CRÓNICA J-29. Este sábado en su visita a El Sadar, el Cádiz salió al campo a no perder, y el Osasuna se puso 1-0 pronto en una acción puntual, y cuando en la segunda mitad quiso tener la pelota y buscó el gol, se impuso a los navarros y se mereció al menos el empate, que no llegó por una preocupante falta de efectividad. Es el resumen de la nueva derrota de los de Álvaro Cervera, que no terminan de salir de esta racha de dudas, pese a la ilusionante reacción tras el descanso, mientras la zona alta de la tabla se complica.
Los de amarillo salieron de inicio con Cifuentes bajo palos; Villanueva, Correa, Mauro y Kecojevic, en defensa; Fausto Tienza y Garrido en el doble pivote con Álex Fernández por delante; y Salvi, Álvaro y Jona, arriba.
Y casi nada ocurría en el primer tiempo. Los visitantes dejaron la iniciativa al rival, que logró ponerse por delante en el marcador aprovechando una falta de Villanueva en el costado del área que Fran Mérida clavó por la escuadra en el minuto 14. Y tampoco pasó mucho más después del 1-0. El Cádiz no supo reaccionar, pese a los cambios tácticos, sumándose Alvarito a la punta y pasando Álex a la banda; y el Osasuna parecía ya conformarse, aunque en la recta final Cifuentes salvaba el segundo tanto local, un tiro de David que repelía a córner.
Cervera no espero mucho para mover el banquillo: entraron Perea, Carrillo y Barral por Tienza, Villanueva y Jona, y ese Cádiz apático y sin ideas fue mutando con el paso de la segunda mitad a un conjunto ambicioso que quería como mínimo empatar ante un exPrimera que, en cuanto se vio en apuros, comenzó a ponerse nervioso.
Y comenzaron a sucederse las oportunidades cadistas, inexistentes durante el primer tiempo: una falta frontal de Perea, el gran revulsivo del choque; un tiro lejano de Álvaro García; un cabezazo de Carrillo; y otra en la que ni Barral ni Carrillo lograron rematar en boca de gol una asistencia de Salvi.
En el minuto 70 un chut de Álex desde la frontal se marchaba pegado al palo; un saque de esquina directo de Perea que atajaba Sergio Herrera en el primer palo; poco después el sanluqueño gozaba de un mano a mano ante el portero, pero se resbala en el área; o un remate de Garrido muy desviado aprovechando un centro de Alvarito. Se tuvieron ocasiones suficientes para como mínimo amarrar un punto de Pamplona, pero no se concretó ninguna, y el más que injusto 1-0 del marcador no se movió.
“No hemos tenido acierto, hemos tenido más ocasiones que nunca y no hemos estado acertados; nos vamos con las mismos puntos que ante el Numancia hace dos semanas, pero con otras sensaciones”, dejaba como reflexión el técnico en rueda de prensa tras el encuentro. DIARIO Bahía de Cádiz