CCOO ha visto oportuno denunciar lo que cree “una desproporción abismal” entre los salarios que percibe una “pequeña parte” de los trabajadores del servicio de limpieza y de recogida de basuras en Cádiz, respecto a la casi totalidad del resto de la plantilla, de unas 350 personas.
Un goloso contrato actualmente explotado por la UTE Sufi Cointer mediante prórroga, ya que su periodo de adjudicación caducó en 2016. De hecho, el pasado diciembre, al fin, el Ayuntamiento pudo sacar a licitación el nuevo pliego por hasta 167 millones de euros y un plazo de diez años.
En las condiciones actuales en la que se presta los servicios de recogida de basura en la capital, aseveran desde CCOO Construcción y Servicios de Cádiz, se recoge que el gasto correspondiente a personal es de algo más de 11,3 millones del presupuesto anual.
Pero de ese total, hasta 790.000 euros corresponde a sueldos “de sólo 10 trabajadores, que ostentan cargos intermedios”, salarios que oscilan entre los 60.000 y 150.000 euros anuales, según cuestiona este sindicato en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz.
“No consideramos ético ni viable que a pesar de la desoladora situación de desempleo, la empresa gratifique en concepto de incentivos a operarios con 80.000 euros anuales, a pesar de los 65.000 euros brutos que ya cobran según las tablas salariales marcadas por el convenio”, se queja CCOO, evidenciando que “son cantidades sensiblemente superiores a la que pueda percibir cualquier cargo público de nuestro país”.
Asimismo, se entiende que estas “desproporcionadas cantidades” no se ajustan a la “más que cuestionable imagen de limpieza que refleja Cádiz”. Y es que “con estos más de 130.000 euros anuales en concepto de gratificaciones se podría aumentar notoriamente el servicio, favoreciendo con ello la limpieza de la ciudad y, no menos importante, la empleabilidad de sus ciudadanos”.
Insiste CCOO en que “en una ciudad cuyo mayor problema es el paro y la precariedad laboral, es del todo inasumible e inmoral que los impuestos de los gaditanos vayan destinados a satisfacer esos desorbitados salarios”.
“Las empresas como entes privados que son, pueden pagar los salarios que estimen convenientes, a lo cual no nos oponemos, pero éstos no deben salir de los impuestos de los ciudadanos y es por tanto responsabilidad del Ayuntamiento de Cádiz y de los grupos políticos, la búsqueda de una solución para que esto no sea así, máxime cuando el servicio está en periodo de licitación pública”, se apostilla. Un pliego del que, además, CCOO se ha sentido excluido, ya que asegura que durante su elaboración ha pedido al Gobierno local aportar su opinión “no recibiendo contestación alguna”.
En resumen, el sindicato provincial de Construcción y Servicios de CCOO denuncia que esta “cantidad ingente de dinero público” que se llevan apenas diez empleados de la contrata de alrededor de 350, “debería utilizarse para mejorar la eficiencia del servicio de limpieza y al mismo tiempo supondría la contratación de un gran número de trabajadores, que serviría para paliar la necesidad de muchas familias en una ciudad en la que el paro no es sólo de los más altos de España, sino también de la Unión Europea”.