El Ayuntamiento de Cádiz, a una semana de las elecciones municipales del 26-M, ha sacado al fin a licitación el nuevo pliego del servicio de limpieza viaria y recogida de residuos urbanos. Un servicio público privatizado (actualmente en manos de la UTE Sufi-Cointer) cuyo último contrato lleva caducado desde 2016, y que desde entonces funciona a base de prórrogas.
Con los votos a favor del equipo de Gobierno y del PSOE, salía adelante a mediados de abril el expediente de contratación de este servicio, el más costoso para las arcas municipales, y el inicio del procedimiento de licitación; con ese paso se culminaban meses y meses de elaboración de dicho pliego y de quejas reiteradas por su lentitud de la bancada de la oposición, que se ha llevado casi todo el mandato denunciando que la ciudad está más sucia que antes.
El flamante pliego tiene un presupuesto máximo de hasta casi 16,8 millones de euros al año (actualmente la limpieza anual cuesta cerca de 16,5 millones), y se licita por casi 168 millones y diez años. Las empresas interesadas tienen hasta el 31 de mayo para presentar sus propuestas. El concejal de Medio Ambiente, Álvaro de la Fuente, ha destacado las novedades introducidas, “tanto mejoras en la prestación del servicio como de las condiciones laborales, sociales y medioambientales”. Sin embargo, días atrás Agaden-Ecologistas en Acción cuestionaba el mismo, al considerar que “representa un continuismo con respecto al anterior, no responde a las necesidades urgentes de mejora del servicio que reclama y necesita la ciudad, e incumple los requisitos legales de recogida diferenciada de la fracción orgánica de las basuras”,
LAS “MEJORAS”
Entre las mejoras que deberá aportar la nueva empresa que se haga con la gestión del servicio, que se subrayan desde el bipartito de Sí se puede y Ganar Cádiz en Común, está la elevación a 57.000 las jornadas a desempeñar, incluyendo 2.000 destinadas a las grandes celebraciones de la ciudad, “unas jornadas que contrastan por su incremento con los recortes realizados durante la etapa del PP”.
En cuanto a las mejoras laborales, está la apuesta por combatir la brecha de género “ya que apenas un 10% de la plantilla es mujer” por lo que se recoge que el 40% de las nuevas contrataciones para sustituciones, bajas temporales o vacaciones, sean mujeres. Del mismo modo, se reserva un porcentaje de contrataciones para personas en situación de especial vulnerabilidad.
En el ámbito medioambiental, la nueva maquinaria contribuirá notablemente a la descarbonización del servicio, introduciendo vehículos eléctricos e híbridos, que reducen también las emisiones sonoras y ofrecen mayor eficiencia en el consumo de agua. El pliego plantea igualmente alternativas al uso del glifosato, respetuosas con el medio ambiente, y la inclusión de limpiezas en los senderos del Parque Natural Bahía de Cádiz pertenecientes al término municipal.
Atendiendo a las dificultades de reciclado en el viario interior del casco histórico, se incorporan nuevos puntos limpios móviles en plazas de fácil acceso. De hecho, se incluye en este servicio la gestión integral del punto limpio fijo, ubicado en la calle Puerto de Santa María, asumiendo el adjudicatario las funciones de recuperador oficial de materiales valorizables, tales como el papel, cartón, la chatarra metálica o el aceite vegetal usado.
Otra de las novedades es el incremento de la frecuencia de barrido tanto en intramuros como extramuros y se mejora el baldeo, entre otras.
Los contenedores de basura se renovarán íntegramente, debiendo incorporar diseños ergonómicos, garantizando la accesibilidad universal. Deberán presentar anclajes para evitar desplazamientos por acción de los vientos, además de estar geolocalizados. Y se eleva a 3.300 el número de papeleras nuevas, 500 más de las actuales, que deberán contar con cenicero; y se plantea la posibilidad de reducir drásticamente el uso de bolsas de plástico, incrementando sustancialmente la limpieza de las papeleras.