“Álvaro Cervera deja de ser entrenador del Cádiz CF. ¡Gracias por todo, míster!”. Con este frío y escueto mensaje a través de twitter poco después de las nueve de la mañana confirmaba el club gaditano la destitución, que ya algún medio sospechaba desde la tarde del lunes, del técnico que cogió a un equipo mediocre en el que no creía nadie en 2016 en Segunda B, y lo llevó cuatro campañas después hasta Primera con el mérito añadido de exprimir a una plantilla limitada. Su relevo en el banquillo, a falta del anuncio oficial, será Sergio González.
“El Cádiz Club de Fútbol comunica que este martes ha cesado de sus funciones a Álvaro Cervera como entrenador del primer equipo”, era el comunicado ‘ampliado’ en la web minutos después. Y la indignación entre gran parte de la afición, por las formas de quien se ha convertido en todo un símbolo de la entidad y de la ciudad, no se hacía esperar en redes, como mensajes como: “Vizcaíno dimisión!”; “Cervera es el último que debería de haber caído. Siempre contigo, gafa!”; “Así, en tuit simple, como si se estuviera marchando un cualquiera. Se merece mucho más”; “El mismo mensaje que cuando se rescindió a Jovanovic. Este club está en unas manos lamentables en todos sus estamentos. Que pena la deriva que está tomando mi Cádiz y en manos de quien está”; “Con todo lo que significa Álvaro Cervera para club y afición, anunciar en un simple tuit frío su cese es una falta de respeto a él y al cadismo. Merece una despedida con honores. Él nos devolvió la fe cuando estábamos en la oscuridad más profunda del pozo. Agradecimiento eterno”. Incluso el alcalde, José María González ‘Kichi’, se manifestaba durante la mañana con un “gracias por tanto, míster”.
Y antes de mediodía comparecía en rueda de prensa en el Nuevo Mirandilla el presidente Manuel Vizcaíno, sin el entrenador cesado a su lado (y con un grupo de aficionados protestando en los bajos de tribuna), para tratar de explicar la destitución que llega con el Cádiz penúltimo en la clasificación, y aunque es verdad que queda toda la segunda vuelta por delante para tratar de salvar la categoría, desde hace jornadas muestra sensaciones preocupantes de equipo que ha dejado de pelear.
“NO SE PUEDE ESPERAR MÁS, HABÍA QUE TOMAR UNA DECISIÓN”
“Hemos tomado una difícil decisión. Se ha producido esta mañana, a las nueve de la mañana en la Ciudad Deportiva. He tomado la decisión más triste, más difícil, tanto profesional como personalmente hablando. Espero que esta decisión nos sirva para enderezar el rumbo”, apuntaba el sevillano; incidiendo en que “son momentos duros, complicados para todos. No es un día de muchas palabras. Tengo la obligación de intentar que el Cádiz mantenga la categoría y lo voy a intentar hasta el final. Después del partido de Osasuna, entendí que era el momento. Yo soy el máximo responsable. Asumo los errores que he cometido. Creo que el equipo se merece más puntos. Pero ya no se puede esperar para no deteriorar la situación. Había que tomar una decisión”.
Aunque la relación entre Vizcaíno y Cervera no era la mejor, el presidente no ha dudado en subrayar que “ha sido el mejor entrenador de la historia del Cádiz, por muchos motivos. Creo que Álvaro ha sido y es un gran profesional. Pasará a la historia porque se lo merece”. De hecho, se le echa como el inquilino del banquillo gaditano con más partidos: 257 encuentros dirigidos, y de ellos, 99 victorias.
