Heineken España (empresa cervecera neerlandesa que compraba años atrás Cruzcampo) avanza en su “ambiciosa” agenda de sostenibilidad medioambiental con el objetivo de ser Net Zero en 2040 (o lo que es lo mismo, recortar las emisiones de gases de efecto invernadero hasta dejarlas lo más cerca posible a las emisiones nulas). Para lograrlo, la compañía contempla todos los eslabones del viaje de la cerveza, del campo al bar.
En este sentido, gracias al acuerdo alcanzado con el Ayuntamiento de Cádiz, alrededor de 750 bares y restaurantes del centro histórico y extramuros serán abastecidos con vehículos eléctricos a partir de ahora.
En concreto, con ocho ciclomotores eléctricos que repartirán, de la mano de Global de Bebidas, socio local de Heineken en la distribución, un total de 4 millones de litros de cerveza Cruzcampo. Estos vehículos sustituyen a los cinco camiones de combustión que hasta ahora prestaban este servicio en la capital.
En la teoría, se busca “impulsar una logística más vinculada con el entorno y cuidar el valioso patrimonio del casco histórico con vehículos eléctricos de menores dimensiones y peso, que pueden circular por las calles del centro integrándose en el entorno”, se detalla en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz.
La alianza la han formalizado el concejal de Movilidad, José Manuel Verdulla, y la directora regional de Relaciones Institucionales en Andalucía de Heineken España, Ada Bernal.
Cádiz ha sido la última incorporación al proyecto de última milla de la firma cervecera que arrancó en 2021 y se encuentra implementado desde hace años en Madrid, Málaga, Sevilla, Bilbao y Córdoba. Además, en 2024 se han puesto en marcha varios proyectos piloto en Ciudad Real, Tortosa, Sitges y en algunos municipios de la Comunidad de Madrid.