La Policía Nacional ha abortado, en “una actuación pionera”, la introducción en alguna de las prisiones de El Puerto de Santa María (bien Puerto I o Puerto II) de un teléfono móvil de alta gama y dos mini botellas de whisky perfectamente empaquetadas, adosadas a un dron.
En el marco de las funciones de seguridad perimetral y prevención de hechos ilícitos en el entorno de los penales, fueron identificados de madrugada tres individuos a bordo de un vehículo, estacionado de forma oculta en un carril próximo a Puerto II, en cuyo registro fueron descubierto, entre otros objetos: un dron e hilo de pesca con cuatro engarces, junto con un paquete envuelto en plástico negro que contenía el teléfono móvil y las dos botellas de alcohol. Las tres personas carecían de cualquier tipo de licencia para hacer volar dicho artefacto.
Los teléfonos móviles se han convertido en el efecto más buscado por algunos internos de centros penitenciarios, y se sospecha que su introducción acarrea un alto beneficio económico para los encargados de hacerlo, subrayan desde la Policía en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz.