El Cádiz CF SAD, que lleva en concurso de acreedores desde hace ya unos años, acaba de presentar la propuesta de convenio de acreedores, que ahora deberá ser ratificada por los afectados para su entrada en vigor. Si el club permanece en Segunda B, se pedirá una quita del 60% del saldo que se refleje en el informe definitivo de los administradores concursales –el pago en este caso se abonaría poco a poco hasta el año 2030-; si asciende a Segunda o Primera, será del 50%, y se pagaría antes. La importante deuda de la entidad amarilla rondaría actualmente los 16 millones de euros.
El Cádiz CF SAD, que lleva en concurso de acreedores desde hace ya unos años, acaba de presentar la propuesta de convenio de acreedores, que ahora deberá ser ratificada por al menos el 51% de los acreedores ordinarios para su aprobación y entrada en vigor. Si el club permanece en Segunda B, se reclamará una quita del 60% del saldo que se refleje en el informe definitivo de los administradores concursales; si asciende a Segunda o Primera, será del 50%. La importante deuda de la entidad amarilla rondaría actualmente los 16 millones de euros.
La propuesta está enmarcada dentro de unas condiciones que solamente pueden ser solicitadas por las entidades que son reconocidas como de “especial trascendencia para la economía”, superando los límites que contempla el artículo 100.1 de la Ley concursal. En este punto se recuerda que se está hablando de una entidad centenaria, con un centenar de trabajadores en plantilla, su actividad con deportistas de cantera, una importante masa social detrás (unos 10.000 abonados esta temporada, más de 60 peñas y “con una difusión que trasciende el plano local, provincial y autonómico y nacional”), o su relevancia en la economía local (hosteleros, comerciantes…).
Para la formulación de la propuesta se han tenido en consideración la evolución del patrimonio neto de la entidad deportiva, los recursos que se prevén obtener de la actividad y el impacto del convenio en la reducción del pasivo de la concursada, y la flexibilidad y margen de maniobra facilitado con la espera pactada en el propio convenio.
Dicha consideración ha sido solicitada por el Cádiz Club de Fútbol como concursada y deberá ser aceptada por la Juez del juzgado de lo Mercantil de Cádiz. Sin embargo, “sería lógico destacar que esta consideración ya ha sido propuesta en su informe definitivo por la administración concursal”, se anota en la información trasladada a DIARIO Bahía de Cádiz.
Dado que el convenio, así como el plan de viabilidad, el plan de pagos y la relación de los créditos contra la masa han sido presentados y se les dará traslado a todos los concursados, desde la entidad se explica brevemente los términos del convenio propuesto, que “de ser aceptado, permitirá que el club salga de la actual situación de concurso de acreedores visiblemente reforzado y con un plan de viabilidad que al margen de la categoría que milite le permitirá poder ir asumiendo sus compromisos económicos de cada temporada en curso más los pagos que resulten de la planificación del convenio”, se afirma.
TRES SITUACIONES PLANTEADAS
Las líneas directrices que resumen dicho convenio, en principio, que entrará en vigor a partir del 1 de julio de 2015, “siempre que se apruebe definitivamente el mismo antes de dicha fecha”.
Por un lado, si el equipo milita en Segunda división B, las condiciones económicas serían las siguientes para los créditos ordinarios y subordinados: la quita será del 60%; habrá una espera antes de iniciar los pagos de tres años; y se pagará una vez vencidos esos tres años, en 12 años, a razón de 8,33% anual de la deuda resultante una vez aplicada la quita. O sea, los acreedores estarían cobrando poco a poco lo que se les debe hasta el año 2030.
Por otro lado, si el equipo consigue el ascenso y siempre que milite en Segunda, las condiciones económicas serían las siguientes: la quita será del 50%, es decir se activará un 10% de la cantidad inicial; habrá una espera antes de iniciar los pagos de un año, a partir del primer ascenso; se pagará una vez vencidos ese año, en ocho años, a razón de 12,5% anual de la deuda resultante una vez aplicada la quita.
Y en el caso de que los de amarillo militaran en Primera división: en relación a la deuda reconocida a los acreedores se tiene como válida la del 50%, que ya entró en vigor al subir a Segunda, por lo tanto no habrá modificaciones; habrá una espera antes de iniciar los pagos de un año, en la primera temporada que se consiga el ascenso; y se pagará una vez vencido ese año en cinco años, a razón de 20% anual de la deuda resultante una vez aplicada la quita.
A la hora de efectuar el pago entre acreedores ordinarios y subordinados, se seguirán los criterios existentes en relación a la ley concursal: cobrando en primer lugar sus importes los acreedores ordinarios y una vez finalizados dichos créditos se comenzarán a pagar los subordinados. Los acreedores privilegiados negociarán independientemente su propio convenio singular. Aquí entra la Agencia Estatal de la Administración Tributaria y la Tesorería General de la Seguridad Social.
“Con la aprobación de este convenio, el Cádiz CF, en el escenario que todos esperamos y deseamos de un primer ascenso a Segunda división, nos encontraríamos que la quita obtenida sería casi 3,2 millones de euros, y que dicha quita no sufriría nuevas variaciones”, se subraya. Es decir, disminuirá sus recursos negativos en ese importe.
Además, “se ha adaptado el plan de pagos para que pudiendo generarse los recursos para competir en cada una de las distintas categorías con un presupuesto ajustado pero de ciertas garantías, también se pueda hacer frente a los pagos aprobados en dicho convenio”.