“Ha sido el mejor evento de calle, nos sentimos en deuda con Cádiz. Les debemos una y el año que viene volveremos a tope para devolverles lo que nos han dado”. Es el resignado y emocionado resumen del equipo español y anfitrión de la sexta prueba de la actual temporada de la SailGP, campeonato de catamaranes voladores pilotados por los mejores regatistas del mundo (medallistas olímpicos y varios ganadores de la Copa América), que este fin de semana se ha dejado ver por primera vez en España (en su segunda temporada) en aguas gaditanas; y eso que ciudades como Barcelona, Valencia, Ibiza y Lanzarote también soñaron con ser sede de este joven espectáculo considerado ya la Fórmula Uno del mar (con un millón de dólares en juego para el ganador).
Notable expectativa ha creado en la Bahía estos días este evento deportivo y social (que ha estado arropado por actividades de concienciación medioambiental para escolares y jóvenes de escuelas de vela de la zona, y por la programación lúdica-musical programada por el Ayuntamiento junto a la estación de trenes y el Castillo de Santa Catalina), muy desconocido por la mayoría (aunque dicen que llega a 250 millones de espectadores), que ha transformado por unos días el muelle Ciudad del Puerto gaditano y el Paseo de Santa Bárbara.
Una cita marcada por la importante afluencia de visitantes, hoteles y hostelería llenos; más de 1.200 agentes de Guardia Civil y Policía Nacional e importantes medios materiales para “velar por la seguridad”; la presencia casi sorpresa del rey Felipe VI durante los entrenamientos y la primera jornada de carreras (el Borbón incluso hizo de tripulante del F50 patrio); y por el levantazo de la segunda jornada oficial, la del domingo, con los anfitriones volcando su embarcación. Australia se acababa imponiendo en la final, y se aúpa a lo alto de la clasificación general provisional.
Y la organización ya tiene claro que el Spain Sail Grand Prix (Andalucía – Cádiz) se ha convertido en el “más exitoso” de esta temporada, ya en su recta final. El presente mundial, que enfrenta a ocho equipos nacionales (Australia, Dinamarca, Estados Unidos, Francia, Japón, Nueva Zelanda, Reino Unido y España) comenzaba meses atrás en Bermudas y finalizará en marzo de 2022 en Norteamérica, tras pasar además de por Cádiz por Plymouth (Reino Unido), Aarhus (Dinamarca), Saint-Tropez (Francia), Sidney (Australia), Christchurch (Nueva Zelanda) y San Francisco (EEUU).
Así, según se recoge en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, el evento gaditano “pasará a la historia” por ser la cita con más público de la presente liga de SailGP, “reuniendo a 11.000 personas en diferentes puntos de la ciudad para seguir la competición”. Además, más de 1.400 barcos han acompañado desde el mar a las embarcaciones en las carreras. El campo de regatas ha estado situado entre la Punta de San Felipe y el Castillo de San Sebastián, visible desde la Alameda, balcón privilegiado de la capital. “SailGP ya sueña con volver a Cádiz en la tercera temporada”, se subraya. Y volverá, porque el convenio con las administraciones públicas firmado para este 2021 también contemplaba 2022.
SE PREVEÍA UNA “JORNADA EUFÓRICA” PARA ESPAÑA, PERO NO PUDO SER
Todo estaba preparado el domingo para vivir una gran segunda y última jornada del Gran Premio de España de SailGP, con el añadido del calor de la afición y curiosos locales. Los ojos estaban puestos en el equipo español y los tripulantes del F50 Victoria aún sentían el calor recibido el sábado al volver a puerto tras la primera jornada de carreras, sin apenas viento, en la que lograron imponerse en una de las tres mangas. Sin embargo, los anfitriones no llegaron ni a competir en la tarde decisiva, con el viento de levante haciendo de las suyas: volcaron y quedaron fuera de competición antes de empezar.
Mientras el F50 Victoria navegaba en mitad de la Bahía de Cádiz camino del campo de regatas, una fuerte racha hizo que se levantaran los timones y el equipo perdiera el control del barco yéndose hacia adelante y, en consecuencia, volcara y rompiera la parte superior de la vela-ala. Ningún tripulante en ese momento sufría ningún daño. Robertson, Florian Trittel, Diego Botín, Joan Cardona, Mateu Barber y Jordi Xammar se llevaban, eso sí, un gran susto y decepción. El bólido volador se retiraba debido a los graves daños; es el segundo vuelco de los españoles esta temporada, también les pasó en Dinamarca. Pero éste no sería el único accidente del domingo: el equipo británico también volcó en la final.
