El portuense Javier Ruibal, desde hace unas semanas hijo predilecto de su ciudad natal, tiene nuevo trabajo: ‘Ruibal’. Escrito y compuesto de marzo a mayo, en pleno confinamiento ante la crisis sanitaria del coronavirus, se trata además de un libro-disco de 12 canciones inéditas, a las que se suma ‘Intemperie’ (Premio Goya a la mejor canción original 2020 de la película homónima de Benito Zambrano), y 13 relatos inéditos, uno por cada tema.
La intención de Ruibal con este LP es “devolver al disco el valor emocional que siempre tuvo”, de ahí esta propuesta de libro-disco, “para que vuelva a ser un objeto preciado en las manos de quien lo reciba”.
Grabado entre junio y agosto, ha contado con la producción y arreglos de su hijo Javi Ruibal (que también se encarga de baterías y percusiones acústicas y electrónicas) y colaboraciones de Faiçal Kourrich, Riki Rivera, Lucía Ruibal y David Palomar. Está publicado por Lo Suyo Producciones.
“Todas las canciones reflejan una evolución notable con respecto a discos anteriores”, se remarca en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz. Temáticas y enfoques diferentes “en los que no faltan emoción y humor”. Ruibal “ha profundizado en una poética donde se aúnan nuevos conceptos con modos poéticos de gran calado”. Su afán por ofrecer belleza y sobriedad siguen en la tónica de excelencia. Y en lo musical, desde su heterodoxia de compositor andaluz y universal, como ya es tradición en sus obras, “logra de nuevo espacios de encuentro entre todas las músicas planetarias”.
“Hay mucho amor y mucho humor en este trabajo salido de los meses más duros del estado de alarma en los que, lejos de caer en la tristeza y la melancolía previsible, se ha centrado en una obra completísima, llena de madurez y frescura”, se subraya.
Parábolas sobre la cordura como ‘Sala de ausentes’; ejercicios laberínticos, casi trabalenguas, y llenos de humor como ‘Física cuántica’, ‘Soy ese que te cantaba’ o ‘Música en vena’; baladas de una gran belleza como ‘Astronomía’; reivindicaciones sobre nuestro origen africano ‘Yo soy africano’; derroches de humor gaditano como ‘Musa’ o las bulerías ‘Solo la dosis hace el veneno’; tienen su culminación en dos reflexiones sobre el aislamiento sufrido ante el coronavirus “mientras Internet nos ha salvado, en cierta medida, de caer en estados paranoicos”: ‘Amor en la red’ y ‘Baile de máscaras’.
Acompañan a los temas un relato donde el cantautor portuense traza historias breves pero intensas que tocan tangencialmente con lo contado en la canción, “añadiendo así un lugar de reflexión y disfrute que las canciones no permiten por su naturaleza de brevedad y lenguaje inmediato, además de un otorgar un mayor atractivo a la publicación”.
En paralelo, ya está en marcha la gira de presentación de ‘Ruibal’, que se promociona como “una reflexión sonora y visual sobre las inquietudes más íntimas del ser humano”. En lo que resta de octubre, el gaditano tiene fechas confirmadas sobre todo en la provincia de Sevilla, además del día 30 en el Teatro Moderno de Chiclana. Y el 22, espera pisar el Teatro Nuevo Alcalá de Madrid. Ya en noviembre, en el ámbito de la Bahía está programado para el 28 en el Real Teatro de las Cortes de San Fernando.