La oposición en el Ayuntamiento de Cádiz “boicotea el desarrollo del proyecto hotelero en Tiempo Libre”. Es la queja de la portavoz del equipo de Gobierno, Ana Fernández, tras el pleno ordinario de diciembre en el que PP, PSOE, Cs y el edil no adscrito lograron retirar el punto sobre la aprobación definitiva del estudio de detalle de dicho proyecto. Q Hoteles, que iniciaba las obras la pasada primavera, plantea en lo que fuera un equipamiento de turismo social, abandonado desde hace años, un proyecto hotelero con más de 250 habitaciones, aparcamiento subterráneo y hasta un centro comercial en los bajos.
“Que las derechas de Cádiz quieran paralizar otro proyecto de ciudad no nos sorprende, y cada vez nos sorprende menos, pues no es la primera vez, que el PSOE se alinee con ellas para impedir el avance de un proyecto clave, que precisaba de un trámite que elevamos a pleno para no poner en riesgo la inversión”, reitera la edil de Adelante.
En concreto, el punto presentado por el Ejecutivo liderado por José María González ‘Kichi’ para la aprobación definitiva del estudio de detalle para la Acción Puntual AP-EX 19 R1 Residencia Tiempo Libre R1 (y desestimar de este modo las alegaciones presentadas al documento en base a los informes elaborados por los técnicos) era retirado tras solicitarlo todos los grupos de la oposición, cuestionando que permita elevar la construcción a 15 plantas.
Al respecto, y durante la sesión plenaria virtual, el alcalde deseaba que “esta postura que ha obligado la retirada del punto y por ende, un retraso en la aprobación del proyecto, no repercuta negativamente en el mismo y el edificio del Tiempo Libre no pase a formar parte de la lista de proyectos parados de la ciudad”.
“GOZA DE TODOS LOS PARABIENES JURÍDICOS”
Por su lado, el concejal de Urbanismo, Martín Vila, subraya en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz que el expediente, pese a lo argumentado por la oposición, “goza de los parabienes jurídicos y cumple con el planeamiento vigente”, y que además cuenta con el informe positivo de la delegación territorial de Fomento de la Junta de Andalucía. Por su parte, ni la Demarcación de Costas Andalucía-Atlántico ni la delegación territorial de Medio Ambiente de la Junta se han opuesto al desarrollo del proyecto.
Es más, el expediente se ha intentado elevar para su aprobación definitiva a petición del promotor hotelero (que le compró la Residencia a la Junta en subasta pública por casi 12 millones de euros), que trasladó al Ayuntamiento la necesidad de que avanzara en lo posible la tramitación urbanística para que no estuviera en riesgo el proyecto, que depende de financiación europea.
“Nosotros buscábamos que el proyecto continuara y despejar incertidumbres, porque no podemos permitir que pase a formar parte de la lista de proyectos inacabados en la ciudad. Ese es el principal objetivo que se ha marcado el equipo de Gobierno pero que, desafortunadamente, se está topando con el rechazo constante de la oposición”, se lamenta Vila.
Al hilo, califica de “cobarde” la decisión de la oposición, que “en vez de afrontar el voto en contra, ha pedido la retirada porque no se atreven a hacer público su voto en contra al estudio de detalle, porque saben que lo que plantea el Gobierno es perfectamente legal”. Y destaca que se ha sentado con los vecinos de la zona (del paseo marítimo y Muñoz Arenillas, que se dicen afectados por el incremento de altura en varias plantas planteado) y la empresa promotora, “favoreciendo la interlocución entre ambas partes”.
Pero hay más: el edil de Urbanismo considera “kafkiano” y “absurdo” que se tache de “agresión ambiental” el proyecto por la altura que tendrá, cuando mantiene la misma que el edificio colindante. “Es un argumento ridículo y que cae por su propio peso, y para colmo –añade- lo esgrimen partidos que han permitido proyectos como El Algarrobico en el Cabo de Gata, y que avalan el de Valdevaqueros o el de Trafalgar, que sí suponen atentados más que evidentes contra el entorno y el medio ambiente”. Si es verdad que ecologistas han manifestado meses atrás su oposición al proyecto por “repetir la edificación franquista de los años 60 y 70”.
Por último, resalta la “incoherencia” del PSOE en sus argumentos, toda vez que ha tachado de “agresión ambiental” el proyecto hotelero de Tiempo Libre y, acto seguido, en el mismo pleno, votaba en contra de la propuesta de ampliación del Parque Natural Bahía de Cádiz (un rechazo con el que coinciden los socialistas en consistorios vecinos).