CRÓNICA J-15. Con el subidón de moral y autoestima de los últimos tiempos, gracias al juego, la actitud y, consecuentemente, los buenos, resultados, el Cádiz recibía en la tarde-noche del sábado en su Ramón de Carranza, con unas 12.500 personas en la grada, a todo un aspirante al ascenso, la UD Las Palmas. El reto: ¿la quinta victoria liguera consecutiva? y seguir sonriendo…
Tras una semana tranquila, lo más destacado ha sido el movimiento en los despachos, y la confirmación de la renovación hasta 2022 de Álex Fernández. Y precisamente el madrileño se quedaba una semana más en el banquillo, lo que evidencia lo complicado que lo está teniendo en las últimas jornadas Álvaro Cervera para confeccionar su once.
Pero claro, cuando se logra dar con un equipo que funciona, “es normal que haya continuidad ahora que las cosas van bien”, en palabras del propio técnico. Así, los mismos hombres que revolucionaron aquel partido de Elche pisaban otra vez el césped de inicio: Cifuentes, en portería; Brian Oliván, Rober Correa, Marcos Mauro y Sergio Sánchez, en defensa; Garrido, José Mari en el centro del campo, con Manu Vallejo más adelantado; y arriba, Salvi, Jairo y Lekic.
El choque comenzó con el plantel de Paco Herrera (de reestreno en el banquillo canario) tratando de llevar la iniciativa, sin embargo la presión agobiante de los de casa le dejaba hacer poco o nada; y es más, las acciones más o menos ofensivas, a base de mover la pelota con velocidad, las protagonizaba el Cádiz. En el minuto 9 avisaba Garrido, y uno después la fortuna se aliaba con los gaditanos y subía el 1-0 al marcador con un tanto en propia meta de Deivid, que remataba sin querer a su portería un centro raso de Manu Vallejo desde la derecha.
El ritmo e intensidad del encuentro no decayó en todo el primer tiempo: los de verde querían pero ni se encontraban (sumaban gran parte de la posesión, para nada) ni encontraban como mostrarse superiores al conjunto de Cervera, que lo que planteó en su pizarra le estaba saliendo a la perfección: orden desde atrás, presión arriba, robo, velocidad y ocasiones para amedrentar. El primer gol llegaba pronto, y el segundo para cerrar este casi perfecto periodo para los amarillos: en el 41, centraba Correa y el canterano sin marca y desde el área pequeña, solo tenía que empujarla. Entre medias, oportunidades del sanluqueño y de Lekic, sobre todo una clarísima poco antes del tanto de Vallejo. En el lado contrario, la más clara la tenía Rubén Castro.
El Cádiz debía seguir siendo el Cádiz (este Cádiz, el “reconocible”) para afrontar con garantías los segundos cuarenta y cinco minutos ante un Las Palmas con nombres de categoría y calidad indiscutible. Todo un peligro dejar a los visitantes acercarse más de la cuenta al área de Cifu.
Y por ello mismo, en los primeros compases tras la reanudación, el serbio volvía a avisar (se buscaba el tercero, claro), aunque con el paso de los minutos, los canarios estaban consiguiendo también culminar algunas acciones, como los disparos de Danny Blum o Araujo.
No obstante, no era la noche de los canarios (por méritos obvios del Cádiz), y en un lance puntual, un saque de esquina en el 69, Sergio Sánchez metía la pierna aprovechando la dejada desde el segundo palo de Garrido, y hacía el 3-0, encendiéndose la euforia en el estadio, que vuelve a ¿malacostumbrarse? con esta meritoria racha de los suyos. Diez minutos después, la UD Las Palmas, también en otra jugada aislada, acortaba diferencias en el marcador, el 3-1, obra de Pekhart.
Salía al campo Álex por Vallejo (y posteriormente Carrillo y Edu Ramos por Lekic y Garrido), y los canarios apretaban, más en la teoría que en la práctica, en los últimos diez minutos del choque, y ya en tiempo añadido, Jairo centraba al área, y un inteligente Salvi le robaba la ‘cartera’ a un defensa y se inventaba el cuarto de la noche, para rematar la fiesta y confirmar estos tres puntos más para el casillero, además ante todo un ‘gallito’. Un resultado que deja al Cádiz durmiendo en zona de play off de ascenso. Cómo cambia la vida en semanas… DIARIO Bahía de Cádiz