La Asociación de la Prensa de Cádiz ha reiterado su oposición a la nueva Ley de Seguridad Ciudadana, que pretende imponer el Gobierno de Rajoy. Esta controvertida norma, “ha demostrado esta semana en Cádiz sus lamentables efectos”. Y es que se ha conocido la detención de un ciudadano tras serle requerido el DNI mientras contemplaba el monumento a la Constitución de 1978, “por la sospecha o posibilidad de que fuera a cometer un delito”. Por su lado, Se Buscan Periodistas-Comunicadores Asociados, reclama explicaciones al delegado del Gobierno en Andalucía.
La Asociación de la Prensa de Cádiz (APC), como entidad defensora de los derechos civiles, ha reiterado su oposición a la nueva Ley de Seguridad Ciudadana, conocida como Ley Mordaza, que pretende imponer el Gobierno central del PP. Esta controvertida norma, a la que las organizaciones de periodistas, así como otros colectivos sociales, se han opuesto frontalmente desde el principio, “ha demostrado esta semana en Cádiz sus lamentables efectos”, se advierte.
Y es que se ha conocido la detención de un ciudadano tras serle requerida su documentación mientras contemplaba el monumento a la Constitución de 1978 –el conocido como ‘pájaro jaula’-, en la capital: una detención “cuanto menos, paradójica”.
Al margen del resultado de la investigación policial y de la denuncia que el propio afectado ha presentado ante los juzgados, ambas versiones -también la de los agentes policiales- coinciden en que el DNI le fue requerido simplemente “por la sospecha o posibilidad de que fuera a cometer un delito”. Esta posibilidad, amparada por la nueva Ley de Seguridad Ciudadana, “puede dar lugar a detenciones arbitrarias y no justificadas”, evidencian desde la APC en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz.
SBP-CA PIDE EXPLICACIONES
Por su lado, la comisión ejecutiva de Se Buscan Periodistas-Comunicadores Asociados (SBP-CA) ha mostrado también su “más profundo malestar” por este lamentable incidente. Y es que el implicado, es además un miembro de los órganos rectores de asociación y cooperativa: un periodista gaditano.
Los hechos tuvieron lugar la pasada madrugada del 1 de marzo, cuando se encontraba junto al monumento frente a las Puertas de Tierra, leyendo la placa del mismo, “donde se había parado a descansar” mientras regresaba a su domicilio. En ese momento, un grupo de agentes de la Policía Nacional “consideraron sospechosa su actitud”, por lo que solicitaron su identificación. La demora en encontrar el DNI –“teniendo un monedero pequeño y con diez u once tarjetas diferentes tardé en encontrarlo”, relata- fue considerado por estos policías como “una grave falta de desobediencia”, y esta persona fue trasladada a la Comisaría donde permaneció incomunicado cinco horas. Como resultado de este hecho, precisó asistencia sanitaria en el Hospital Puerta del Mar, y es que además sufrió diversas lesiones. Aquí certificaron la inflamación del pómulo, así como taquicardia y ansiedad.
Asegura que le redujeron e introdujeron en el coche patrulla, “incluido un rodillazo en la cara”. Además, les informó de que toma una medicación, un tratamiento de anticoagulantes “y no cambiaron de actitud agresiva”. “Se negaron a identificarse con su número de placa y me dejaron en el suelo del calabozo en estado de shock”, relata la denuncia de este ciudadano. Por otro lado, añade que observó que aparecía en el documento de detención, en el apartado ‘firma del detenido’ las palabras ‘se niega’. Pero, “en ningún momento se me ofreció firmar ningún documento. Alguien lo hizo por mí. Me negué a firmar finalmente porque las pertenencias que me devolvieron estaban rotas”, sentencia. Quedó en libertad, pero, según le dijeron, “con cargos por desobediencia grave, al haber tardado en sacar el DNI”.
“Los hechos objetivos –sentencian desde Se Buscan Periodistas-Comunicadores Asociados en su escrito al delegado del Gobierno en Andalucía- se pueden resumir en que un ciudadano detenido ante un monumento, sin intención alguna de dañarlo, y que no saca el DNI con la suficiente diligencia, termina con una contusión en el pómulo y con cinco horas incomunicado en un calabozo policial. A simple vista, parece una reacción totalmente desproporcionada, que esperamos que se aclare ante la opinión pública, con la depuración de responsabilidades que corresponda, para bien del prestigio de las Fuerzas de Seguridad del Estado y para tranquilidad de la ciudadanía”.
“CREA INSEGURIDAD JURÍDICA TANTO A PERIODISTAS COMO A GRÁFICOS”
Pero esta “no es la única consecuencia de la Ley Mordaza”. La Asociación de la Prensa de Cádiz recuerda que esta normativa colisiona también con otros derechos constitucionales, como el fundamental derecho a la información o con la libertad de expresión; y crea inseguridad jurídica tanto a periodistas como a reporteros gráficos y editores. Entre estas medidas está, por ejemplo, la posibilidad de sancionar por grabar o difundir imágenes de los cuerpos de seguridad durante la cobertura, disturbios o alteraciones del orden público.