“El 99% de la responsabilidad y la culpa es mía -añadía el máximo mandatario-. Hemos hecho cosas mal. Tenemos que detectarlas para salir adelante. Quiero estar solo y creo que debo estar solo. Creo que se tiene que focalizar la culpa en alguien”,
“YA TENGO DUDAS DE SI TRAYENDO FICHAJES ESTO VA A REVERTIR”
Mirando al mañana y a la espera de que se concrete el nombre del nuevo entrenador, el presidente del club reflexionaba con bastante pesimismo que “estamos lejos del objetivo y el equipo transmite cierta tristeza hasta el punto que estamos a cuatro puntos de la salvación; es porque algo he hecho mal. Estamos en un momento en el que había que hacer un cambio. En pleno mercado de fichajes, yo ya tengo dudas de si trayendo fichajes esto va a revertir. Espero que esta decisión nos ayude a enderezar el rumbo”.
Respecto a ese mercado invernal, según recoge DIARIO Bahía de Cádiz de fuentes del club, insistía en que “van a llegar jugadores que van a mejorar el nivel de la plantilla. Merece la pena apurar para que vengan grandes jugadores. La idea es traer tres o cuatro”. De momento, la única incorporación es Fede San Emeterio, que viene cedido del Valladolid, actualmente en Segunda.
En esta rueda de prensa, el presidente también tenía palabras para los cadistas, muy mosqueados con él y determinados gestos de su gestión (la más reciente, la incomprensible presencia de sevillistas en tribuna el pasado partido ante el Sevilla, pero además, esa foto navideña en la plaza de toros de El Puerto, la obsesiva idea de levantar un nuevo estadio Carranza incluso fuera de la ciudad, su posición equidistante ante la huelga del metal gaditano, la extraña internacionalización de la marca Cádiz CF y la pérdida de esencia-identidad, o hasta el ‘speaker’ y su animación artificial…): “me preocupa mucho la afición. Tendemos la mano a cualquier iniciativa que ayude a mejorar el club. Somos un club abierto a la gente. Quiero que la afición anime al equipo todo lo que pueda durante el partido y apoye al nuevo entrenador”.
PARTE DE LA HISTORIA CADISTA
Álvaro Cervera acaba su inolvidable etapa en el banquillo del Cádiz CF, aunque tenía contrato hasta 2024. De hecho, su última renovación fue en junio de 2020, poco antes de certificarse el ascenso a Primera.
El técnico cántabro (aunque es natural de Malabo, Guinea Ecuatorial) se ganó pronto el afecto y confianza de gran parte de la afición (la otra, siempre ha dudado de su estilo de juego ultradefensivo, pero no puede dejar de reconocer sus méritos). Recaló en la Tacita de Plata en abril de 2016, sustituyendo a Claudio Barragán y con el equipo en puestos de liguilla en Segunda B aunque mostrando una mediocridad preocupante.
Entonces se dijo que su fichaje buscaba “oxigenar un entorno difícil”. Se disputó ese play off con el cadismo muy desconfiado, e, inesperadamente, se consiguió el deseado y necesario ascenso a Segunda. División en la que el equipo, bajo sus órdenes, siempre estuvo más cerca de la zona alta que de la cola de la tabla, con un estilo reconocible, lucha y entrega, pese a una plantilla cortita (de ahí que Cervera siempre repitiera que con estos mimbres, no podía -ni sabía- jugar a otra cosa). Cuatro años después se logró subir a Primera, y en la campaña del regreso a la elite, extraña por esos estadios sin público por el coronavirus, se consiguió la permanencia con holgura con victorias además ante el Athletic, el Real Madrid y el Barcelona. ‘El Gafa’ se va como el míster con más partidos dirigidos en la historia de la centenaria entidad.
Colgó las botas en 2002 después de una dilatada trayectoria como futbolista, en equipos como el Racing de Santander, Mallorca, Valencia o Hércules. Como entrenador, antes de recalar en el Nuevo Mirandilla, ha estado en los banquillos de Catarroja CF, Villarreal juvenil, CD Castellón, UD Almansa, Alicante CF, Cultural Leonesa, Real Jaén, Real Unión, Recreativo de Huelva, Racing de Santander y Tenerife, conjunto al que también ascendió a Segunda.