Sin el barco español, la carrera de la segunda jornada se ponía en marcha con vientos de 36 km/h. Dinamarca empezaba dominando y parecía que era la que mejor se adaptaba a las difíciles condiciones meteorológicas, con vientos fuertes y con rachas que superaban los 40 km/h. No obstante, rápidamente Nueva Zelanda y Gran Bretaña tomaban el mando y Japón se apuntaba a la fiesta. Era una prueba de auténtica supervivencia. Victoria de Nueva Zelanda, seguido de Gran Bretaña y EEUU. La segunda carrera del día daría los finalistas. Todo estaba abierto, no había favoritos claros: Nueva Zelanda se iba para atrás, y Australia se llevaba el gato al agua, ganando la prueba, seguido de Gran Bretaña y Japón.
La final entre Gran Bretaña, Australia y EEUU acabó siendo una carrera a dos entre australianos y americanos, con triunfo para los primeros de forma autoritaria: nada más salir, al equipo británico le ocurría lo mismo que a los españoles y volcaban a los pocos segundos de tomar la salida.
En el marco de esta cita mundial, el viernes tras los entrenamientos oficiales también se disputaba, promovido por la Armada española, el Trofeo Juan Sebastián de Elcano, con ocasión del V Centenario de la primera vuelta al mundo. En esta carrera participaron España, EEUU y Nueva Zelanda. El rey, presente, entregó la copa a los neocelandeses.
La SailGP enfrenta a equipos nacionales que disputan regatas cortas e intensas en lugares emblemáticos de todo el mundo, como la Bahía de Cádiz. Esta competición de tecnología punta y alta velocidad, que combina tecnología, competitividad, sostenibilidad y espíritu deportivo, reúne a los “mejores deportistas de la vela” en catamaranes F50, idénticos en su diseño y capaces de alcanzar velocidades que superan los 60 nudos (o sea, 100 km/h). Desde la cita gaditana, las mujeres compiten también en esta liga junto a los hombres.
La prueba española de este mundial de vela ha podido hacer escala en Cádiz gracias al patrocinio de la consejería de Turismo de la Junta de Andalucía (recurriendo a fondos europeos), la Diputación (la única que ha desvelado el dinero que aporta, 200.000 euros por año) y el Ayuntamiento, y la colaboración de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz y la Armada española.
“SOMOS UN DESTINO DE REFERENCIA INTERNACIONAL”
El mismo vicepresidente de la Junta y consejero de Turismo, Juan Marín, no se ha perdido el domingo la competición y ha participado en la entrega de premios. Ante los periodistas ha aprovechado para incidir en los grandes acontecimientos deportivos que acoge Andalucía, citas “de primer nivel” que contribuyen a que “sea un destino de referencia internacional”, también en otoño.
“Andalucía y Cádiz se han convertido en el centro neurálgico de la navegación”, al acoger en sus aguas esta competición de catamaranes, “unos auténticos bólidos que están haciendo de la Bahía el escenario de un espectáculo increíble”, ha reiterado este político de Ciudadanos, que ha valorado la contribución de la SailGP a los resultados turísticos de este puente de la Hispanidad en la zona, ya que en el conjunto de la Bahía “se está prácticamente rozando el 95% de ocupación con un magnífico ambiente”.
Por su lado, la presidenta de la Diputación de Cádiz, Irene García, en la víspera de las carreras, se mostraba convencida de que “vamos a tener una repercusión mucho mayor que la inversión que vamos a abordar”. La socialista diferenciaba en dos segmentos principales dicho retorno: la inyección económica “sin precedentes” para el comercio y la hostelería local y, por otro lado, “la promoción turística a nivel mundial” de la provincia. Y llegaba a decir que la Diputación ha sido “la primera administración pública que ha apostado porque este evento llegara a la ciudad de Cádiz, lo que ha hecho que otras muchas se sumaran”.
Y el alcalde de Cádiz, José María González ‘Kichi’, en la tarde del domingo lanzaba varios mensajes a través de redes sociales al respecto. En uno trasladaba sus felicitaciones “a Australia por la victoria y a toda la competición por unos días donde el deporte, la vela y la Bahía de Cádiz han sido las protagonistas en todo el mundo. Os esperamos el año que viene”. “Emoción y pura adrenalina este segundo día de la SailGP en Cádiz. Todo mi agradecimiento a quienes han estado tantos meses preparándola para que nuestra ciudad haya brillado con tanta fuerza. ¡Exitazo!”, apostillaba en otro tuit.