Cientos de jóvenes han salido a la calle en Cádiz este jueves, sumándose a la convocatoria en todo el país promovida por el Sindicato de Estudiantes, para decir no al decreto 3+2 que “pretende la completa privatización de la universidad pública” y exigir su retirada. Un decreto impuesto por el Gobierno central del PP que persigue la reducción de la duración de los grados y la consiguiente ampliación de los másteres, cuyo coste supera más del doble del de los grados. Además de las protestas, se cumplía el segundo día de huelga en secundaria y universidad.
Cientos de jóvenes han salido a la calle en Cádiz en la mañana del jueves, sumándose a la convocatoria en todo el país promovida por el Sindicato de Estudiantes, para decir no al decreto 3+2 y exigir su retirada. Un decreto impuesto por el Gobierno central del PP que persigue la reducción de la duración de los grados universitarios (de 4 a 3 años), lo que “supondrá su completa devaluación convirtiendo éste título en papel mojado para el mercado laboral”; y la consiguiente ampliación de los másteres (de 1 a 2 años), cuyo coste supera más del doble del de los grados, “con precios impagables para la mayoría”. Este jueves 26, además de las protestas, se cumplía el segundo de huelga estudiantil en secundaria y universidad.
“No les vale acabar con las becas, no les vale con la Lomce, no les vale con subir brutalmente las tasas. Este Gobierno moribundo quiere acabar con nuestro derecho a estudiar en la universidad, expulsar de sus aulas a todos los que no seamos de familias pudientes. Pero no lo vamos a consentir. Todos juntos, desde todas las facultades e institutos, le vamos a dar una lección a Wert, un ministro desacreditado y enloquecido. Vamos a derrotar su decreto 3+2 con el que pretende la completa privatización de la universidad pública, y que sólo tengan un titulo universitario los que puedan cursar dos años de máster, gastándose miles de euros para mayor beneficio de los empresarios de las universidades privadas. El nuevo decreto de Wert pretende expulsar de la Universidad a los hijos de los trabajadores”, denuncia el llamamiento a esta convocatoria a una nueva huelga de estudiantes recogido por DIARIO Bahía de Cádiz.
Estas protestas se han visto reflejadas en Cádiz, más allá de la huelga secundada de forma notable, el miércoles día 25 con mesas informativas sobre este polémico 3+2 a las puertas del Rectorado, en la calle Ancha de la capital; y el jueves día 26 con una manifestación a partir de mediodía que salía desde la plaza de San Juan de Dios, camino de la Subdelegación del Gobierno, tras pasar por la plaza de Mina y la plaza de España. Una marcha sin incidentes con pancartas con lemas como ‘No al 3+2, el hijo del obrero a la universidad’, ‘Nos mean en la cara y dicen que llueve’, ‘Contra recortes abusivos, alumnos combativos’, ‘Con Wert si no tienes dinero, educación cero’, ‘Fuera empresas de la universidad’ o ‘Ni escuela de élite ni fábrica de precarios’.
“Para el PP sobran universitarios de familias trabajadoras. Quieren expulsarnos al mercado laboral lo antes posible, sin cualificación, sin gastar un céntimo de euro en nuestra educación, para someternos a la explotación más salvaje, arrojarnos a las listas del paro crónico o empujarnos al exilio económico”, retrata este llamamiento a la huelga en secundaria y universidad del Sindicato de Estudiantes, que exige la retirada del decreto: “y si el Gobierno no retrocede inmediatamente, volveremos con fuerzas redobladas el 17 y 18 de marzo. Lo que está en juego es mucho para permanecer pasivos”.
De la misma manera, la Asociación Estudiantil Contra la Precariedad de Cádiz rechaza este 3+2, “no queremos una reforma hecha para convertir la educación en mercancía. No queremos una reforma que convierta la universidad en un lugar para ricos y deje a los trabajadores una formación profesional ‘de segunda’ para crear mano de obra precaria”.
Y el sindicato de Enseñanza de CCOO también ha mostrado su respaldo a las movilizaciones denunciando que la nueva ordenación de las enseñanzas universitarias “no solo no ayudará a la convergencia con otros países europeos, sino que dará lugar a una reconversión de la universidad pública española, abriendo la puerta a nuevos recortes que supondrán más despidos y peores condiciones laborales para el conjunto de trabajadores de la universidad. Los grandes beneficiados de esta medida serán los campus privados, que apuestan por los posgrados como su principal ámbito de actividad”.