Bajo las consignas “no al rearme, no más gastos militares” y en definitiva, “no a la guerra”, diversos colectivos sociales y pacifistas se concentraron en la tarde del jueves a las puertas de Subdelegación de Defensa en Cádiz, en el Paseo de Carlos III, para manifestar su rechazo al aumento del gasto militar y al rearme global, impuesto en la narrativa de los últimos tiempos. Una protesta enmarcada en la campaña internacional ‘GDAMS 2025: Días de acción global contra el gasto militar’.
Con esta modesta acción secundada por la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (Apdha), Ecologistas en Acción, los sindicatos CGT y Ustea, el Colectivo de Noviolencia ELAIA-Alternativa Antimilitarista.MOC, el Comité Oscar Romero, y los partidos Adelante Andalucía, Izquierda Unida, PCA, Podemos, Alternativa Republicana y Ganar Cádiz en Común, se ha querido denunciar el “brutal rearme” en el que se ha embarcado la Unión Europea.
Estas organizaciones piensan que “no se trata de incrementar los presupuestos militares, ya de por sí estratosféricos”, sino de “levantar en la UE una política de defensa democrática, autónoma de EEUU y su OTAN”.
“No hay tal amenaza de invasión. Por eso la defensa en la UE debe ser eso, simplemente defensiva (no agresiva y sin enemigos previos), autónoma (sin la tutela de la OTAN-EEUU), y respetuosa con las reglas internacionales y con los derechos humanos”, coinciden las entidades concentradas en la capital gaditana.
“EL MILITARISMO NO GARANTIZA LA SEGURIDAD”
“La continuidad de la guerra de Ucrania y los desafíos de Putin y Trump han llevado a Europa a tomar una decisión problemática: armarse hasta los dientes. ¿Nuestra sociedad está enloqueciendo? ¡Pero si los gastos militares son ya estratosféricos!”, subraya el manifiesto leído en esta concentración, recogido por DIARIO Bahía de Cádiz.
Para demostrar esta afirmación, el texto destaca que el gasto militar de la UE representó en 2023 un 1,5% de su PIB. En comparación, China destinó un 1,7%, Estados Unidos un 3,4% (responsable de casi 4 de cada 10 dólares gastados en defensa a nivel mundial) y Rusia un 5,9%. Aun así, Europa gasta en total en armamento dos veces y media más que el temido Kremlin.
“Con estos datos cabría preguntarse dónde está la amenaza. ¿De verdad creemos que Rusia va a invadir Europa, cuando ya tenemos el doble de gasto militar? Incrementando brutalmente este gasto no habrá más seguridad en Europa y en cambio aumentará la inestabilidad y el peligro de más guerras en todo el mundo. Los únicos beneficiados van a ser los fabricantes de armas”, se tiene claro, incidiendo en que “se nos ha ido la cabeza. El incremento brutal de los gastos militares que se está planteando no sirve para la paz, y además crea otros problemas preocupantes”.
Por un lado, más gasto militar “supone la reducción del gasto social”; son gastos “no rentables (excepto para los que se lucran con ello), suponen en realidad oportunidades económicas perdidas”; e implica “disparar deuda pública, lo que limita las capacidades futuras del Estado para responder a crisis económicas o sociales”.
Pero además, se insiste en el comunicado, el militarismo “no garantiza la seguridad. No aborda las amenazas reales que enfrenta la población, como crisis climáticas, pandemias o desigualdades sociales. Más armas no significan más seguridad; normalmente, perpetúan los conflictos e incrementan las tensiones internacionales”. Y a la vez, el militarismo mata: “las guerras financiadas por un alto gasto militar tienen un impacto devastador en las vidas de los civiles, destruyendo comunidades y perpetuando ciclos de pobreza y violencia”.
“HAY QUE INVERTIR EN LA PAZ”
Estos colectivos gaditanos no dudan de que lo que toca hacer es “invertir en la paz”. “Redirigir los fondos militares hacia iniciativas de desarrollo humano (como educación, salud y protección social) no sólo mejora el bienestar general, sino que también promueve una mayor estabilidad social y reduce las causas subyacentes de conflictos”, se defiende; al tiempo que se aboga por una defensa en la Unión Europea “que tenga como prioridad la diplomacia y la negociación en la resolución de los conflictos”.
“En suma, la carrera armamentística enriquece a unos pocos y empobrece a muchos, porque más armas no significan más seguridad, sino más conflictos y desigualdades. La paz hay que construirla. Y no se construye con el aumento de gasto militar, ni con la militarización de la vida”, sentencia el manifiesto.
Y SIGUEN SALIENDO DESDE ESPAÑA ARMAS CON DESTINO A ISRAEL
En paralelo, Adelante Andalucía ha condenado enérgicamente la utilización una vez más del puerto de Algeciras como plataforma logística para el transporte de armamento con destino al Estado genocida de Israel, “en un contexto de continuas violaciones de derechos humanos y crímenes de lesa humanidad cometidos contra el pueblo palestino”.
Según informaciones publicadas por medios como Declassified y The Ditch y denunciadas por la Red Solidaria contra la Ocupación Palestina (RESCOP), el buque Maersk Detroit, procedente de EEUU, realizará una parada técnica en Tánger para transferir material militar al buque Nexoe Maersk, que partirá desde el puerto de Algeciras hacia Israel entre los días 20 y 22 de abril.
Para la portavoz de Adelante Andalucía en la provincia de Cádiz, Leti Blanco “Andalucía no puede seguir siendo cómplice del genocidio del pueblo palestino. Exigimos al Gobierno de España que actúe ya y que cierre nuestros puertos al envío de armas con destino a Israel”, a lo que añade que “el puerto de Algeciras no puede ser un eslabón más en la cadena de muerte y destrucción que está alimentando la ocupación israelí”.