El Ramón de Carranza reabrió sus puertas un mes y medio después del enésimo varapalo sufrido por la afición amarilla, para la celebración de la LXI edición del Trofeo Carranza, que este verano se disputa una semana antes del inicio liguero. En la jornada del viernes se jugaron las dos semifinales: en la de la tarde, el Betis remontaba y se imponía 2-1 al Granada en un derbi con apenas ambiente. Y por la noche, con algo más de público en las gradas, un Cádiz competitivo le plantó cara a todo un Atlético de Madrid mejorable. No hubo goles, y en la tanda de penaltis, los de Simeone no fallaron. La final de este sábado enfrentará a madrileños y sevillanos.
El estadio Ramón de Carranza volvió a abrir sus puertas un mes y medio después del enésimo varapalo sufrido por la afición amarilla -aquel fatídico último partido de los play off de ascenso a Segunda ante el filial del Bilbao en el que el Cádiz no fue capaz de darle la vuelta a la eliminatoria y certificó arrastrarse una temporada más, la sexta consecutiva, por esos campos de Segunda B-, para acoger la LXI edición del Trofeo Carranza, que este verano se disputa una semana antes del estreno liguero.
El llamado Trofeo de los Trofeos que busca todavía a estas alturas de saturación futbolística tener un sentido más allá de ser una mera excusa para la celebración de las controvertidas barbacoas en la playa, y pese a ello, insiste en mantenerse como el único (o casi) torneo veraniego cuadrangular. Y presenta para 2015 un cartel con ciertas pretensiones, aunque pendiente de las ganas que traigan los contendientes de Primera: Real Betis, Granada CF y Atlético de Madrid. No falta, por supuesto, el anfitrión y verdadero gancho, el Cádiz. Algo de atractivo aún debe tener esta tradicional cita cuando hasta tres televisiones han apostado por su retransmisión, entre ellas la plataforma Movistar +.
El Cádiz se toma su Trofeo como presentación ante los suyos -de momento, más de 10.000 abonados- de cara a la inminente temporada, y en esta ocasión entraba en juego en la segunda semifinal del viernes, la de la noche, emparejado con el ‘gallito’ del cartel, el conjunto de ‘Cholo’ Simeone, y vigente campeón del Carranza. Y con el Athletic goleando al Barcelona en la ida de la Supercopa, haciendo la competencia a la misma hora.
Un equipo amarillo que sigue confiando en Claudio Barragán para el banquillo y como suele ocurrir en las últimas campañas, se ha renovado de forma notable, este curso quizá con más hombres que nombres; y que debe olvidar pronto a Villar, Jona o Airam, y encomendarse a los goles de sus refrescos arriba, como Lolo Plá, Wilson Cuero o el fichaje ‘estrella’ y polémico de la pretemporada, el jerezano Dani Güiza, que en sus tiempos mozos se auto-definió como “anticadista” y cuyo rendimiento a sus treinta y cinco años es toda una incógnita, tras pasar sus últimas campañas en Paraguay.
Esta segunda semifinal, ante unas 6.500 personas en las gradas, se inició con un Cádiz controlando bien el balón, no se achicó ante todo un equipo de Champions, pese a que Thomas en el minuto 9 estrellaba el balón en el palo; y un Kike Márquez muy motivado en esos primeros compases. Mantecón erraba una oportunidad que parecía clara, a pase de Cuero, poco después. Con el paso de los minutos, el Atlético trató de imponer su velocidad y juego vertical, aunque los locales no se descompusieron, y en el 33 de nuevo Mantecón asustaba a Moyá. Y poco más, la primera mitad fue tornándose cada vez más insulsa, hasta el descanso.
Ya en el segundo periodo, los de Simeone llevaron muchos minutos la iniciativa ante un equipo local muy serio que no pasaba verdaderos apuros, pero que tampoco los generaba, hasta el tramo final del choque, cuando sí inquietó en varias ocasiones al rival. Nadie diría que entre uno y otro equipo hay dos categorías de diferencia… Barragán movió el banquillo en este tiempo, dando su oportunidad a Álvaro García, Salvi, Aridane, al canterano Alberto Quintana, Lolo Plá y Canario.
Todo parecía indicar que este partido se tendría que acabar decidiendo en la lotería de los penaltis, y así fue. Y aquí, los rojiblancos se mostraron más efectivos, marcando sus cuatro lanzamientos, mientras que por parte amarilla, sólo entraron dos, los de Quintana y Álvaro García. Canario y Salvi se toparon con el portero rival. Al borde de la medianoche, los colchoneros confirmaban su pase a la final, donde intentarán lograr su décima copa, y el Cádiz, a la consolación.
EL BETIS REMONTA EN LA PRIMERA SEMIFINAL
El LXI Trofeo Carranza subía el ‘telón’ por la tarde con la primera semifinal, la disputada entre Betis y Granada, con muy poco ambiente en las gradas, unas 2.500 personas. Y el calor no era una excusa, ya que ni parecía agosto. Un derbi regional entre un recién ascendido, que vuelve al torneo gaditano ocho años después -tiene en sus vitrinas cinco copas de campeón- y un conjunto inédito en esta competición veraniega, a cuyo presidente, Quique Pina, se le conoce bien por Cádiz.
El conjunto nazarí demostró más ambición en parte de la primera mitad y fruto de ese mayor empuje llegaría el gol de El Arabi de cabeza en el minuto 23. A partir de ahí, los verdinegros daban un pasito adelante, pero apenas probaron a Oier, y tuvieron que tener cuidado con las contras del rival.
Los de Pepe Mel salieron tras el descanso controlando la pelota y el juego y Francis estuvo a punto de igualar el marcador pronto. Sí estuvo más afortunado en la siguiente jugada Rubén Castro, haciendo el 1-1. Un gol que evidenció que entre el escaso público abundaban los sevillanos. Poco después Succes fallaba el 1-2 al encararse solo ante el portero bético; y Castro marcaba el 2-1, pero el tanto era anulado.
Tras el baile de cambios en los dos banquillos, el encuentro volvió a perder intensidad, que la fue retomando en el tramo final, con los verdinegros buscando sortear los penaltis, y Portillo, tras avisar en el 44, marcaba en la siguiente acción el 2-1. El Granada quiso el empate a la desesperada, con su portero intentado rematar una falta, y a la contra, el Betis –que ya jugaba con diez por expulsión de N´Diaye, y de Mel por protestar- casi hacer el tercero, anulado por fuera de juego.
Los verdinegros pasan a la gran final de este sábado, donde se verán las caras con el Atlético de Madrid. Por su parte, el conjunto de José Ramón Sandoval, de más a menos, se deberá conformar con el trámite de la consolación junto al Cádiz, en un choque curioso… ¿con quién irá Pina? DIARIO Bahía de Cádiz Dany Rodway
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