CGT ha mostrado su preocupación por la situación, en el contexto de pandemia del coronavirus, de algunos de los conservatorios de la provincia de Cádiz. Al respecto, exige a la Junta de Andalucía la prevención de riesgos laborales y el cumplimiento de todas las medidas sanitarias frente a los contagios, “doblando las plantillas (contratando a más profesorado), reduciendo las ratios (las legales y las ilegales) y ampliando espacios en colaboración con la Diputación y ayuntamientos para proteger a la comunidad educativa de estos centros y a la sociedad en general”.
Este sindicato pone como ejemplo “modélico” el caso del Conservatorio Muñoz Molleda de La Línea, que usa los espacios municipales de la concejalía de Juventud además de su edificio propio.
En el caso del Conservatorio Manuel de Falla de Cádiz, la opinión de CGT Enseñanza no es tan positiva. Se centra en que la asignatura de Coro se encuentra “en un ángulo muerto”: por un lado, “dar la clase desde un piano, con distancias, donde el alumnado lleva una mascarilla y es imposible evaluar su progreso, con las ventanas abiertas, donde se escucha la música del aula de enfrente -que es la de Danza- es complicado”. Por otro, “ya sabemos la peligrosidad de cantar sin mascarillas”.
Además, se pregunta “qué va a pasar cuando vengan días fríos de lluvia con viento, ¿se podrán abrir las ventanas para ventilar las aulas?”. En este caso, 19 y 24 alumnos de Coro sigue pareciendo “demasiada ratio” a este sindicato a pesar de que en condiciones de normalidad la ratio para esta asignatura se establezca en 35 según la normativa.
Aunque el Ministerio de Sanidad recomendaba en verano no superar los 20 alumnos por clase con las adecuadas distancias de seguridad CGT entiende que lo correcto sería “como mucho” 12 alumnos, “que es lo permitido en reuniones por normativa”; aunque la Junta lo acaba de bajar a seis personas.
Para defender que se amplíen espacios, se repasa la normativa aprobada por la administración autonómica para los centros educativos: “para aquellas enseñanzas impartidas en Conservatorios de Música, Danza y Arte Dramático donde sea necesaria la realización de actividad física o para cualquier otra actividad docente que entrañe mayor riesgo (como canto coral o conjunto de instrumentos de viento) se recomienda utilizar los espacios más amplios del centro, aumentar la distancia interpersonal y usar medidas de protección adicionales siempre que sea posible, acompañado siempre de una adecuada ventilación del espacio”. Además, la Confederación Española de Sociedades Musicales y el Instituto de Medicina para Músicos de Friburgo ha señalado que “durante el canto solista se lanzan partículas de saliva al pronunciar las consonantes, las cuales sí pueden ser fuente de propagación”. Así, en el caso del canto coral se recomiendan dos metros de distancia entre los coristas, “es decir, más del metro y medio aconsejado”.
EL “ANÓMALO” CONSERVATORIO DE LA ISLA
Este sindicato, en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, también llama la atención también sobre la “anómala situación” en la que se encuentra el Conservatorio Elemental de Música Chelista Ruiz Casaux de San Fernando.
Así, denuncia el trato discriminatorio que recibe este centro isleño por parte de la consejería de Educación, el Servicio de Planificación de la delegación territorial, la Agencia Pública Andaluza de Educación y el propio Ayuntamiento “debido que tiene que usar un colegio de Primaria para impartir las clases de música sin poder hacerlo en un espacio propio, lo cual sería lo más indicado”.
Desde hace ya 30 años, este conservatorio es el único centro educativo de titularidad pública que ofrece enseñanzas musicales en la localidad, “sin embargo, lo hace con una característica muy peculiar: comparte sus instalaciones con otra señera institución educativa, el CEIP Almirante Laulhé”.
“El problema radica –se explica- en que las aulas dedicadas a impartir clase de Infantil y Primaria en el colegio por las mañanas, son las mismas que se usan para impartir clases de las distintas especialidades musicales del conservatorio por la tarde”. Una situación que “perjudica gravemente al profesorado y al alumnado del Conservatorio, pues al no disponer de espacios y medios propios y adecuados, su función pedagógica se ve, durante cada curso educativo, obstaculizada sin remedio desde hace más de 30 años”.
Pero además, con la pandemia, el profesorado se muestra preocupado por la limpieza de las clases “ya que un mismo aula es usada por Primaria por la mañana y por el Conservatorio por la tarde”. Tampoco queda claro el protocolo a seguir en el caso de contagios en Primaria o en el Conservatorio: “¿un positivo en un aula de Primaria afecta a la asignatura de conservatorio que se imparte por la tarde en esa misma clase? ¿Y viceversa?”.
CGT Enseñanza Cádiz reclama a la consejería de Educación y al Consistorio que solucionen “un problema estancado ya tres décadas”, sobre todo teniendo en cuenta que La Isla “dispone de edificios y espacios municipales libres susceptibles de poder albergar un conservatorio digno de tal nombre: la antigua Escuela Infantil Virgen del Carmen o el edificio ya vacío de la Casa de la Cultura son buenos ejemplos de ello”, por ejemplo.