La Mesa que analiza la viabilidad de la celebración de las barbacoas del Trofeo Carranza, en su tercera reunión, ha descartado realizar una consulta popular sobre el asunto, como proponía el Gobierno local. Y ha planteado que se acote al máximo este verano el espacio para esta controvertida fiesta en la playa, y su desaparición para 2017, siendo reemplazada por una oferta alternativa. Los partidos en el pleno tendrán la última palabra.
La Mesa que analiza la viabilidad de la celebración de las barbacoas del Trofeo Carranza, en su tercera reunión celebrada a finales de la pasada semana, tras constituirse en abril, ha descartado realizar una consulta popular sobre el asunto, como proponía el Gobierno local, debido a que actualmente no existe un reglamento de participación que recoja esta herramienta.
Por otro lado, esta mesa integrada por representantes de asociaciones de vecinos, de consumidores y ecologistas, además de los partidos con representación en el Ayuntamiento, entre otros, ha planteado finalmente que se acote al máximo este verano el espacio para esta controvertida fiesta en la playa convertida en macro-botellón, y su desaparición para 2017, siendo reemplazada por una oferta cultural y de ocio alternativa.
El bipartito llevará esta propuesta a pleno municipal para que sea refrendada por los “representantes” de la ciudadanía; en la mesa, ni PP ni PSOE se ‘mojaron’, y prefieren reservar su voto para ese pleno. Los primeros consideran que este foro no representa a todos los gaditanos, y los socialistas abogan por una supresión de las barbacoas “de forma paulatina”.
Durante las reuniones de la mesa, cada una de las partes implicadas y/o afectadas con esta celebración han ido exponiendo sus argumentos tanto a favor como en contra. El concejal de Medio Ambiente, Manuel González Bauza, resaltaba semanas atrás que “por fin se afronte con valentía y naturalidad desde el Ayuntamiento un debate que está en la calle, en la ciudad, desde hace tiempo”.
UNAS 30.000 PERSONAS EN 2015
La afluencia de público a la noche de las barbacoas del Trofeo del pasado verano fue finalmente “más o menos la misma” de las últimas ediciones, “alrededor de 30.000 personas”, pese a que la mitad del nuevo Gobierno municipal (Por Cádiz sí se puede, con el reproche de Ganar Cádiz en Común) decidió sorprendentemente ampliar 200 metros la zona acotada de la Victoria donde estaba permitida la fiesta en los últimos años.
Las horas bajas en la que se ha instalado este polémico evento es más que evidente, si se atienden a sus cifras, pese a que 30.000 personas, siguen siendo muchas. Pero es que hace algo más de una década, en 2005, se llegó a hablar hasta de 300.000… y a principios de siglo el entonces Gobierno local de Teófila Martínez promovía la asistencia con el objetivo de alcanzar algún record Güiness al olorcito de pinchitos y choricitos al fuego.
A partir de informes de la Demarcación de Costas señalando la importante contaminación del litoral posterior al evento, y de fotos vergonzosas de sofás y otros bártulos abandonados en la arena, el Consistorio cambió radicalmente sus simpatías al respecto y optó por minimizar todo lo posible esta fiesta vinculada a la final del Trofeo, acotando un espacio de la playa para las barbacoas e imponiendo un límite horario, todo ello con el pretexto de facilitar la limpieza. DIARIO Bahía de Cádiz
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