El tráfico portuario en la Bahía de Cádiz ha registrado un crecimiento del 15,4% en el primer semestre de 2020 respecto al mismo periodo del pasado ejercicio, y alcanza 2,1 millones de toneladas de mercancías, a pesar del descenso generalizado de actividad como consecuencia de la crisis ocasionada por el coronavirus, que sí ha provocado una bajada media del sistema del 10% a nivel estatal.
Así, en esta excepcional situación marcada por la pandemia, el Puerto de la Bahía de Cádiz ha logrado incrementar el volumen de actividad, “aprovechando nuevas oportunidades de negocio, gracias al trabajo realizado por las empresas y servicios del sector y también por todo el personal de la propia Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC)”, se subraya en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz.
Destaca el comportamiento de la mercancía general, que acumula un aumento del 13% hasta junio, con 673.195 toneladas y un crecimiento mensual del 56%. Las frutas, hortalizas y legumbres, con 161.254 toneladas, lideran este grupo.
Asimismo, los graneles líquidos mantienen la tendencia alcista, con un incremento acumulado en los seis primeros meses del año del 36,2% y 851.820 toneladas. Los graneles sólidos, por su parte, mantienen prácticamente el mismo volumen de actividad que en junio de 2019, con apenas un 0,47% menos y 592.014 toneladas. Ambos tráficos, de los más importantes de la Bahía, se concentran en el muelle de La Cabezuela, en Puerto Real.
Según el modo de transporte, el tráfico roro anota un descenso del 8,1%, con 393.044 toneladas movidas hasta junio, mientras que el contenedor (lolo) crece un notable 118% en toneladas (229.176), un 38% en teus (22.290) y un 27,8% en unidades (13.432).
La pesca fresca, por su parte, ve reducido su volumen en un 15%, con 6.095 toneladas de pescado fresco, que alcanzó un valor de venta de 20,2 millones de euros, lo que supone una bajada del 5,4 % respecto a junio de 2019.
Finalmente, como es lógico, el tráfico de cruceros ha visto recortado un 83,9% en el número de escalas con respecto al mismo periodo de 2019, con 23 buques contabilizados hasta junio, mientras que el número de pasajeros se ha reducido un 80%, llegando a los 40.652. Esta evolución tan negativa es consecuencia de la prohibición de atracar este tipo de embarcaciones desde mediados de marzo, por la alerta sanitaria.
La APBC (que además trabaja para ser incluida como parte del corredor Atlántico de la Red Básica en la Red Transeuropea de Transporte definida por la UE, de cara a la revisión prevista para octubre), con estos optimistas datos en la mano, subraya que seguirá trabajando con la comunidad y servicios portuarios para “mantener este nivel de crecimiento y recuperar los tráficos perdidos” como consecuencia de la crisis sanitaria, mientras que, entiende, “se abren nuevos horizontes a medio plazo”, como el acceso ferroviario a La Cabezuela (la demandada obra al fin está licitada de nuevo) y la futura puesta en servicio de la nueva terminal de contenedores, que “originarán nuevas oportunidades de negocio”.