El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Cádiz ha rechazado el recurso del PP contra la reprobación a los concejales de la derecha, Teófila Martínez e Ignacio Romaní, que hizo el pleno de octubre de 2017 del Ayuntamiento. Se considera completamente legal.
Al respecto, el alcalde, José María González ‘Kichi’, considera “lógico” que los tribunales hayan respaldado la reprobación del pleno, tras los insultos y gritos que Martínez y Romaní le profirieron días antes, tras la Junta General de la sociedad municipal Cádiz 2000 (en la que los populares pretendían, por enésima vez, paralizar el proceso de remunicipalización de los servicios de playa).
“La situación es cuanto menos surrealista, Teófila Martínez e Ignacio Romaní me insultan, me gritan, me señalan con el dedo mientras me llaman fascista, cacique y cobarde y, en lugar de disculparse, en lugar de pedir perdón a la ciudad por la imagen de matonismo político, por los insultos y la agresividad, llevan a los tribunales su reprobación”, subraya el primer edil de Sí se puede en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz.
En este sentido, sostiene que deberían “sentir vergüenza” por una actuación así ante los ojos de la ciudad y que transcurrió en el salón de plenos de la Casa Consistorial. “Aunque tampoco sintieron vergüenza tras dejar una deuda de 275 millones, ni cuando aparecieron en los papeles de Bárcenas o mientras derrochaban el dinero público en autobombo y Campari”, ironiza.
Asimismo, González Santos considera que “tras un numerito así, deberían plantearse seriamente si pueden seguir ejerciendo la política, si pueden con esa actitud realizar ese servicio público para el que estamos aquí, puesto que aquel comportamiento está muy lejos de la actitud y la imagen que se le exige a un servidor público”.
Por último, el alcalde ha recordado que su equipo de Gobierno sólo exigió unas disculpas, “nada más”. Unas disculpas que mantienen que deben pedir y que “aún estamos dispuestos a aceptar”. José María González considera que esas disculpas no sólo son para él, que recibió los insultos, “sino a todos los vecinos que no se merecen tener que soportar una escena de matonismo político como esa”. Por eso, les anima a recapacitar tanto a Martínez (que acaba de ser recolocada como presidenta de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz, y dejará su acta de concejal y su acta de diputada nacional) como a Romaní, “aunque mucho me temo que el ego, la falta de humildad y humanidad no se lo permiten”.