El Ayuntamiento de Cádiz celebraba el último viernes de agosto su pleno ordinario mensual, todavía en formato telemático (y tras otro pleno extraordinario en el que se aprobó de forma definitiva, y a lo justo el presupuesto municipal para 2020), en el que el punto más relevante (noticia incluso en medios a nivel nacional) fue el que proponía el cambio de nombre de la avenida Juan Carlos I por el de avenida de la Sanidad Pública.
La propuesta, presentada por el equipo de Gobierno obtuvo el apoyo mayoritario del pleno gracias a los votos a favor de los concejales de Adelante Cádiz y la abstención del PSOE; las derechas (PP y Cs) y el concejal no adscrito Domingo Villero, como era de esperar, se posicionaron en contra.
En la defensa de la moción, la portavoz del equipo de Gobierno, Ana Fernández, incidía en que el callejero “sirve para rendir homenaje y una persona que se exilia, que utilizó presuntamente su cargo para amasar su fortuna y recibió 100 millones de un régimen como el Saudí, que ha estado cobrando partidas extra y pagando asignaciones a su amante Corinna Larsen no merece homenajes ni honores”.
Para Fernández, “con la figura del rey emérito hay una imposición de inocencia ya que hay un parte que no se puede investigar por la inviolabilidad constitucional. Por tanto, la presunción para quien pueda ser juzgado”. A esto hay que sumar que “hay datos ya probados y es que ya se sabe que el Jefe de Estado tenía los millones en un paraíso fiscal”.
Por otro lado, ante las acusaciones por parte de la oposición de que “no es el momento” de cambios de callejero, la portavoz rebatía que “se trata de una excusa para no posicionarse porque no existe mejor momento para homenajear a nuestros profesionales de la sanidad pública”.
Mientras, para el propio alcalde, José María González ‘Kichi’, “la oposición critica las formas y nos acusa de que hay otras cosas más importantes porque lo que no quieren es decir simplemente que están en contra”.
La nueva avenida o segunda avenida fue bautizada por el anterior Gobierno local de Teófila Martínez con el nombre del entonces todavía rey; dicha avenida se inauguraba en 2003 y es resultado del soterramiento de la vía del tren.
INICIATIVA CIUDADANA
Este cambio de nombre no es directamente una idea del equipo de Gobierno gaditano. En los meses más duros de la pandemia del coronavirus y en pleno estado de alarma, se lanzaba una campaña en internet (bajo el lema ‘Contra la corrupción, por lo que de verdad importa’) donde una iniciativa ciudadanía recogía firmas y apoyos solicitando al Consistorio este cambio de la Juan Carlos I por avenida de la Sanidad Pública, argumentando como “imperdonable” que la segunda vía principal de la capital gaditana homenajee a “un evasor fiscal demostrado entre otras acusaciones” al que “repudia” la misma Casa Real.
“Nadie puede negar, y menos en estos momentos de crisis sanitaria, que aportan mucho más al conjunto de ciudadanos de esta ciudad el sistema público de salud con sus profesionales e instalaciones que un señor cuya propia familia ha puesto en evidencia de la forma más descarada como mínimo como insolidario con el país que le paga los yates y los vicios”, se subrayaba en dicha campaña, que principalmente el PP ha afeado al entender que está promovida por sectores próximos a Podemos.
OTRAS CALLES
En este mismo pleno, según se ha trasladado a DIARIO Bahía de Cádiz, se debatían y votaban dos urgencias presentadas por el PSOE, ambas respaldadas de forma unánime.
La primera recoge la sustitución en el callejero de la avenida de la Independencia por la avenida de la Guardia Civil. Y la segunda, la inclusión en el callejero de la ciudad de la calle Luis Arenal Plat, otorgándole el nombre de esta persona que fue un referente del movimiento asociativo y vecinal (fue presidente de la asociación de becinos de los antiguos terrenos de Astilleros durante 14 años) a la vía donde se encuentra la sede de dicha asociación que no tiene nombre en el callejero.
Desde la federación 5 de Abril-Vecinos de Cádiz ya han agradecido a los socialistas la inclusión de este punto en el pleno, así como a todos los grupos municipales y al concejal no adscrito sus votos favorables para hacer posible que Luis Arenal tenga una calle dedicada en su barrio, “por el que tanto luchó”. “Los que conocimos a Luis aprendimos mucho de él y hoy día su figura es un referente en el movimiento asociativo vecinal de la ciudad”, se subraya.
“ANTES SER UN ZARRAPASTROSO QUE UN CORRUPTO”
Más allá del pleno y ante la repercusión de lo votado en diferentes medios nacionales, principalmente los voceros de derecha y ultraderecha, el alcalde ha reflexionado en sus redes sociales sobre este asunto, replicando un titular rancio que habla de “Kichi y sus zarrapastrosos”: “no era prioritario. Ni urgente. Sin embargo, que no os quepa duda, este cambio de nombre también es importante. Muy importante. Y es muy importante porque ha acaparado muchas más portadas y titulares. Es decir, no es baladí ni causa indiferencia. Y es importante, muy importante, porque lo es nuestro callejero y a quienes rendimos honores y homenajes como sociedad”.
González Santos reitera por enésima vez que “no sólo de pan vivimos las personas. También de rosas. Y miren ustedes, yo no quiero que la segunda vía más importante de Cádiz lleve el nombre de quien amasó una fortuna gracias a su cargo y luego lo evadió y lo escondió en paraísos fiscales. Yo no quiero el nombre de quien traicionó a la gente. De quien se hacía de oro mientras al resto nos pedían esfuerzos y sobreesfuerzos en mitad de una crisis”.
“No quiero ese nombre. Y sí quiero, en cambio, a quienes cuidan y nos protegen. A una sanidad pública que pese a los recortes vela por nuestra salud, más si cabe, en este contexto de pandemia. Una sanidad pública que tiene rostros y nombres, compuesta por unos profesionales que se dejan la piel y ponen por delante el bien común”, subraya.
“Por eso me siento orgulloso de que Kichi y sus zarrapastrosos estemos en lo urgente, en lo prioritario y también en lo importante. Por eso me siento orgulloso de ser un zarrapastroso, pero nunca un corrupto, ni nadie al que se le pueda acusar de haberse beneficiado de un euro de más de dinero público. Por eso me siento orgulloso de ser un zarrapastroso y también de mi origen humilde, sencillo y obrero. Alejado de cualquier vínculo con el franquismo y de los privilegios de sangre”, replica el alcalde de Cádiz a los pseudomedios de extrema derecha.