PSOE y UPyD han coincidido en lamentar el ‘envejecimiento’ de Cádiz. La capital cuenta con una población de 122.877 personas según los últimos datos del INE en los que la población joven iguala a la mayor de 65 años. Los socialistas evidencian que los jóvenes “se ven obligados a emigrar porque no tienen acceso a dos derechos fundamentales: la vivienda y el empleo”. Desde el partido de Rosa Díez se llega a afirmar que el PP “está convirtiendo a la ciudad en un bonito geriátrico”.
PSOE y UPyD han coincidido en lamentar los datos de población de Cádiz, pues dibujan, cada vez más, una ciudad “envejecida y sin futuro”. La capital cuenta con una población de 122.877 personas según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) en los que la población joven iguala a la mayor de 65 años, debido al constante éxodo que viene experimentando la ciudad a razón de un millar por año.
En total en la capital hay censados, dentro del colectivo entre 0 y 25 años, 26.733 vecinos, un millar menos que en 2013, y unos 6.000 menos que en 2007, antes de la crisis-estafa. Mientras, en el grupo de más de 65 años de edad están registrados 26.298, mil más que en el pasado ejercicio.
“La pérdida de habitantes y el progresivo envejecimiento se da en los últimos 20 años, durante el periodo de Gobierno de Teófila Martínez. Su incapacidad para frenar la sangría de habitantes es manifiesta y todo ello por seguir una política que da la espalda a la ciudadanía, más basada en la grandilocuencia y en la propaganda que en responder a las auténticas demandas y necesidades de los gaditanos”, interpreta el portavoz municipal socialista, Francisco González.
“Son los menores de 25 años –agrega- quienes aseguran la renovación de la sociedad, sin embargo, en Cádiz, esa renovación cada vez es más dudosa pues desde 2007 hemos perdido a más de 6.000 jóvenes debido a que este equipo de Gobierno ha hecho imposible el acceso a dos derechos fundamentales, la vivienda y el empleo”.
Para el principal partido de la oposición, “Teófila Martínez parece haber olvidado que el principal objetivo de un Ayuntamiento es garantizar unas adecuadas condiciones de vida a sus vecinos y vecinas. De este modo, el éxodo masivo de habitantes que viene padeciendo esta ciudad es una demostración más del fracaso y del agotamiento de su gestión”.
Fran González, en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, ha destacado que esta “espectacular y permanente caída demográfica de la capital tiene mucho que ver con la ausencia de un modelo adecuado de ciudad y con la falta de unas políticas que apuesten por las personas; es decir, por la vivienda, por el empleo y la capacitación de nuestra mano de obra, y por unos servicios sociales que faciliten la vida y favorezcan el bienestar de la ciudadanía”.
“Esperemos –sentencia- que la alcaldesa del PP no trate de engañar a los ciudadanos con los datos de la población flotante, como ya ha hecho en otras ocasiones, pues no se puede ocultar el hundimiento real de la población de la ciudad, situada en cifras de hace cincuenta años, algo que resulta incontestable”.
“UN BONITO GERIÁTRICO”
Por su parte, el coordinador local de UPyD, Felipe Marín, manifiesta que “las políticas del PP están convirtiendo a la ciudad de Cádiz en un bonito geriátrico”. Para esta formación sin representación en el Consistorio, también es la consecuencia de dos décadas de políticas municipales “en las que se ha incentivado la emigración a otras poblaciones del territorio nacional mientras se han eliminado nichos de empleo juvenil en la capital”. A la desaparición de industrias hay que sumar la falta de impulso a otras oportunidades de emprendimiento como el ocio o el comercio. En este sentido Marín considera que “se están desaprovechando las oportunidades de negocio que brinda la llegada de estudiantes universitarios tanto del territorio nacional como del extranjero”.
Por otro lado, asegura que esta “sangría” de población joven está muy vinculada a las dificultades que se encuentran muchos jóvenes a la hora de acceder a una vivienda. Así, quienes consiguen independizarse, optan por residir en otras localidades cercanas donde el precio es más asequible. “Se trata de una tónica que se viene repitiendo desde los años 90 y que en la actualidad se agrava por una progresiva pérdida de poder adquisitivo de la población joven, como consecuencia de las reformas laborales puestas en marcha por el Gobierno central que favorecen una mayor precariedad laboral”, considera Marín.
Por todo ello, el partido de Rosa Díez apuesta por un modelo de ciudad “en el que cobren protagonismo los jóvenes con políticas activas de empleo que favorezcan la inserción laboral de este colectivo” así como dar facilidades para el acceso a la vivienda “fomentando el alquiler o impulsando promociones de VPO en régimen de alquiler con opción a compra”.