Se regulará la concesión de licencias para viviendas de alquiler con fines turístico en la ciudad de Cádiz, y se hará con medidas que tendrán como eje el estudio elaborado al respecto sobre un soporte digital georreferenciado. Este se acaba de presentar, por parte del Ayuntamiento, en un acto con colectivos y agentes sociales que forman parte del Observatorio Municipal de la Vivienda.
El estudio, realizado por Ibermad, revela que actualmente en la capital gaditana hay 1.224 viviendas legalmente constituidas para ser alquiladas con fines turísticos, aunque también añade que en las diferentes plataformas de alquiler turístico las casas disponibles ascienden a 1.509, por lo que se estima que hoy día hay 285 (casi un 20% del total) que no están dadas de alta como tal. Con estos números, la presión de viviendas de alquiler con fines turísticos en la ciudad “asciende a un 2,47%”.
El extenso análisis, según se ha trasladado a DIARIO Bahía de Cádiz, expone que tres de cada cuatro viviendas de alquiler con fines turísticos se encuentran en el casco histórico (sufre el 6,56% de presión de estas casas), y las zonas de San Antonio, El Mentidero y San Francisco-Mina son las que más viviendas de este tipo tienen en relación al total de pisos. Por ejemplo, en el ámbito de la plaza de San Antonio hay más de 140 plazas en viviendas de alquiler con fines turísticos por cada mil habitantes. Las zonas con menor presión de este tipo de viviendas turísticas de toda la ciudad son Segunda Aguada y el barrio de Astilleros, además de la Barriada de La Paz y Cerro del Moro.
En 2018, según el estudio, se registraron 620.100 pernoctaciones de turistas en alojamientos turísticos tradicionales, y 456.529 en viviendas de alquiler con fines turísticos. Asimismo, se reseña que ahora mismo hay en la ciudad 35 establecimientos hoteleros que ofertan 2.627 plazas para pernoctar en total, y 18 apartamentos turísticos que suman 479 plazas.
Al hilo, resalta el déficit de plazas de hospedaje en establecimientos tradicionales y reglados que sufre una ciudad turística de moda como Cádiz, que cuenta con menos oferta de alojamiento en este tipo de establecimientos que, por ejemplo, la ciudad de Soria.
El estudio incide en que en los últimos años se ha duplicado la presencia de turistas extranjeros en la ciudad gracias, sobre todo, al incremento de oferta de plazas de viviendas de alquiler con fines turísticos. Y detalla también una simulación de crecimiento de este tipo de oferta en los próximos 2-4 años, en los que la cifra de viviendas de alquiler con fines turísticos podría llegar hasta los 1.900 pisos.
Tras ese repaso por las cifras actuales, los responsables del informe elaboran una serie de propuestas como establecer un tope del 4% de presión de viviendas de alquiler con fines turísticos en todo el término municipal.
“HAY QUE EVITAR QUE CÁDIZ SE CONVIERTA EN UN DECORADO PARA TURISTAS”
A colación, el concejal de Urbanismo, Martín Vila, ha insistido que el Consistorio “va a actuar para evitar la proliferación descontrolada de las viviendas de alquiler con fines turísticos”. Afirma que “actualmente no es un problema en todo el término municipal”, pero “sí ya en determinadas zonas en las que tenemos que velar por la oferta de viviendas residenciales, para que la ciudad conserve su esencia, su identidad y no se convierta en un decorado visitado por turistas”.
“Cádiz vive una situación controlada respecto a este tipo de oferta en relación a la realidad de otras capitales de provincia”, afirma este edil de Adelante Cádiz, y por ello está en una posición “cómoda” para actuar “a tiempo” sobre esta dinámica de proliferación de viviendas de alquiler con fines turísticos. Así, el equipo de Gobierno tiene decidido regular el fenómeno, y con ese fin, va a estudiar con los servicios jurídicos municipales distintas vías para ello.
En este punto, Vila valora también la irrupción de este tipo de oferta para paliar el déficit de plazas para pernoctar en alojamientos turísticos tradicionales –apartamentos turísticos y establecimientos hoteleros- que sufre Cádiz, al tiempo que reseña que debe regularse este fenómeno para salvaguardar, ante todo, el carácter residencial de la gran mayoría de viviendas: “hay que evitar una burbuja turística en la ciudad”.
“En Cádiz tenemos falta de suelo y mucho alquiler de temporada, además de viviendas vacías, y esto unido a la irrupción del fenómeno de las viviendas de alquiler con fines turísticos agrava las dificultades que encuentran algunos habitantes de la ciudad para acceder a una vivienda”, ha evidenciado por su parte la concejala de Vivienda, Eva Tubío, quien resalta la importancia del estudio presentado para “alumbrar diferentes vías con las que hacer compatibles el progreso económico desde el alojamiento turístico con el derecho de acceso a la vivienda de los gaditanos”.