En noviembre se dará el primer paso, aprobando en pleno el convenio para el impulso de los derechos de la infancia. A partir de entonces “hay una serie de hitos que hay que seguir cumpliendo”. El Gobierno local gaditano entiende que “ya hay muchos espacios donde se tiene en cuenta la opinión de los niños”.
La capital gaditana ha iniciado formalmente el proceso para que convertirse en Ciudad Amiga de la Infancia. Al respecto, las concejalas de Enseñanza y de Juventud e Infancia, Ana Fernández y Lorena Garrón, respectivamente, han mantenido una reunión con Mónica Dimarco, técnico de Sensibilización y Políticas de Infancia del Comité de Andalucía de Unicef.
Una Ciudad Amiga de la Infancia es cualquier ciudad, pueblo o comunidad comprometido con el cumplimiento de los derechos de las niñas, los niños y los adolescentes de acuerdo a la Convención sobre los Derechos del Niño. El reconocimiento es un proceso que ayuda a transformar las entidades locales para que los menores “puedan ejercer sus derechos y alcanzar su pleno desarrollo”, señala la teoría de este ‘sello’. “Es una inversión en la infancia que tiene un impacto positivo, presente y futuro en los propios niños y en toda la sociedad”, remarcan desde Unicef, que está detrás de la iniciativa.
Durante el encuentro de las representantes gaditanas con Dimarco, que se ha celebrado de forma telemática por cuestiones de agenda, el Ayuntamiento ha recibido la información pertinente para comenzar un proceso que tardará unos cuatro años en cristalizar. En el Estado español alrededor de un centenar de localidades cuentan ya con este reconocimiento, entre ellas los municipios gaditanos de Chiclana, Conil, Sanlúcar, Vejer y Barbate.
“ya venimos cumpliendo con los compromisos que nos plantean desde Unicef y por ello consideramos que tenemos todos los mimbres para obtener este reconocimiento”
En el mes de noviembre se dará el primer paso hacia este objetivo, elevando a pleno el convenio para el impulso de los derechos de la infancia. A partir de entonces “hay una serie de hitos que hay que seguir cumpliendo y diferentes medidas en las que hay que trabajar” para optar a esta distinción, detalla Fernández en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz.
“Cádiz debe ser Ciudad Amiga de la Infancia y nos hemos comprometido a recorrer este camino, porque creemos que cumplimos con todos los requisitos y somos transversales en nuestras políticas”. De hecho, “desde el Ayuntamiento ya se viene cumpliendo con los compromisos que nos plantean desde Unicef y por ello consideramos que tenemos todos los mimbres para obtener este reconocimiento”, insiste la edil de Enseñanza.
Por su lado, la concejala de Juventud e Infancia también ha incidido en que el Gobierno municipal “lleva tiempo trabajando en la consecución de los derechos de la infancia y juventud en la ciudad, y con este paso lo que hacemos es ahondar justo en eso”. “Siempre hemos defendido la necesidad de dar voz a los niños y también a los jóvenes de la ciudad y tenemos ejemplos claros como los presupuestos participativos, el proceso para que opinaran sobre los parques infantiles o el pleno infantil”, ha añadido Lorena Garrón.
LOS PASOS A DAR
El proceso de reconocimiento como Ciudad Amiga de la Infancia se sustenta en cuatro puntos básicos. El primero de ellos, que arranca tras la firma del acuerdo que inicia el proceso de candidatura, consiste en el compromiso a impulsar los derechos de la infancia.
El segundo punto es el relativo al diseño del camino para transformar la realidad de la infancia mediante un Plan Local. El tercer punto es la puesta en marcha de dicho Plan Local de Infancia, mediante el que se desarrollarán los compromisos adquiridos con los niños y niñas de la localidad.
Finalmente, el Ayuntamiento deberá realizar un seguimiento y proporcionar información sobre los avances que se vayan realizando. Se trata de un proceso continuo y por ello el reconocimiento como Ciudad Amiga de la Infancia, una vez obtenido, debe renovarse cada cuatro años.