El Gobierno local en el Ayuntamiento de Cádiz se ha mostrado muy crítico con las nuevas medidas impuestas por la Junta de Andalucía para tratar de frenar la segunda ola de contagios de coronavirus. En el marco del nuevo estado de alarma decretado desde el Gobierno central, el Ejecutivo andaluz ha ordenado durante dos semanas, en principio, el cierre perimetral de todos los municipios, el cierre de negocios no esenciales a partir de las seis de la tarde, y el toque de queda nocturno desde las diez. Además, el distrito sanitario Bahía de Cádiz-La Janda ha entrado en fase 4, que implica otra serie de restricciones en cuanto a limitación de aforos, básicamente.
Ante ello, desde el equipo de Gobierno de la capital gaditana se considera “injusto” que el Gobierno andaluz de derechas “señale al ocio y comercio cuando no está invirtiendo en mejorar los servicios públicos para hacer frente a la pandemia”.
La concejala de Comercio y Turismo, Monte Mures, incide en que “hay que poner en el centro la salud sobre todas las cosas”, pero “eso se logra y se demuestra invirtiendo más en sanidad y educación públicas para que haya más tejido sanitario público, para que esté mejor dotado y para que, por ejemplo, en los colegios baje la ratio de alumnado en cada clase ganando en seguridad”.
En este sentido, se critica una vez más que la Junta “no haya invertido en contratar a más personal sanitario, a más rastreadores, no haya fomentado una mejora de condiciones para que se acceda al teletrabajo, ni haya intentado dar clases al aire libre”, pero que, por contra, sí se muestre decidida a “señalar al ocio y la cultura a la mínima oportunidad” cerrando negocios “no esenciales” a las 18 horas, cerrando perimetralmente localidades y limitando la movilidad en las propias localidades desde las 22 horas.
“Es tremendamente injusto, máxime cuando no está demostrado que esos sectores sean los protagonistas de la mayoría de contagios y cuando es posible el desarrollo de la cultura, el comercio y la hostelería en ámbitos seguros”, recalca Mures, al tiempo que critica que la Junta “intente arreglarlo todo restringiendo la libertad individual y colectiva, todo a base de prohibiciones”.
Esta edil de Adelante reitera en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz que “es viable la cultura, el comercio y la hostelería en espacios seguros, y a eso deberían ir dirigidos los esfuerzos de la Junta de Andalucía en vez de tomar la medida más fácil pero también la más dañina que es, primero no hacer nada y luego, cuando se produce un aumento de contagios como consecuencia de no hacer nada, limitar la libertad individual y colectiva”. No obstante, apunta que si ahora se aboga por aplicar estas restricciones, también “debe aprobar ayudas para los sectores afectados, a fin de que el tejido comercial y hostelero pueda sobrellevar esta situación”.
De la misma forma, la concejala de Cultura, Lola Cazalilla, ha criticado la “criminalización constante de la cultura” por parte de la Junta en sus medidas, y lamenta que “no se le dé la importancia que merece a este sector, tan importante, imprescindible, para la sociedad y para estos momentos trascendentales”.
Y repite el argumento de su compañera: la administración autonómica “no ha invertido en personal sanitario, ni en rastreadores, ni en bajar la ratio de alumnado en los colegios, ni ha promovido el teletrabajo. No ha hecho nada por adaptar la realidad a las circunstancias de la pandemia, pero a la primera de cambio le mete un tajo tremendo a la cultura y limita la libertad individual y colectiva como si fuera la única medida posible. Es injusto e hipócrita”.
La concejalía de Cultura ya ha anunciado que trabaja en una replanificación de su programación hasta el 23 de noviembre para adaptarla a las nuevas medidas; su intención es cuadrar los horarios de los eventos programados en el Gran Teatro Falla y otros de sus espacios para enmarcarlos en esa limitación de las seis de la tarde, e intentar así no suspender. En la búsqueda de nuevas ventanas horarias se barajan sesiones matinales los fines de semana, convocar sesiones de mañana y tarde en aquellos espectáculos cuyo montaje lo permita, y adelantar a las 16 horas el comienzo de algunos eventos.
Por su lado, el alcalde accidental, Demetrio Quirós -que se reunía telemáticamente en la tarde del lunes con la delegada territorial de Salud, Isabel Paredes, junto a alcaldes de los municipios del distrito sanitario-, ha pedido a la Junta “mayor responsabilidad” a la hora de trasladar las medidas y restricciones y ha reivindicado que la información se traslade a los ayuntamientos con mayor antelación para poder adaptar y adecuar protocolos y procesos de control y prevención conforme a las nuevas medidas que se van a implantar. Y es que ha sido en la tarde del lunes cuando se ha conocido el cambio de nivel de alerta del 3 al 4 y, por tanto, la entrada en vigor de nuevas medidas en apenas unas horas, a media noche.
Quirós también reivindica la necesidad de mejorar la financiación de los ayuntamientos, que es “la primera mano tendida a los vecinos ante sus problemas, la administración a la que primero acuden y a la que demandan mayor agilidad, y en primer lugar la que está soportando el mayor peso de la complicada situación que se está atravesando en muchas ciudades por la pandemia”. E igualmente, ha propuesto que se permita el reparto de comida a domicilio de establecimientos de hostelería más allá de las 22 horas (el toque de queda), a fin de que este sector del tejido económico de la ciudad pueda paliar, al menos con esta modalidad, la complicada situación.
AUTOBUSES Y BASURA
En las últimas horas, el Consistorio ha adaptado horarios de sus diferentes servicios municipales (equipamientos culturales, turísticos, bibliotecas, instalaciones deportivas…) a las nuevas restricciones frente a la pandemia.
Destacan entre ellas la reducción del aforo en el transporte público al 50%. Así, si hasta ahora el aforo en los buses de línea de la ciudad eran del 75% del total en los usuarios que iban de pie y del 100% en los que iban sentados, ahora el aforo se ha recortado al 50% del total en ambos conceptos. Estas nuevas medidas se complementan a las que ya vienen desarrollándose desde hace meses: la limpieza y desinfección diaria de los vehículos, la instalación de pantallas protectoras para conductores, la obligación de que permanezcan abiertas las ventanas y la obligación de llevar mascarilla. Mientras, varios partidos de la oposición exigen que también se aumente la frecuencia de los autobuses.
Además, la concejalía de Medio Ambiente ha decretado la modificación de horarios de los servicios municipales de limpieza viaria y recogida y gestión de residuos. Al respecto, los vecinos podrán sacar a partir de ya la basura (orgánica) entre las 18 y las 22 horas, mientras tanto el papel y cartón como los envases ligeros, el aceite vegetal usado y textiles se podrán depositar entre las 7 y las 22 horas, y el vidrio entre las 9 y las 22 horas. Además, se volverá a llevar a cabo en horario nocturno la desinfección de los entornos y zonas exteriores de equipamientos con mucha afluencia: centros educativos, centros sanitarios, farmacias, centros de mayores, supermercados, parques infantiles y contenedores de basura.