La asociación Calor en la Noche, centrada en el auxilio a personas sin hogar en la Bahía de Cádiz, celebrada días atrás asamblea anual junto a personas voluntarias que prestan su labor para la entidad en la capital, San Fernando, El Puerto y Jerez. Un encuentro para compartir experiencias y exponer los datos “que revelan el intenso trabajo” desarrollado durante el año 2023, cumpliendo ya el vigésimo aniversario de su fundación (vinculada a la obra social de La Salle).
En lo referente al denominado trabajo de calle, en el que se atiende a los sintecho con los que se trata de establecer un contacto personal y se les ofrece alimentos o la cobertura de diversas necesidades básicas, el número de atenciones llevadas a cabo por voluntarios de la asociación a lo largo del pasado año en el conjunto de las cuatro localidades cubiertas ha aumentado. La cifra global alcanza las 7.950 asistencias, mientras que en 2022 fueron 7.351; aunque un ejercicio antes, en 2021, superaron las 8.240.
Concretamente, según se detalla en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, en Cádiz capital se produjeron 2.052 asistencias, un número similar al del año 2022, pero con algunos indicativos nuevos, como el aumento de personas que pasan la noche en distintas calles de extramuros, “siendo ya más que los que pernoctan en el casco histórico”.
En San Fernando se ha producido un incremento importante en el número de asistencias, que han pasado de las 547 a las 715 en un año. La tendencia al alza se observa también en El Puerto de Santa María, donde se realizaron 2.228 asistencias, frente a las 1.757 del año anterior. En cuanto a Jerez, los números se han mantenido en niveles similares a los de 2022, llegando a las 2.955 asistencias.
Además, en cuanto a la actividad del local de desayunos ubicado en Cádiz capital (en la zona del Campo del Sur), se entregaron durante 2023 un total de 28.170 servicios. Esta cifra también es superior a la del año 2022, cuando se computaron 25.728 desayunos.
En este punto se recuerda que tanto el personal contratado como el voluntariado de este comedor social ofrecen una atención que va más allá de servir comida durante los 365 días del año. Así, a las personas sin casa y vulnerables que se acercan al local se les ofrece una atención individualizada, con orientación sobre los recursos existentes no sólo en el colectivo, sino también en otros estamentos públicos y privados.
Igualmente, se brinda apoyo emocional y se deriva a los usuarios a aquellos servicios disponibles que se puedan ajustar a sus necesidades. Para ello se trabaja de forma coordinada tanto con entidades públicas como con otras asociaciones y comedores sociales. Además, se cubren necesidades básicas más específicas relacionadas con la higiene; y se respaldan los gastos de medicamentos a quienes lo necesitan.
SE HA PODIDO ABRIR UN PRIMER PISO TUTELADO
En 2023, por otro lado (más allá de otras actividades como charlas de concienciación, la campaña Estrellas en la Navidad, o la implicación en la elaboración del séptimo censo de personas sin hogar promovido por el Ayuntamiento) el colectivo ha cumplido “uno de sus sueños”, con la apertura de su primer piso tutelado, el Hogar Parmenia, gracias a la cesión de una vivienda por parte de la empresa municipal Procasa.
Allí se han podido instalar tres personas sin hogar a las que se ha seleccionado y se acompaña diariamente para conseguir su inclusión social y un desarrollo integral de sus capacidades y habilidades.
La idea teórica es que este sea un recurso temporal en el que estas personas mejorarán su calidad de vida y su autonomía, hasta que reúnan las condiciones para independizarse y mantenerse de forma autónoma y en unas condiciones mínimas.
“Esta labor de Calor en la Noche no sería posible sin la implicación y entrega de sus cientos de voluntarios, además de la colaboración de instituciones públicas y de los socios y entidades que permanentemente colaboran con la asociación”, se sentencia.