Acabando el año y sin desayuno navideño por medio debido a la pandemia, la Zona Franca de Cádiz ha hecho balance de su “buena marcha”, refrendada por un 2021 en el que dice haber logrado incrementar sus ingresos en cerca de 13 millones de euros, además registrar una amplia ocupación en sus espacios repartidos por toda la provincia (salvando en gran medida los suelos de Altadis, añadidos al recinto fiscal de la capital); y al tiempo, mira ya a 2022.
Así, la actual dirección del Consorcio gaditano, con el socialista Fran González como delegado del Estado, entiende que las medidas de gestión puestas en marcha “sientan las bases para los nuevos retos”, previéndose para los próximos ejercicios “una continuidad de esta evolución positiva” gracias a la aplicación del plan de viabilidad.
Según se resalta en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, tiene “grandes hitos” que van a marcar la actividad de la Zona Franca en el nuevo año. Y todo ello se enmarcará “en el prisma del nuevo modelo industrial que está imprimiendo un sello de sostenibilidad a todas sus actuaciones y está optimizando sus instalaciones para un modelo industrial que respete el medioambiente, fomente las energías renovables y la movilidad sostenible e impulse la economía verde y azul”.
En esta línea se está trabajando con el plan de mejora integral del recinto interior en la capital, que parte de una inversión inicial global que supera los 1,5 millones de euros, de la que más de la mitad se destina al acondicionamiento de la antigua Altadis, que cuenta con instalaciones obsoletas.
En cuanto al polígono exterior, se afirma que “habrá un antes y un después” cuando se desarrolle el proyecto de Zona Base y su incubadora de economía azul Incubazul, cuya licitación de la obra se lanzaba recientemente (centralizado en un edificio de contenedores marítimos reciclados que quiere ser referente para el resto del polígono).
Y otro hito de calado será la puesta en marcha en este 2022 de su segundo recinto fiscal en el territorio, el de Bahía de Algeciras, que “vertebrará junto al de Cádiz la capacidad logística y creará un gran foco productivo en el entorno del puerto de Algeciras, con la entidad portuaria como gran aliado”.
MÁS INGRESOS, MENOS DEUDA
Volviendo la vista al ejercicio que ahora se cierra, la Zona Franca de Cádiz subraya que ha conseguido incrementar en más de 10 millones los ingresos por operaciones “gracias a la apuesta decidida por la estrategia comercial”, que ha permitido la formalización de 74 contratos de arrendamiento y 25 de compraventas, que han generado unas rentas de 130.000 euros mensuales, en el caso de los alquileres, y casi 9 millones en el caso de las enajenaciones, lo que unido a ingresos de otra índole como la liquidación del convenio con el Ayuntamiento de Los Barrios han garantizado unos ingresos en 2021 de más de 12,8 millones.
Comparativamente, las operaciones de venta han pasado de 18 por valor de cerca de 1,7 millones en 2020 a 25 por un importe de 8,8 millones en 2021. En arrendamientos, se ha pasado de 27 nuevos contratos, con ingresos mensuales de 62.400 euros, en 2020; a 74 este año, con los 130.000 euros mensuales de rentas.
Con estas cifras se cumplen en su totalidad los compromisos adquiridos y plasmados en el plan de ventas del Consorcio gaditano para este año y, además, se consigue alcanzar la mitad de los presupuestados para 2022, “lo que habla de la importancia de los logros conseguidos”.
De este modo, en los últimos tiempos se está consiguiendo sanear las cuentas y conseguir estabilidad, además de poner rumbo al equilibrio y conseguir por primera vez en 15 años un fondo de maniobra. Al respecto, ha podido reducir su deuda financiera en un 7%, minorándola en 7 millones durante 2021, de los que 4,5 fueron a la cancelación del préstamo hipotecario sobre Tiro Janer, y otros 2,5 se destinaron a la amortización de otros préstamos con entidades. A esto se suma la reducción de la deuda Reindus en 14 millones, con lo que se ha conseguido bajar la deuda total en un 11%.
ALTA OCUPACIÓN EN TODOS SUS EQUIPAMIENTOS
Haciendo un repaso por los activos de la Zona Franca, el recinto fiscal de Cádiz está hoy día “prácticamente colmatado”, si no se tiene en cuenta a los añadidos suelos de Altadis, que “actualmente está en comercialización”. Allí, aunque no es una empresa ni va a producir nada ni va a generar empleo directo, recientemente el Consorcio ha arrendado el denominado edificio en cruz a la Guardia Civil para ubicar un Centro de Enseñanza y Perfeccionamiento del Servicio Marítimo, que compartirá ubicación con el Grupo Marítimo del Estrecho.
En este punto, se presume de que en el recinto interior gaditano se ubican “grandes operadores que están en continuo crecimiento y demandan espacio”. Este es el caso de Harinera Vilafranquina, que actualmente dispone de 19.000 metros cuadrados; Cayco, con 12.500 m2 y una importante expansión de espacios para 2022; Petaca Chico, con 11.500 m2; y Olivia Petroleum, con 8.800 m2.
Respecto a los espacios alquilados por la Zona Franca en todos sus equipamientos en la provincia oscilan entre los 25 m2 de las oficinas a los 12.000 m2 de algunas naves, destacando la ampliación de las instalaciones de Petaca Chico, de Cayco, de López Cano en la grada de tribuna del Nueva Mirandilla o la llegada de nuevos clientes como Sola Ricca o el Instituto Oceanográfico, y la puesta en valor de más de 20.000 m2 de instalaciones de procesado de frío en el recinto fiscal que estaban sin inquilinos desde hace años y que alojan empresas de alimentación tan relevantes como Petaca Chico, además de la reciente ampliación de las instalaciones de Cetárea del Sur que con ello duplicará su actividad.
En el caso de los llamados centros de negocio, tanto el Iro en Chiclana, como el Nexus en Algeciras, o las Caballerizas en Jerez, arrendado al completo a una clínica privada de especialidades médicas este verano, se encuentran alquilados en su totalidad, al igual que ocurre con las naves del recinto interior en Cádiz, las de Puerto Real, Barbate, Palmones y Ubrique, “lo que afianza la actividad de la entidad en toda la provincia”.
Además, en 2021 el Consorcio ha realizado operaciones de “gran relevancia” como la venta de los suelos de Tiro Janer en San Fernando a una promotora para que continúe su proyecto industrial (que se quedará en otro centro comercial) por 7.5 millones euros (que fue más o menos lo que pagó por ellos al Ministerio de Defensa hace años), de los que 4,5 millones fueron efectivo y lo restante aportado en una parcela urbanizada para desarrollo hotelero “que se comercializará en breve”.
Y en la recta final del año, ha obtenido la concesión de una zona del cantil del muelle de Ribera por parte de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC) en donde el Consorcio alojará a una empresa de almacenamiento y distribución de cable submarino, además del arrendamiento antes mencionado del edificio a la Guardia Civil o la venta al CEEI de la nave del centro de empresas en Rota.