Las obras de adecuación y modernización de la Estación de Bombeo de Aguas Residuales (EBAR) de Cortadura, en Cádiz, concluirán “en los próximos días”. Estos trabajos, en los que se invierten casi 858.000 euros, tienen como finalidad dotar de mayor operatividad y seguridad a la planta, automatizar los procesos e incrementar su capacidad para mejorar así el funcionamiento de bombeo del caudal que se impulsa hacia la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Cádiz-San Fernando.
Para conocer la marcha de estas obras, la concejala y presidenta de Aguas de Cádiz, Ana Fernández, ha visitado las instalaciones acompañada del gerente, Jesús Oliden, y de técnicos tanto de la empresa municipal como de la sociedad concesionaria que explota la depuradora (la Agrupación de Interés Económico formada por ACS, Hidralia, GS Inima, Unicaja y EBN) con quienes se ha trabajado coordinadamente.
Las obras han consistido, entre otras actuaciones, en la sustitución de las bombas de impulsión por otras más modernas anti atascos con mayor capacidad de bombeo; en la automatización de la estación a través de telemando y telecontrol y en una obra civil para la adecuación y modernización de todo el recinto.
En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, Fernández resalta que esta actuación “es de suma importancia puesto que repercutirá en una mejora de las condiciones medioambientales de la Bahía de Cádiz, ya que al aumentar los caudales enviados a la EDAR en los episodios de lluvia disminuyen los volúmenes de los vertidos autorizados en estas circunstancias”.
“Desde Aguas de Cádiz seguimos trabajando en una de las líneas marcadas en su plan estratégico que es la mejora de las condiciones de medioambientales del entorno de la ciudad de Cádiz y lo hacemos, además, optimizando nuestros propios recursos de la manera más eficiente posible”, subraya esta edil de Adelante Cádiz.
Con todo, esta actuación no será la última a realizar en estas instalaciones, ya que una vez que esté aprobado el nuevo canon de mejora local se tiene previsto realizar inversiones complementarias encaminadas a seguir reduciendo y eliminando, en la medida de los posible, los vertidos autorizados que se producen en el saco interno de la Bahía, cuya masa de agua está catalogada como zona sensible.
La EBAR Cortadura, situada en la esquina de las calles Chiclana y El Puerto de Santa María, frente a los depósitos de agua potable de la Zona Franca y anexas al punto limpio, fue construida a finales de los años 80 del siglo pasado, por lo que las instalaciones estaban bastante deterioradas y su funcionamiento hidráulico necesitaba ser mejorado.
A esta estación llegan actualmente cuatro conducciones: dos de ellas procedentes de la EBAR La Martona, una de la EBAR de Tabacalera y otra de la EBAR Villa de Rota. Esto quiere decir que todas las aguas residuales de la capital pasan por aquí antes de ser impulsadas hacia la depuradora que se comparte con La Isla.