La Asociación Gaditana de Autoescuelas (AGA) ha trasladado este jueves su caótica situación a las calles, convocando caravanas de coches de autoescuela en la capital y en Jerez, para denunciar, básicamente, la alarmante falta de examinadores en la provincia, un problema que “se ha vuelto crónico”.
Hace unos años, en la provincia gaditana había 35 examinadores (dependientes de la Jefatura de Tráfico), mientras que ahora son 17, y en verano apenas cinco por las vacaciones del personal.
Las 450 autoescuelas de Cádiz, que dan empleo a unas 600 personas, no pueden más, y es que cada una, se asegura, sólo pueda examinar de dos a cuatro alumnos cada 15 días. Se calcula que a nivel provincial hay 9.000 personas esperando para realizar su examen en la calle, de ellos unos 3.000 en la Bahía. Entre que se aprueba el teórico y se tiene fecha para el teórico están pasando unos tres meses, algo que desespera al sector, impotente, y a los aspirantes a tener su carné.
Además de la protesta en Jerez, en Cádiz la caravana de vehículos de diferentes autoescuelas de la zona, ha partido de San Fernando para seguir por la autovía hasta la capital, donde se ha detenido en la Jefatura Provincial de Tráfico y en la Subdelegación del Gobierno, para trasladar directamente sus exigencias. Entre ellas, que se saquen a nivel nacional unas 400 plazas de examinadores, y que el reparto entre las provincias sea equitativo en función de la demanda.
Al respecto, la diputada nacional del PP por Cádiz, María José García-Pelayo, acaba de avanzar en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz la petición de comparecencia en el Congreso del director general de Tráfico, Pere Navarro, para que explique qué está ocurriendo con los exámenes para obtener el carné de conducir.
Este partido de derechas sostiene que “son momentos muy difíciles para las autoescuelas lo que ha provocado no solo que se hayan visto perjudicadas económicamente por la pandemia, sino ahora por este caos que les ha provocado una gran bolsa de alumnos pendientes de examinar”.