Seis años después el bloque de viviendas de la avenida de Portugal 56, en la capital gaditana, vuelve a estar vacío. Se desvanece la llamada Corrala de la Bahía que iniciaban en enero de 2015 familias necesitadas que ocupaban ilegalmente estos pisos de nueva construcción embargados por un banco a la constructora Goncava, ante la “falta de soluciones” por parte del Ayuntamiento, entonces gobernado por el PP.
Durante todo este tiempo muchas de los moradores iniciales han ido abandonando estas casas y su lucha por un alquiler social, y el acceso legal a la luz y el agua, con el respaldo del Ayuntamiento, sobre todo en los primeros años de ocupación; al tiempo que se había llegado a convertir por momentos en un punto conflictivo de la barriada de Segunda Aguada por el trapicheo de drogas y peleas.
El bloque de pisos estaba en manos del Banco Santander, que parecía hacer oídos sordos a la problemática, y ni siquiera se personó en su momento en el juicio por la ocupación ilegal. Ahora se sabe que esta entidad bancaria se desprendió del inmueble en septiembre de 2018, cuando alcanzó un acuerdo con una filial del grupo de inversión estadounidense Cerberus Capital Managemenpara para la venta de una cartera de inmuebles residenciales por un importe de unos 1.535 millones de euros; entre ellos, entraba este de la ciudad de Cádiz, que pasaba a ser gestionado por Haya Real Estate. Y esta sociedad es la que ha negociado en los últimos meses una ‘solución’ logrando un desalojo más o menos amistoso y sin incidentes muy reseñables.
Así, a lo largo del lunes y la mañana de este martes se ha visibilizado la marcha de los vecinos que quedaban actualmente en el bloque –la mayoría no son ya las familias que fundaron la Corrala-, con el trasiego de bolsas, maletas y enseres personales.
Según informan diferentes medios locales, se ha acordado la entrega de un cheque de algo más de 5.000 euros para cada uno de los grupos de personas que residían irregularmente en cada piso en la actualidad, como compromiso para que desalojaran las viviendas sin reclamación alguna. Asimismo, los ahora propietarios del bloque han enviado a personal de seguridad para que a partir de ahora se eviten nuevas entradas.
UNA SITUACIÓN ENQUISTADA DURANTE AÑOS
Los primeros moradores en situación límite de la Corrala de la Bahía defendían en su momento que solo querían un techo, y reclamaban vivir en una situación legal, y por ello pedían “un alquiler social acorde a sus ingresos”. Un mes después, el pleno de febrero de 2015 del Ayuntamiento ya aprobaba por unanimidad una moción de urgencia del PP –entonces era alcaldesa Teófila Martínez- instando a la entonces consejería de Vivienda de la Junta de Andalucía a que negociara con el banco propietario un acuerdo al respecto. Nunca se supo nada de ello.
Y un año después, ya con José María González ‘Kichi’ como primer edil –su partido entonces, Podemos, apoyaba explícitamente a la Corrala-, el Consistorio sacaba adelante otra moción –respaldada por más de una veintena de colectivos- instando al Banco Santander a que autorizara dar luz y agua al inmueble; pese a ello y a los escritos enviados posteriormente por el alcalde y las protestas a las puertas de dicho banco, en la plaza del Palillero, la entidad ignoró todos los ruegos.
Desde entonces y hasta hoy, el problema se ha ido enquistando y despareciendo de la agenda política y mediática, salvo noticias puntuales de reyertas, intervenciones policiales por temas de drogas y rifirrafes partidistas. DIARIO Bahía de Cádiz
Y EL PP PIDE AL ALCALDE QUE SE DISCULPE
No ha tardado el ahora principal partido de la oposición en aprovechar esta fecha para usarla contra el alcalde. Así, el concejal del PP José Carlos Teruel entiende que ahora que esta ocupación ilegal se ha resuelto, González Santos, que según la derecha “utilizó electoral y demagógicamente a las familias que se instalaron allí en 2015”, debe “pedir disculpas por esa utilización y sobre todo por su falta de interés en resolver un problema que, finalmente, afectó a muchos vecinos de la zona”.
“Parece una broma que al final el problema de la Corrala lo haya resuelto, en vez de el anticapitalista, el malvado capital, un fondo de inversión y encima norteamericano. Supongo que al alcalde le dará hasta vergüenza hablar hoy de la Corrala de la Bahía”, llega a decir Teruel.
Para el PP, lo ocurrido con este bloque de pisos “es la confirmación del fracaso de las políticas de vivienda de Kichi y su formación, sea la que sea ahora”. “La cruda realidad –se subraya- es que estas familias que iban a tener casa, luz y agua por obra divina de Kichi lo que tienen ahora son 5.000 euros de un fondo de inversión y la calle para correr”.