El Ayuntamiento de Cádiz celebrará un pleno extraordinario a mediados de octubre con el que el Gobierno local del PP plantea sacar adelante la concertación de una operación de crédito que asegure la financiación de “tres grandes proyectos de la ciudad”: la construcción del futuro Parque del Cementerio, la reurbanización de la avenida de Astilleros y la rehabilitación del frente de las Puertas de Tierra.
En concreto, el Ejecutivo liderado por Bruno García planea pedir hasta 27 millones de euros a los bancos para cubrir estas tres iniciativas. Y al tiempo presume de haber reducido ya la deuda con las entidades en 35,6 millones de euros respecto a junio de 2023 (sumando el cuestionado uso de más de 15 millones del remanente de tesorería de 2023 para este fin, y la reciente liquidación de la PIE de 2022), cuando la misma ascendía a 97 millones.
Aunque también es verdad que el gran recorte de la deuda municipal se llevó a cabo durante los dos mandatos con el izquierdista José María González ‘Kichi’ como alcalde, que heredó de Teófila Martínez (con el mismo Bruno García entre sus concejales) un Ayuntamiento debiendo alrededor de 200 millones a la banca.
En el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz se subraya que la “fortaleza” actual de la economía municipal permite afrontar esta operación que se vincula, además, a la utilización de parte de esa liquidación de la Participación en los Ingresos del Estado (PIE) de 2022 que “se ha hecho efectiva semanas atrás” (cerca de 16 millones de euros en total).
Es más, la previsión del Gobierno gaditano, tras estudiar la situación actual con la Intervención Municipal y la Tesorería, es cancelar ya a lo largo de 2025 parte del nuevo préstamo que se pretende solicitar con el remanente de tesorería que pueda arrojar la liquidación de 2024, “a lo que está obligado por la reactivación de las reglas fiscales”, las que impuso el propio PP en tiempos de Rajoy como presidente del Gobierno (y del inefable Cristóbal Montoro al frente de Hacienda).
Para ello se ha instruido el expediente “de manera que la operación no incluirá comisión alguna por cancelaciones anticipadas”, se precisa.
DOS OPERACIONES SOBRE LA MESA
El detalle de las dos modificaciones de crédito que se abordarán en el próximo pleno extraordinario (y que ya han pasado por la Comisión Informativa de Hacienda previa) se concreta en una primera por la que se destinará 1,78 millones de euros a Procasa para financiar tres actuaciones: el II Plan de Rehabilitación Interior del Parque Municipal de Vivienda (un millón), complementar financiación de promociones de vivienda pública en marcha (500.000 euros) y la recuperación y puesta en uso de viviendas municipales (280.000 euros).
Esa misma modificación contempla aportar otro millón de euros al Instituto Municipal del Deporte (IMD) para la financiación del prometido y eternizado pabellón Portillo, que alcanzaría ya una financiación reservada de 14,9 millones; y 3,7 millones para cancelar un préstamo que está en peores condiciones financieras que las actuales y que, solo en 2025, supondrá un ahorro de 2 millones en conceptos de cargas financieras.
La segunda modificación de crédito a aprobar, y que cronológicamente debe abordarse tras la anterior, consistirá en aprobar la concertación de ese crédito bancario “en condiciones de prudencia financiera” vinculado a la avenida de Astilleros, a las Puertas de Tierra y al cementerio. “Esta operación asegura la financiación de las tres actuaciones y libera fondos ordinarios para acometer en próximas anualidades otros proyectos prioritarios para el equipo de Gobierno”, se apostilla.
“INVIRTIENDO EN LA CIUDAD Y HACIENDO COSAS”
A colación, el alcalde Bruno García defiende que “tenemos como premisa que la deuda municipal siempre sea menor a la encontrada. Ahora mismo, y con lo previsto para este pleno se reducirá en 35,6 millones de euros. Cuando aprobemos la operación tendremos asegurada financiación para el Parque del Cementerio, la avenida de Astilleros y las Puerta de Tierra por valor de 27 millones de euros con 9 millones menos de deuda de la encontrada”.
“Si a eso sumamos que estamos obligados por las reglas fiscales a dedicar un posible remanente a cancelar deuda, esa reducción de lo que debe este ayuntamiento a los bancos puede ser aún mayor en los próximos meses, y lo más importante, invirtiendo en la ciudad y haciendo cosas”, afirma el primer edil del PP.