La empresa municipal Aguas de Cádiz ha renovado el sello de registro de huella carbono, compensación y proyectos de absorción de CO2, que otorga el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico por compensar totalmente sus emisiones CO2 ya que garantiza la huella de carbono nula o ‘emisión cero’ mediante el sistema de reforestación de árboles.
En este sentido, esta sociedad del Ayuntamiento gaditano dice ser hoy día la única operadora de agua de Andalucía y una de las tres del Estado español que aparece en este registro, de carácter voluntario, que recoge los “esfuerzos” de las empresas, administraciones y otras organizaciones en el cálculo, reducción y compensación de las emisiones de gases de efecto invernadero que genera su actividad como medidas para la lucha contra el cambio climático, así como la cartera de proyectos forestales con los que dichas organizaciones pueden compensar su huella.
La compensación total de la huella de carbono quiere decir que Aguas de Cádiz cumple con tres requisitos establecidos: calcular, reducir y compensar. Así, posee los tres sellos que emite el Ministerio sobre el registro de huella de carbono en los sectores de ‘Calculo’, ‘Reduzco’ y ‘Compenso’. Este último sello lo consiguió por primera vez en 2018 al compensar las escasas toneladas de CO2 que emite mediante el sistema de reforestación. Además, está registrada en el Sistema Andaluz de Compensación de Emisiones (SACE) y supera una auditoría anual por una empresa acreditada.
“PROTEGER LA SALUD Y SALVAR VIDAS”
La empresa pública municipal de aguas lleva cinco años calculando su huella de carbono y está ejecutando importantes acciones encaminadas a reducir los Gases de Efecto Invernadero (GEI) que provocan el calentamiento global y que se emiten en los procesos de producción, transporte, distribución y consumo energético que provoca su actividad. Esfuerzos que están dando ya resultados destacados en eliminación de las emisiones de GEI y en la reducción de la huella hídrica “y que seguirán dando fruto en los próximos años”. De hecho, el consumo de energía eléctrica en Kwh tiene una tendencia a la baja.
Concretamente, las actuaciones de esta empresa cien por cien de los gaditanos para la reducción de la huella de carbono han supuesto dejar de emitir 307,7 toneladas de CO2 a la atmósfera, cantidad que irá en aumento, con la previsión de haber dejado de emitir hasta 372,32 toneladas de CO2 en 2021 y de 423,7 toneladas de CO2 en 2022.
Al margen de los beneficios para el medio ambiente, con estas medidas Aguas de Cádiz ha ahorrado ya más de 1,1 millones de euros desde 2015, lo que supone un 45% del gasto en energía eléctrica, y el consumo de kilovatios hora (Kwh) se ha reducido al año en un 35%, poniendo así las medidas que permitirán cumplir con el compromiso del Acuerdo de París de 2015 de reducir en un 50% la emisión de gases de efecto invernadero. Por otra parte, el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) número 7 de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas es “garantizar el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y moderna” para luchar contra el cambio climático.
Entre las medidas adoptadas, Aguas de Cádiz destaca la colocación de bombas de impulsión más eficaces en las estaciones de bombeo de aguas residuales, la instalación de plantas fotovoltaicas en el edificio de María Auxiliadora -ahora ampliada- que genera 20,2 KWp y están proyectadas las que serán las dos plantas más grandes de la ciudad: una en La Martona de 78,8 kWP que podrá generar al año 133.872 Kwh y otra en la cubierta del almacén de la Zona Franca en donde se instalará planta de aproximadamente 90 KWp que generará una energía estimada de 145.000 Kwh. Esto supondrá que, de cumplirse las previsiones, la sociedad podrá tener un autoabastecimiento de casi el 18% en 2022 incluyendo todas las estaciones de bombeo, es decir, casi el 18% de la energía consumida por Aguas de Cádiz será de origen fotovoltaico.
Otras actuaciones a destacar son la renovación paulatina del parque móvil con coches eléctricos o mixtos y la adquisición de camiones para la limpieza de redes de última generación que restringen al máximo sus consumos, sus emisiones de CO2 y la huella hídrica, la reducción de hasta un 20% el tiempo de funcionamiento de las fuentes ornamentales, mejora del sistema de climatización de su edificio de oficinas o la sustitución de las luminarias por leds.
En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, la presidenta de Aguas de Cádiz y concejala portavoz del Gobierno local, Ana Fernández, valora positivamente los esfuerzos que está realizando la empresa tanto para la eliminación de gases de efecto invernadero como para la reducción de la huella hídrica puesto que “tenemos la obligación de frenar nuestra influencia a muchos niveles y de buscar soluciones sostenibles en nuestras múltiples actividades para luchar contra las inundaciones, las sequías, la contaminación y escasez del agua y su escasez para, en definitiva, proteger la salud y salvar vidas”.