Cea del IES Fuerte de Cortadura; en el Nivel III, Brian Núñez del IES Rafael Alberti; en el Nivel IV, Darío Arroyo del IES Fernando Aguilar; y en el Nivel V, Nuria Vargas del IES San Severiano.
“La idea partió de una reflexión colectiva del claustro de nuestro centro”, señala Paqui Guzmán, profesora de lengua del IES San Severiano. “Somos conscientes de que el uso cada vez más frecuente de las redes sociales y las reglas de una equivocada simplificación en la ‘dictadura’ de los 140 caracteres que por ejemplo alimenta redes sociales como twitter o instagram, hace que nuestros jóvenes presten cada vez menos interés a las reglas ortográficas”, puntualiza. Precisamente, “eso nos hizo pensar que debíamos poner de moda nuevamente la ortografía y creímos que un concurso sería una buena opción”.