Enfermeras gestoras de casos del Hospital Puerta del Mar de Cádiz han cumplido seis meses empleando Diraya, que ha incorporado un informe específico para su labor, lo cual se ha revelado como “un potente instrumento para obtener información sobre la actividad que realizan y el tipo de pacientes al que atienden”. La herramienta, que estas profesionales utilizan desde junio de 2014, revela que su principal asistencia es a una persona de edad avanzada con enfermedades crónicas complejas y que genera gran dependencia.
Las enfermeras gestoras de casos del Hospital Universitario Puerta del Mar de Cádiz han cumplido seis meses, desde junio de 2014, empleando la herramienta Diraya, que ha incorporado un informe específico para su labor, lo cual se ha revelado como “un potente instrumento para obtener información sobre la actividad que realizan y el tipo de pacientes al que atienden”. Esta herramienta de la consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales incorpora la Historia Digital de Salud, que integra toda la información de cada usuario para que esté a su disposición, así como para todos los profesionales implicados en su proceso de atención.
Este informe se constituye como una forma eficaz de comunicación, tanto con los profesionales del mismo centro como con los de otros niveles asistenciales. Así, la explotación de estos datos que se ha realizado en el Puerta del Mar desde el pasado junio ha servido de modelo para la propuesta que se ha hecho al resto de centros hospitalarios a fin de homogenizar la información y poder comparar indicadores entre todos los de Andalucía.
Según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz, los datos del análisis de estos seis primeros meses reflejan que las enfermeras gestoras de casos del centro hospitalario gaditano atienden fundamentalmente a pacientes con procesos crónicos complejos que generan gran dependencia, con descompensaciones frecuentes, hospitalizaciones reiteradas, y que requieren para su tratamiento y cuidados de tecnología avanzada en el domicilio. La mayoría son de edad avanzada, siendo esta mayor en las mujeres (entre 81 y 90 años es el grupo de edad de mayor prevalencia) que en los hombres (entre 61 y 70 años).
En cuanto a la patología, mayoritariamente se trata de pacientes pluripatológicos, aquellos en los que conviven dos o más patologías a la vez, fundamentalmente diabetes, insuficiencia cardiaca, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, etcétera. Estas profesionales también atienden a pacientes con accidentes cerebrovasculares, sobre todo a aquellos que sufren un daño cerebral importante, a los que precisan cuidados paliativos, a los ancianos con fractura de cadera y con deterioro funcional, a aquellos que presentan enfermedades de baja prevalencia pero que requieren de circuitos diferenciados para su atención como la ELA y a las personas cuidadoras de todos estos pacientes.
Estos pacientes son derivados para la atención por las gestoras de casos principalmente por los médicos (37%), seguido por la enfermera referente (29%), la trabajadora social, la enfermera gestora de casos de atención primaria, la propia familia y algunos casos que se captan activamente a través de Diraya por hospitalización prolongada.
ENFERMERÍA GESTORA DE CASOS
El trabajo de las enfermeras gestoras de casos se centra fundamentalmente en coordinar el proceso asistencial, evitando fragmentaciones y duplicidades y planificando el alta en coordinación con atención primaria para que el traspaso al domicilio se produzca de forma segura, garantizando la continuidad de la atención y movilizando los recursos necesarios para ello. Así, entre las intervenciones de gestión/coordinación que se realizan, cabe destacar la derivación al equipo de trabajo social cuando se identifican problemas de este ámbito, la gestión de material ortoprotésico para compensar la perdida de autonomía y gestión de recetas, medicación y pruebas diagnósticas antes del alta, pero la intervención más frecuente es el contacto con la enfermera gestora de casos comunitaria para asegurar la coordinación y la continuidad asistencial.
Con respecto a los pacientes no ingresados, pero que precisan algún tipo de atención par parte del hospital y que están en el programa de gestión de casos, la derivación, documentación, intercambio de información de cuidados de salud, consulta, consulta por teléfono y las reuniones multidisciplinar para abordar o planificar los cuidados son las intervenciones que se realizan con mayor frecuencia.