El Ayuntamiento de Cádiz va a participar en el proyecto europeo Cospro, gestionado por la Agencia Europea para la Pequeña y Mediana Empresas (EASME), y por el que la ciudad intercambiará y compartirá experiencias de contratación pública responsable con otras seis ciudades de la Unión Europea.
La capital gaditana compartirá experiencia (sobre compras socialmente responsables, es decir, sobre aquellas compras que integren aspectos de sostenibilidad ambiental, sociales y éticos) con Bérgamo (Italia), Odense (Dinamarca), Östersund (Suecia), Gabrovo (Bulgaria), la Cámara Municipal de Torres Vedras (Portugal) y la Red Europea de Ciudades y Regiones de Economía Social (Bélgica). El socio líder es la ciudad italiana, y se trata de constituir una comunidad abierta, una red de prácticas en este campo para que cada uno de los socios pueda beneficiarse de la experiencia de los otros participantes en el proyecto.
El presupuesto total del proyecto es de más de 108.000 euros de los que la UE aporta casi 100.000. De esa cantidad, cerca de 15.000 los manejará el Instituto de Fomento Empleo y Formación (IFEF) del Ayuntamiento de Cádiz, mientras que deberá aportar a su vez 1.150 euros.
La iniciativa se pondrá en marcha en marzo de 2021 (con un año de duración) y la idea principal es que el Consistorio gaditano avance en prácticas en el campo de la economía social apoyándose en ejemplos de otras ciudades que gestionan bajo el mismo paraguas de la UE. Se centra en ciudades pequeñas y medianas “dadas las dificultades con las que suelen toparse al tratar con procedimientos innovadores frente a las repercusiones pertinentes que pueden tener en el contexto socioeconómico local”, se remarca en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz.
En la teoría, se busca que, desde la contratación pública, los ayuntamientos participantes mejoren la capacidad para comprender y utilizar diferentes enfoques que persiguen la sostenibilidad social a diferentes niveles, dentro de los procedimientos de adquisición. A su vez, esto impulsará a los interesados (principalmente los proveedores) a mejorar sus normas socialmente responsables bajo diferentes perfiles al mismo tiempo, por ejemplo, en lo que respecta a la atención a la búsqueda del interés general, la atención a las cláusulas socioambientales, la atención a las cláusulas de calidad del empleo, y otros.
El proyecto contempla la organización de tres misiones de economía social en Bérgamo (contratación de servicios sociales), en Torres Vedras (centrada en cláusulas sociales y ambientales) y en Odense (centrada en cláusulas de empleo). Tras todas ellas se redactará un documento en el que se identificarán las áreas de transferencia de conocimientos, se definirá un proceso de colaboración para lograr nuevas mejoras en la aplicación de una política eficaz de adquisición social; y se identificarán posibles cargas o cuellos de botella en los marcos reglamentarios de la contratación pública y su aplicación, con el horizonte de elaborar recomendaciones a la Comisión Europea y a los estados miembros.
El intercambio entre los territorios de los socios se verá enriquecido por la contribución de la Red Europea de Ciudades y Regiones de Economía Social, activa en el tema desde hace más de 20 años, aumentando su competencia en materia de formación, asesoramiento y apoyo a la aplicación territorial de las directivas de contratación pública (y su transposición nacional).
“ES INTERESANTE MANTENER UN CONTACTO FLUIDO CON CIUDADES EUROPEAS”
Al respecto, el concejal de Fomento, Carlos Paradas, incide en que se trata de un proyecto que requiere una inversión no muy alta para el Ayuntamiento gaditano, pero que tiene “mucha profundidad”, toda vez que busca “el progreso efectivo de las condiciones sociales desde las compras que realicen las administraciones públicas, que son uno de los grandes motores de contratación del sistema y que, desde su responsabilidad en materia de contratación, pueden ir contribuyendo a mejorar su entorno”.
Así, está “convencido” de que Cádiz “puede salir beneficiada de su participación en este proyecto y, al mismo tiempo, puede contribuir desde su experiencia a mejorar las contrataciones de otras ciudades europeas”, al tiempo que incide en que, igualmente, es muy positivo estar en contacto con otras ciudades europeas en un proyecto “justo en el nacimiento del nuevo marco de acción 2021-2025 de la UE, puesto que para ese periodo van a salir nuevas oportunidades bajo el paraguas comunitario”.
“Es interesante mantener un contacto fluido con distintas ciudades europeas para intercambiar impresiones, información y noticias sobre nuevos proyectos que salgan durante la próxima ventana de acción europea, y así aprovechar las herramientas que las autoridades europeas pongan a disposición de los municipios para progresar, para avanzar y para lograr transformaciones de futuro en nuestra ciudad y en la Bahía de Cádiz”, recalca este edil de Adelante.
Añade por otro lado que el Consistorio se encuentra trabajando, en paralelo, en otras oportunidades de futuro para avanzar en distintos campos que se abren con diversos proyectos europeos, y a los que la ciudad optará. En esta línea, se están tejiendo sinergias y alianzas con otros agentes estratégicos de la ciudad y de la comarca para presentarse de forma conjunta a proyectos europeos con la idea de sumar fuerzas, profundidad e incidencia de los mismos en la realidad tanto de la ciudad como de la Bahía en su conjunto, “ya que la idea es buscar también mejoras para potenciar la comarca y no sólo en sus municipios por separado”.