Tras los hechos de la pasada semana, en la que Cádiz fue triste portada en medios de comunicación de todo el país y más allá (pese a que la Policía Nacional defiende que su dispositivo fue “el adecuado” y apenas se produjeron incidencias más allá de ciertas aglomeraciones), “esta vez sí que tenemos que ser un ejemplo y la mejor forma de apoyar al equipo y a la ciudad es quedarse en casa. Ya somos un equipo de Primera. Ahora tenemos que demostrar que somos una afición de Primera”, ha subrayado el subdelegado del Gobierno en Cádiz, José Pacheco, de cara al último partido de liga de este lunes, en el que el equipo amarillo busca además certificar el ser campeón de la categoría.
“Confiamos –ha añadido el alcalde, José María González ‘Kichi’, en que el cadismo afronte con responsabilidad este final de temporada, una vez ya se ha conseguido el ascenso, y dé ejemplo de sentido común, de seguimiento de las recomendaciones sanitarias y de respeto por los demás como hizo la gran mayoría de la afición cadista el pasado fin de semana, pese a que hubo una pequeña parte que no lo hizo”.
Al respecto, el pasado viernes se celebraba una reunión de la Junta Local de Seguridad en la que Subdelegación y Ayuntamiento han abordado con los distintos cuerpos de seguridad el dispositivo para el Cádiz-Albacete.
Según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz, en este caso se ha diseñado “un dispositivo ambicioso y basado en la prevención”, preparado para convertir los alrededores del estadio Ramón de Carranza en “una zona limpia y segura”, algo que no se hizo de cara al encuentro de hace una semana. Habrá dos niveles de prevención, uno en el perímetro más cercano al campo y otro ampliado en calles adyacentes “para evitar aglomeraciones”.
El dispositivo comenzará varias horas antes del inicio del partido, previsto a las 21 horas y que de nuevo se jugará a puerta cerrada, tal y como marcan los protocolos establecidos por LaLiga para acabar esta adulterada campaña 2019/2020 a causa de la pandemia del coronavirus. Se van a cerrar con vallas varias calles cercanas y se va a establecer un círculo de “protección y seguridad” en otras más alejadas.
Asimismo, para evitar que se produzcan esas imágenes que tanto molestan a algunos de concentraciones de aficionados en el acceso al Carranza o sus aledaños, no se va a dar a conocer el recorrido del autobús de los hombres de Álvaro Cervera. Además, éste se podrá cambiar hasta el último momento, “por lo que no tiene sentido acercarse a las inmediaciones. No va a ser posible aproximarse ni al autobús ni a los jugadores”, dejan claro desde Subdelegación. También se ha establecido contacto con los bares y establecimientos hosteleros de la zona para recordar la obligatoriedad de que cumplan con los aforos permitidos.
Por otro lado, se reitera que el Cádiz CF, ya en Primera, no va a hacer ningún tipo de acto o recepción oficial para celebrarlo.
COORDINACIÓN
A la coordinación entre los distintos cuerpos de seguridad, como Policía Nacional, Guardia Civil, Policía Local y la policía autonómica, se suma la activación del servicio de Protección Civil.
Agentes de la Nacional acompañarán la entrada y la salida de los autobuses de ambos equipos. Para controlar que todo transcurra “con normalidad”, contará con antidisturbios de la Unidad de Intervención Policial (UIP), de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) y de la Unidad de Caballería de Sevilla, entre otras especialidades. La Guardia Civil de la Comandancia de Cádiz va a garantizar por su lado la movilidad en las tres vías de acceso a la capital y mantendrá la coordinación con otros cuerpos policiales para intervenir en caso de que fuera necesario. Y la Policía Local será la encargada de regular el tráfico, y de mantener libres las vías de acceso y evacuación, además de disponer vallas de contención que eviten el acceso a zonas restringidas.
Por su parte, se incorpora al dispositivo la policía autonómica apoyando el dispositivo en los alrededores, realizando labores de información y control sobre el uso obligatorio de las mascarillas y recordando las medidas de distanciamiento interpersonal, básicas en tiempos de pandemia.