Diputación y Ayuntamiento de Cádiz han mantenido recientemente un encuentro para seguir profundizando en el reto de establecer un centro dedicado a la investigación y conocimiento de la memoria histórica en la capital gaditana, en concreto en el chalé de Varela. Dicha vivienda fue construida por “suscripción popular” para regalarle una residencia de verano al militar, “aunque realmente fue una recaudación obligatoria, similar a la del Pazo de Meirás”. Salvo sorpresas, en el año 2023 expira el derecho de uso del inmueble por parte de los herederos y volverá a manos de la ciudad.
En esta reunión, en formato virtual, participó personal técnico así como el historiador Carlos Campelo, que es el autor de un proyecto museográfico; dicha propuesta técnica fue el resultado de un trabajo de investigación becado por la Diputación.
Así, el Consistorio plantea la adaptación de una Casa de la Memoria –a la manera de la que ya existe en Jimena de la Frontera- en el chalet donde residió el general José Enrique Varela y que hoy disfrutan, en usufructo, sus familiares. Para la consecución de este objetivo ha solicitado la colaboración de la institución provincial.
No obstante, hasta que el uso del citado inmueble no sea, efectivamente, municipal el Ayuntamiento contempla la instalación de una exposición en una sede transitoria (la capilla del Castillo de Santa Catalina), según ha trasladado el concejal de Memoria Democrática, Martín Vila a la responsable de la delegación de Desarrollo Democrático de la Diputación, Lucía Trujillo. Una exposición que contendría fuentes documentales y material didáctico sobre los episodios de represión franquista sufridos en la provincia de Cádiz tras el golpe de Estado de 1936.
Este encuentro, según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz, concluyó con un encargo: la plasmación de un proyecto donde se determine el proyecto previsto en el Castillo de Santa Catalina y su cuantificación. Con esa base, la Diputación trasladará el alcance de su participación, conforme a sus posibilidades presupuestarias.