Casi un tercio de la capacidad total de hospitalización del Puerta del Mar de Cádiz “permanecerá inoperativa” durante los próximo tres meses “como mínimo”, según alertan desde las secciones sindicales de CGT y Autonomía Obrera tras conocer el plan de verano para el complejo, y las obras previstas como “excusas”. Y ello se suma a la reciente denuncia de estos mismos sindicatos evidenciando la “vergonzosa infrautilización” por la baja ocupación de las camas disponibles, “tan sólo el 62,3% de la capacidad total”.
Así, en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, se denuncia, como cada verano, el “cierre masivo de camas”, como si en estos meses de calor la población no se pusiera enferma ni necesitara operarse, ir al especialista o someterse a pruebas.
Según ha trasladado a los sindicatos el propio gerente del Puerta del Mar, Sebastián Quintero, este verano se cerrarán con la habitual excusa de “realizarles pequeñas obras” cinco controles completos de hospitalización, lo que va a conllevar la inutilización durante casi tres meses de un total de 136 camas: Cirugía A, Traumatología A, Neurocirugía, Cuidados Paliativos y Pediatría C.
A ellos se suman los de Nefrología (con 22 camas) y Cirugía Pediátrica (con 32 camas) que llevan cerrados ya más de un año, “o parcialmente reconvertidos, como el último de los citados, en consultas médicas”.
Por tanto, resumen desde AO y CGT, de las 25 unidades de hospitalización de que dispone hasta el momento el centro gaditano, “siete de ellas van a perder tal carácter durante todo el verano, como mínimo, lo que supone un 28% de todos los controles de hospitalización que tiene el Puerta del Mar, y un 32% de la capacidad total de camas, hasta 590”.
Para justificar dichos cierres, la gerencia del hospital ha vuelto a exponer, como todos los años, “la necesidad de realizar obras de remozamiento en las unidades, una excusa absolutamente absurda, ya que la gran mayoría de las unidades que este verano se van a cerrar en nuestro centro coinciden con las ya cerradas en años anteriores, por lo que habría que preguntarse por qué razón en esas intervenciones anteriores no se acometieron de una vez todas las presuntas mejoras que se precisaban, y evitar, así, tanto cierre reiterado de una misma unidad año tras año”.
“O por qué se tienen que extender los ‘cierres por obras’ durante tres meses completos cuando, en realidad, las obras anunciadas en la mayoría de las unidades se podrían abordar en mucho menos tiempo. No tiene sentido, por ejemplo, que para el mero remozamiento de aseos, pintura en general, cambio de cabeceros y sustitución de techos en la unidad de Trauma A (que ya por cierto se ha cerrado otros años) vaya a tardarse, según la planificación presentada, tres meses completos, cuando toda la obra podría estar finalizada en un mes”, se insiste.
“SÓLO SE BUSCA REDUCIR LOS GASTOS DE PERSONAL”
Para estos sindicatos, se demuestra “como no nos cansaremos de repetir verano tras verano”, que estos cierres “no son el resultado inexorable de unas obras supuestamente necesarias, sino que son éstas últimas las que se han ideado y programado intencionadamente para justificar unos cierres de camas que, como todos los años, el SAS emprende para no tener que cubrir vacaciones y reducir así los gastos de personal”.
“Se trata, en suma, de una mentira, de una vergonzosa tomadura de pelo ideada y lanzada para engañar a toda la ciudadanía, que este año, además, alcanza visos de verdadera crueldad gestora -se apostilla- ante las enormes listas de espera generadas durante la etapa aguda de la pandemia y que tantísimo sufrimiento está generando a miles y miles de pacientes”.
Sentencian desde Autonomía Obrera y CGT que los nuevos cierres de camas estivales constituyen, en suma, “otro paso más en la vergonzosa estrategia de desmantelamiento de nuestro hospital público impulsado abiertamente por el PP mientras se potencia y financia de forma creciente a la sanidad privada, como acabamos de comprobar con el anuncio de la transformación de la Clínica de San Rafael (de la empresa Pascual) en centro de referencia especializada para los residentes del casco antiguo de Cádiz”.
“SIGUEN CON SU POLÍTICA DE PRIVATIZACIÓN DE LA SANIDAD”
Sobre este último punto, el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Cádiz ha exigido a la Junta que “deje de invertir dinero público en la sanidad privada y lo dedique a resolver las carencias que sufre la pública y sus profesionales”, reclamando que se destine “cada céntimo” para sanidad del presupuesto a “blindar la sanidad pública, que es la única que atiende a todos los ciudadanos con absoluta igualdad”.
Así, el Ejecutivo liderado por José María González ‘Kichi’ ha lamentado “la política de privatización constante y la falta de inversión en la sanidad pública” en Cádiz, donde “no sabemos nada del nuevo hospital más allá de las pancartas en elecciones” y donde, por ejemplo, tampoco se han planteado soluciones para el centro de salud del Mentidero “que se cae a pedazos”.
Y se reitera al Gobierno andaluz de derechas que “no puede seguir derivando dinero público a la sanidad privada” y con una línea de conciertos a costa de una atención primaria “colapsada”, a costa de “cerrar camas y de mantener una cifra absolutamente insuficiente de profesionales sanitarios”.
Asimismo, una de las formaciones que integran el propio Gobierno local de Adelante Cádiz, Ganar Cádiz, también ha visto oportuno mostrar públicamente su rechazo a “la privatización de la sanidad pública llevada a cabo por la Junta de Andalucía con la firma del concierto con Pascual, derivando de esta manera el dinero público cuando se debía haber invertido en la sanidad pública”. “Tampoco podemos olvidar que con ese dinero también se podría haber construido el nuevo hospital, asignatura pendiente con Cádiz desde hace más de diez años entre el gobierno socialista y el actual del PP de Moreno Bonilla”, se agrega; quien “puede vestirse de moderado todo lo que quiera, pero al final, las políticas que aplica son dañinas y perjudiciales para la mayoría social”.
A Ganar Cádiz (donde se integra IU) le parece además “increíble e indignante” que el SAS haya dividido a la población de Cádiz en dos tipos de personas, “aquellos que tendrán derecho a una atención sanitaria pública y los que serán derivados a San Rafael como nuevo hospital de referencia”. “Y nos cuesta más de 700 millones que vamos a pagar por una atención claramente inferior a la que podemos recibir en la sanidad pública”.
En el mismo sentido, el PSOE local ha subrayado que “no vamos a permitir que el concierto con Pascual sea la excusa para no construir el hospital regional, porque es un proyecto de ciudad que la Junta no debe abandonar”.
Al respecto, el portavoz municipal socialista, Óscar Torres, ha vuelto a exigir por enésima vez el nuevo Puerta del Mar: “esperemos que el PP no caiga de nuevo en una mentira y dilate aún más en el tiempo esta obra, tras la decisión tomada de que San Rafael sea el nuevo hospital de referencia para el centro histórico”.
“La sanidad pública de calidad, con suficientes recursos materiales y humanos, es uno de los pilares fundamentales del estado de bienestar y de la política en la que cree el partido socialista, por esa razón no cejaremos en nuestro empeño de exigir el nuevo centro hospitalario para la ciudad, más aún teniendo en cuenta los 3.300 millones extraordinarios recibidos del Gobierno central entre los años 2020 y 2021, fondos gestionados directamente por la Junta, que es quien tiene las competencias; y el superávit de 1.700 millones del que disponía a noviembre de 2021”, ha insistido Torres.