El antiguo Rectorado en la calle Ancha de Cádiz, ahora espacio municipal rebautizado como Casa de la Cultura, acaba de abrir en una de sus salas la Biblioteca Social Nadia Consolani, promovida y gestionada por la Asociación Amigos de Quiñones.
“La inauguración de una biblioteca es un buen motivo para alegrarnos y más si es un espacio en el que se van a salvaguardar las bibliotecas personales de Nadia Consolani y, por ende, de Fernando Quiñones”, resaltaba la concejala de Cultura, Maite González, en el acto de apertura junto al presidente de la Asociación Amigos de Quiñones, Ricardo Carpintero; Eugenio Barriola, responsable del servicio de la biblioteca; y Mariela Quiñones, hija de Nadia y Fernando.
Así, este espacio que permitirá a Amigos de Quiñones “seguir creciendo” cuenta con los libros de este matrimonio, sus fotografías, sus cuadros y sus esculturas entre otros, “un legado valiosísimo para disfrute de las generaciones gaditanas venideras y actuales y de todos los buenos lectores”, insistía esta edil del PP.
La iniciativa ha sido posible gracias a las donaciones de entidades y particulares y la colaboración del Ayuntamiento; cuenta con más de 4.000 volúmenes, incluyendo la valiosa colección personal de Quiñones y de su esposa y compañera Nadia Consolani.
Además de ofrecer un lugar para la lectura y el aprendizaje, contará con talleres de poesía, relatos, clubes de lectura, concursos de cuentos infantiles, presentaciones de libros, conferencias y coloquios. Asimismo, en breve se va a abrir una línea de investigación tanto de la obra de Fernando Quiñones como la de Nadia Consolani.
La flamante biblioteca estará abierta para dar servicios (también de préstamo) los miércoles por la tarde de 18 a 20 horas y los jueves por la mañana de 11 a 13 horas, se detalla en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz.
“RECONOCE TAMBIÉN LA LABOR ARTÍSTICA DE CONSOLANI”
En el acto inaugural, Ricardo Carpintero agradecía a todas las instituciones, particulares y librerías que han contribuido para los fondos de la biblioteca, y aseveraba que “este lugar cumple todos los parámetros para ser un punto de encuentro”. “Esta biblioteca viene a reconocer también la labor artística de Nadia Consolani y aquí deja su legado cultural en manos de quien quiera disfrutarlo”, apuntaba a su vez Eugenio Barriola.
Por su parte, Mariela Quiñones, hija de Fernando y Nadia, manifestaba que “mi madre está que ni se lo cree y está muy contenta de que se haga un reconocimiento de su obra, independientemente de la de mi padre”. También ponía el foco en la labor investigadora que puede haber en este espacio “porque hay gente que desea hacer una tesis sobre la obra de Quiñones”.