El conjunto amarillo se vuelve con los tres puntos de Soria (0-3) y mantiene la tercera plaza de la clasificación, con 44 puntos, empatado con el Tenerife. Un partido, el disputado ante el Numancia en la mañana del domingo –primer domingo de carnaval-, con una primera mitad sosa e igualada y una segunda en la que el gol de Imaz y la expulsión del rojillo Iñigo Pérez parecían allanar la victoria cadista. No obstante, el rival buscó el empate encontrándose una defensa con demasiadas dudas, hasta que Aketxe y Salvi remataron con sendos tantos a la contra, ya al final y después de minutos de sufrimiento.
Tras la derrota en Getafe y el empate ante el Reus en Carranza, los de Álvaro Cervera necesitaban este domingo una victoria para enderezar este inesperado rumbo –el de luchar por el ascenso y no por evitar el descenso- y recordarles a los equipos que aprietan en la zona alta de la clasificación, que no están allí arriba de casualidad.
En Los Pajaritos de Soria el Cádiz se presentó con pocos cambios: volvía Sankaré a la defensa tras cumplir un partido de sanción, y Jesús Imaz debutaba como titular en el sitio habitual de Rubén Cruz. En el once: Cifuentes; Aridane, Sankaré, Brian y Carpio; Abdullah, José Mari e Imaz; y arriba, Salvi, Álvaro y Ortuño.
Aunque se vio una primera parte igualada y por momentos densa, con pocos disparos a puerta, hubo alguna ocasión más generada por los de la Tacita: la más peligrosa llegaría en el minuto 31 con un tiro de Alvarito que el meta Aitor Fernández despejó a córner.
Superado el descanso, los visitantes salieron al verde encerrando al Numancia, aunque los despistes y errores atrás ayudaron a los hombres de Arrasate a entrar en el encuentro. En uno de ellos, Pablo Valcarce estrellaba la pelota en el larguero.
Mas cuando los de casa parecían dominar la situación, Imaz aprovechaba tras un saque de esquina un rechace de la zaga para desde la frontal probar y hacer el 0-1, cumplido el minuto 10 de esta segunda mitad. A raíz de ahí, el Cádiz jugó cómodo –en su salsa, a la contra- y pudo sentenciar en varias acciones, como un centro de Salvi al que Ortuño no llegó por poco. Y además, el Numancia se quedaba mermado con un futbolista menos por la roja directa vista por Iñigo Pérez tras una dura entrada a Abdullah.
Pero en el fútbol no valen las confianzas: los de Cervera, viéndose por delante en el marcador y con un jugador más, parece que se relajaron y a la vez, ante la presión rival, fallaron atrás una y otra vez, surgiendo las dudas y el nerviosismo. A ocho minutos del final pudo llegar el empate con una doble ocasión con Manu del Moral y Valcarce.
El entrenador buscaba parar este descontrol optando por Cruz y sacando al delantero, Ortuño. Y del posible empate, se pasó a la goleada. En el 44, Álvaro cedía a Aketxe para que marcara a merced en el segundo palo. Y ya en el descuento una nueva asistencia del utrerano permitía que Salvi firmara el 0-3.
“Cuando el rival se queda con uno menos va a empatar al partido y es un acto de valentía, pero eso te deja desguarnecido y lo normal es que jugadores como Álvaro y Salvi te hagan mucho daño”, apuntó tras el partido en rueda de prensa Cervera: “nos vamos contentos. Hoy hemos tenido un poco de fortuna”. “Tenemos un objetivo y un camino muy largo por recorrer. Cuando encontremos la salvación no pensaremos en otra cosa”, apostilló. El domingo que viene, en este ‘camino’ y de nuevo fuera, el Cádiz visita al Real Oviedo, hoy un rival directo en la pelea por los puestos de liguilla de ascenso. DIARIO Bahía de Cádiz
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