El Ayuntamiento de Cádiz ha celebrado una nueva reunión de la Mesa de Personas Sin Hogar, que colectivos vienen reclamando desde hace semanas, como la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (Apdha) que recientemente estallaba además ante el acoso y las expulsiones que están sufriendo en espacios públicos quienes se ven obligados a dormir en la calle; encuentro en el que se ha hablado la elaboración del segundo plan para abordar la realidad del sinhogarismo en la ciudad, de la campaña del frío o de las próximas obras en el albergue municipal.
A colación, el alcalde Bruno García ha trasladado una vez más la voluntad del actual equipo de Gobierno del PP “de seguir haciendo todo lo que esté en nuestra mano” para atender la realidad de este colectivo y continuar mejorando la atención y recursos “como se ha venido haciendo en este año como la ampliación de las plazas de la campaña de frío a los doce meses del año, la modificación de la jornada del equipo de calle para que puedan desarrollar su labor por la mañana y por la tarde, el nuevo edificio a construir en la calle Soledad y la próxima reforma del centro de acogida municipal”.
Respecto a esto último, ha repetido que el albergue “necesitaba una reforma como la que hemos ya adjudicado (en la última Junta de Gobierno Local) para solventar los problemas que presentan estas instalaciones y dar un mejor servicio a las personas sin hogar, con una inversión de casi 300.000 euros y un plazo de obras de seis meses”.
De la misma manera, se ha detallado cómo se prevé solventar la atención a los sintechos que actualmente se realiza en el albergue (con una veintena de camas), de forma que el mismo número de plazas de acogida pueda garantizarse a través de la pensión, la colaboración con Caballeros Hospitalarios y una adecuación que se está realizando en el Hogar Fermín Salvochea, “de forma que entre todos proporcionen de forma excepcional ese número de plazas hasta finalizar la reforma”.
“UN TEMA COMPLEJO”
“El compromiso es crecer en recursos para atender a las personas sin hogar, que es un tema complejo, pero que como ciudad debemos y queremos darle respuesta, y en eso estamos desde el Ayuntamiento y todas las entidades implicadas”, ha subrayado el alcalde popular en una Mesa de Personas Sin Hogar en la que también han participado el concejal de Asuntos Sociales y la de Vivienda, Pablo Otero y Ana Sanjuán, representantes de la oposición (PSOE y Adelante Izquierda Gaditana), y entidades y colectivos que trabajan directamente con los sintecho.
En la cita, se apunta en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, también se ha informado del reparto de materiales que se llevará a cabo desde el 1 de noviembre con motivo de la llamada campaña del frío.
Este reparto de material incluye “mejoras en la calidad” del mismo y se distribuirán más de un centenar de sacos de dormir, mochilas, impermeables, camisetas térmicas, guantes térmicos adaptados para el manejo de dispositivos electrónicos, guantes térmicos y ropa interior.
NUEVO PLAN DE INCLUSIÓN SOCIAL PARA PERSONAS SIN HOGAR
Por otro lado, el Gobierno gaditano ha aprovechado el encuentro para presentar las bases para la elaboración del II Plan de Inclusión Social para Personas Sin Hogar 2025-2029. Igualmente, se ha abierto un plazo hasta el próximo 15 de noviembre para que las entidades puedan presentar sus propuestas al documento.
Se da así el primer paso para dotar a la capital gaditana de un nuevo plan que abarque “la realidad del sinhogarismo”, centrado sus objetivos en la coordinación entre administración, entidades y ciudadanos; en la información, sensibilización, prevención y reducción de riesgos; en diagnóstico, investigación y formación de profesionales y colectivos; en la ampliación de recursos sociales y acceso a prestaciones económicas; en alternativas de alojamiento e inserción y formación sociolaboral; y, en definitiva, “en una intervención social integral de este colectivo”.
Según los datos proporcionados en la Mesa, en Cádiz las personas que se ven obligadas a vivir en la calle (el último censo registró a unas 120) tienen una edad media de 52,3 años y son mayoritariamente hombres. Además, siete de cada diez tienen estudios básicos obligatorios y más del 60% están empadronados. Las principales causas que están detrás de esta crítica situación siguen siendo laborales, familiares y adicciones.