CRÍTICA. El Baluarte de la Candelaria de Cádiz cerró el pasado viernes 28 de agosto el ciclo de cuatro conciertos ‘Noche…’, en los que en cada cita participan varios artistas emergentes en el panorama musical español actual. En el último, bajo el lema de ‘Noche Creciente’, los diferentes invitados haciendo honor al nombre del concierto, hicieron que el público estuviera más entregado a medida que pasaban las horas.
La música comenzaba a las nueve y media con los teloneros Pan d`antié, un grupo roteño en el que destaca su calidad instrumental, contando como agrupación con flauta travesera, dos palmeros, cajón, bajo y dos guitarras españolas. El grupo ofrece letras divertidas y cotidianas que hacen de su autodenominada “rumba de peleíta” un divertido rato musical.
El siguiente en aparecer es Capitán Cobarde, nuevo nombre de Albertucho, que irrumpe en escena cual hombre orquesta con guitarra en mano, bombo y sonajas a los pies, instrumentos que sustituye en algunas ocasiones por banjo y armónica. Albertucho interpretó con su voz grave y ligeramente rasgada canciones de sus discos anteriores con canciones como ‘La gata’, ‘La primavera’, ‘Alegría’ o ‘El pisito’, para pasar a sonidos más cercanos al country, bluegrass o new folk de su próximo disco ‘Capitán Cobarde’ que saldrá a la venta el 18 de septiembre y que incluye temas que se interpretaron en el concierto como ‘El jovencito Frankestein’. Terminó su actuación con la colaboración del guitarrista Diego Pozo, interpretando ambos el tema ‘Una flor’.
A continuación irrumpe en escena Marinah, conocida ex vocalista de Ojos de Brujo que comparte escenario con los músicos cubanos Carlos Sarduy (trompeta y teclados) y Dasari Kumar con mesa de mezclas, sintetizadores y voz en algunos temas en los que compartió escenario con Marinah.
La cantante deleitó al público con temas de su primer disco en solitario titulado ‘El baile de las horas’ del que eligió temas como ‘El carrusel’, ‘Dame flores’ o ‘Te gustó’, e interpretando temas clásicos de Ojos de Brujo como ‘Tahitá’ o ‘Ná en la Nevera’.
Marinah es la compositora de todos los temas de su disco y tiene un estilo resultante de una curiosa fusión de rumba, música electrónica, reggae, y ritmos cubanos que ella misma denominó durante el concierto como “afrolailo”. La artista improvisa letras continuamente, animando al público a participar y consiguió caldear el ambiente puesto que hizo no sólo que todos se levantaran de las sillas para bailar, sino que ella misma bajó del escenario para subir con gente que bailara y músicos del grupo telonero que espontáneamente compartieron escenario con la artista. Marinah no sólo consiguió poner en pie al público, sino que también provocó las risas del mismo aludiendo al actual alcalde en sus improvisadas letras: “y si está el Kichi que suba, que lo quiero ver bailar”.
Cerraba el concierto el joven compositor malagueño El Kanka. Éste aporta letras frescas, divertidas e irónicas en diferentes estilos musicales: rumba, funk, bolero, etc. con un sorprendente desparpajo y frescura sobre el escenario, que comparte con el percusionista El Manín que le hace los coros y que interpretó también dos temas propios: ‘El banquero’ y ‘Vivencias de convivencia’. En el concierto disfrutamos de temas de los dos álbumes publicados de El Kanka hasta el momento, ‘Lo mal que estoy y lo poco que me quejo’ (2013) y ‘El día de suerte de Juan Gómez’ (2014).
Pasaban las dos de la madrugada y el público estaba mucho más entregado que al comienzo: una auténtica “noche creciente”. DIARIO Bahía de Cádiz
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