Arropado por el secretario del consejo de administración del Cádiz CF, el abogado Martín José García Marichal, y el director de comunicación de la entidad, José Grima, además de por parte de la plantilla y técnicos, Juan Cala ha dado la cara este martes tras el entrenamiento en el Rosal en una rueda de prensa virtual que ha congregado a alrededor de medio centenar de medios de comunicación.
Como era de esperar, el lebrijano ha ratificado su versión de lo ocurrido en el partido del domingo en el Carranza ante el Valencia, en el que Diakhaby, defensa del equipo rival, le acusó de soltarle un insulto racista, lo que suscitó un gran desconcierto y hasta el amago de los jugadores ché de negarse a seguir en el campo. Cala lo niega y su club le cree. Lo mismo que hace el Valencia con su jugador, claro.
El acta arbitral reflejó que el francés denunció que el central cadista le espetó “negro de mierda”, pero también subraya que ni el mismo árbitro ni los asistente escucharon nada. De hecho, han pasado ya casi dos días del encuentro y todavía no se ha encontrado una prueba audiovisual cierta que demuestre que hubo insulto. Pese a este detalle, numerosos medios, periodistas, políticos, y variopintos personajes públicos y anónimos se han posicionado rápidamente, obviando la presunción de inocencia, condenando al sevillano.
“Emprenderé acciones legales contra todas las personas que han jugado con mi imagen y mi honor”, ha dejado caer el veterano defensa en la comparecencia en la sala de prensa de la ciudad deportiva. Además, ha resaltado su emoción porque “desde que pasó he recibido cientos de mensajes y llamadas de excompañeros, compañeros, directores deportivos, empresarios, proveedores, mi plantilla. Estoy muy contento de pertenecer a la familia a la que pertenezco. Agradezco públicamente el apoyo en momentos complicados. Tengo que agradecer a mi club, mi institución, mis compañeros, mi entrenador, a todos. No ha habido ningún compañero en mi carrera futbolística que me pueda acusar de lo que se me acusa, y si hay alguno que pueda acusarme le pido por favor que salga y lo diga”.
“ESTOY SUFRIENDO UN LINCHAMIENTO PÚBLICO, Y SIN PRUEBAS”
Cala comenzaba exponiendo los hechos tal y como los vivió, según recoge DIARIO Bahía de Cádiz de fuentes del club: “todo empieza en un córner a favor del Valencia. Diakhaby cae sobre mí, recibo un golpe, reclamo falta y me reclama que me levante, y queda ahí. Después viene el gol, la tarjeta y la jugada desafortunada en la que en una falta a favor tengo otro lance de juego con el jugador, recibo un golpe, donde caigo y reclamo como todo el mundo reclama. Le digo ‘déjame en paz’ y sigo para adelante. El jugador se desentiende, se viene hacia mí diciendo que le insulté, le digo que se relajara, que no he dicho eso y se forma la tangana”.
“Pienso que viene a provocar una segunda tarjeta, me quedo fuera de la trifulca viendo qué podía pasar, viendo qué decide el árbitro. Saca amarilla al jugador del Valencia y monta en cólera. Luego pasan las imágenes desafortunadas con Gabriel Paulista repitiendo lo que le ha dicho el compañero. Me quedo con cara de asombrado y todo lo demás se ha visto luego. Esa es mi posición. Nunca he dicho ‘negro de mierda’, no se lo he dicho y está bastante claro”, ha reiterado.
“Somos profesionales del fútbol –ha reflexionado sobre cómo pudo solventarse el enredo en pleno partido-, que nos cojan a los dos con el árbitro delante y que digamos lo qué ha pasado. A partir de ahí, que se solucione. Lo que está claro es que yo intento calmarle. Le intento hacer ver que no he dicho eso. Veo jugadores yendo de un lado a otro, veo todo el espectáculo que se formó y que hemos visto. Hay más de 20 cámaras, micrófonos, 22 jugadores, tres árbitros, nadie se entera. Nadie dice que lo ha oído”.
Además, ha sido rotundo apostillando que “si hay un jugador del Cádiz que se acerca a un jugador del Valencia diciendo que si yo pido perdón se vuelve a jugar, dejo el fútbol. Es falso”.
“Es un circo mediático lo que llevo sufriendo desde hace un par de días. Es un linchamiento público, y sin pruebas. Después de ver el vídeo bochornoso que hace el presidente (del Valencia) junto a su jugador al lado, espero que se fuera al juzgado de guardia a denunciarme porque yo lo voy a hacer. Yo lo voy a denunciar”, ha avanzado el jugador del Cádiz.
Juan Cala ha vuelvo a lamentar entre sus respuestas que “me han juzgado antes de terminar el partido sin escuchar mi versión. Se han arrimado a ganar protagonismo, votos. Estamos dañando el fútbol español, no hay racismo entre los jugadores del fútbol español”. De hecho, ha subrayado que si se ve necesario establecer un protocolo contra el racismo, él sería el primero en apoyarlo.
Además, ha explicado el porqué ha tardado más de un día en salir a dar la cara: “yo no soy periodista, nada más terminar el partido me reúno con el presidente Manuel Vizcaíno y le digo que quiero salir inmediatamente, y me recomienda que no, que ya he sido juzgado, que todo lo que voy a decir lo van a utilizar en mi contra, que soy inocente y que todo se iba a esclarecer. He salido cuando el Cádiz CF ha creído oportuno. Soy un trabajador del Cádiz y aquí estoy”.
EL VALENCIA LAMENTA “PROFUNDAMENTE” LAS DECLARACIONES DE CALA
Poco rato después de la comparecencia de Cala, el Valencia CF divulgaba en su web un breve comunicado lamentando “profundamente” sus declaraciones negando que profiriera un “grave insulto racista” a Mouctar Diakhaby. “Juan Cala ha perdido una gran oportunidad de aceptar ese error y pedir disculpas al afectado. En lugar de eso, ha atacado al propio jugador y a otros miembros del Valencia”, se afirma.
El club valencianista insiste en que “cree totalmente en su futbolista y le reitera su pleno apoyo”. Además, apunta que tras las “amenazas” del lebrijano de acudir a la justicia, el presidente del Valencia, Anil Murthy, y su jugador Diakhaby “mantienen intacta su profunda convicción de luchar donde haga falta y hasta el final por el bien del fútbol”.
“El Valencia CF no va a parar de pelear por la mejora de la normativa y la lucha contra el racismo en el fútbol y en la sociedad”, se sentencia.