La asociación Calor en la Noche ha celebrado el quinto aniversario de la apertura en la capital gaditana de su servicio de desayunos diario para personas sin hogar o con especial necesidad. Con motivo del aniversario, ha entregado menú especial: un bocadillo de jamón y un trozo de tarta.
Actualmente, este colectivo atiende a unas 80 personas cada día en su local de desayunos (cedido por el Ayuntamiento) ubicado en la avenida Campo del Sur (con entrada por la calle Regimiento de Infantería de Cádiz). Son los propios voluntarios de la entidad los encargados de atender a los sintecho.
En estos momentos, y desde el inicio de la pandemia, usuarios y voluntarios se han adaptado a las condiciones de seguridad necesarias y los desayunos se entregan para llevar. Anteriormente, se podía consumir en el propio local.
Según los datos de la última Memoria de la asociación, en el año 2020 se entregaron un total de 20.235 servicios. Esta cifra viene aumentando gradualmente desde la inauguración del local de desayunos.
Pero más allá de esta primera comida, el colectivo presidido por María de la Palma Mení presta también un servicio de asesoramiento y acompañamiento a los usuarios, a los que se da orientación sobre el modo de tramitar prestaciones económicas, gestiones administrativas o citas médicas, por ejemplo. Todo ello además de “mantener una escucha activa y apoyo emocional con los que las personas sin hogar se puedan sentir acompañadas y arropadas en todo momento”, se remarca en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz.
Todo esto es posible gracias a las aportaciones económicas de los socios de la entidad, que además recibe ayudas puntuales de particulares, empresas y administraciones.
Además de contar con el servicio de desayunos, los voluntarios de Calor en la Noche llevan ya 18 años recorriendo por las noches las calles de Cádiz para ofrecer una taza de café o caldo, prendas de abrigo, sacos de dormir y, sobre todo, compañía, a quienes duermen en la calle. Labor ha traspasado las fronteras de la ciudad y nuevos voluntarios, siempre vinculados a las comunidades educativas de La Salle, desarrollan la misma labor en diferentes puntos de la Bahía, como San Fernando, El Puerto de Santa María y Jerez.