La Policía Nacional, como continuación a las gestiones de identificación realizadas la misma noche de los hechos por la Policía Local ante una posible agresión homófoba en Cádiz, ha localizado y detenido a un hombre y a una mujer como presuntos autores de un delito de lesiones agravado por la actitud hostil hacía las víctimas debido a su orientación e identidad sexual. Se trata de la pareja que en la madrugada del pasado sábado insultó y agredió en la zona de ocio de la Punta de San Felipe a dos chicas que se besaban en la puerta de uno de los bares.
Este hecho tuvo su condena pública por parte del Ayuntamiento y en la tarde del pasado martes diferentes colectivos LGTBI gaditanos convocaban una concentración en la plaza del Palillero, incluyendo una besada, “en repulsa a la agresión lesbofóbica”.
La investigación policial se inició tras interponer las víctimas la correspondiente denuncia en la Comisaría Provincial. Fruto de las gestiones practicadas y de los datos aportados por los agentes de la Policía Local que intervinieron en la Punta, ha permitido recabar testimonios y pruebas que corroboraban la versión de las dos jóvenes.
De este modo, apostillan desde la Policía en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, que “queda constatado que las dos víctimas fueron objeto de burla, insultos e instigación por parte de un grupo de jóvenes, que se encontraban reunidos en el interior de la discoteca, aunque se determinó que solo uno de los detenidos fue quién presentó mayor hostigamiento verbal hacía las víctimas, así como que la otra detenida, fue la que arrojó un vaso de cristal a la cara de una de las víctimas”.
“Todo indica”, apuntan desde la Policía Nacional, que el origen del menosprecio y la hostilidad sufrida se debió a la orientación sexual de las chicas, por lo que se instruyeron las correspondientes diligencias. Los presuntos autores al estar plenamente identificados fueron localizados y citados para proceder a su detención, tomándoles declaración e informándoles de sus derechos, como “presuntos autores un delito con ocasión del ejercicio de los derechos fundamentales y de las libertades públicas garantizados por la Constitución”; o sea, entrarían en lo llamado delito de odio.
Tras ser oídos en declaración, los detenidos han sido puestos en libertad con cargos y advertidos de la obligación de comparecer ante la Autoridad Judicial competente, tan pronto sean citados para ello.