CRÍTICA. Juan Pérez Floristán encontró un hilo conductor para recordar la coincidencia de dos celebraciones: el estreno hace cien años de Fantasía Baetica de Manuel de Falla y el nacimiento de Beethoven hace 250 años. El pianista resaltó otra coincidencia para este concierto, el célebre compositor gaditano nació un 23 de noviembre.
Quizás obligado por la conexión diacrónica, el joven pianista construyó un programa con raíces folclóricas, como la tarantela del último movimiento en la Sonata Nº 18 de Beethoven. Una sonata ni fu ni fa, digámoslo claro, que se escucha con gusto y con la sensación de apremio y precipitación impulsada por el carácter de esta obra a medias jocosa y juguetona. Quizás obligado, el joven intérprete no concedió descanso alguno, ni entre movimientos ni entre piezas del programa. Se percibió una aceleración general en la ejecución, comprensible por otras circunstancias pero que desasosegó la audición del concierto.
Fantasia Baetica es la única pieza de Falla para piano solo. Una obra compuesta para el famoso pianista Arthur Rubinstein que tuvo en cuenta sus gustos y su manera de tocar. Esta composición resulta llamativa, fue la última de las obras de color andalucista de Manuel de Falla, por supuesto brillante pero sin “pellizco” emocional; una pieza de alto nivel y con sabor y luz propias, aunque deudora de las tendencias musicales de la época. En su interpretación, Pérez Floristán le añadió un matiz más percusivo, quizá influido por sus variadas aficiones musicales, aunque mantuvo la claridad y sonoridad características.
En contraste a la pieza de Falla, su adaptación para piano de la bulería Los Caños de Meca, pieza central de la virtual segunda parte del concierto, mostró la faceta apasionada, desinhibida y exuberante del pianista, más cercana -melodía y maneras- a la apreciación de la música de Andalucía. En la tónica del concierto, impregnado de garra en la ejecución y lleno de contrastes rítmicos y dinámicos, los Tres Preludios de Gershwin denotan que todo compositor vuelca su marca personal en cada pieza; en su caso, un maravilloso pastiche de música clásica, blues, ragtime y jazz. Tanto el segundo preludio de Gershwin, una canción de cuna en blues como la definiera el autor y, sobre todo, la Danza de la moza donosa, de las 3 Danzas Argentinas de Ginastera abrieron una ventana al contenido lirismo encerrado en las manos del laureado intérprete.
Con el Momento musical nº 3 de Schubert, como propina de agradecimiento al público, cerró el concierto el ganador del Premio Internacional Paloma O’Shea y de la Medalla Ciudad de Sevilla, entre otros galardones. DIARIO Bahía de Cádiz
FICHA DEL CONCIERTO:
XVIII Festival de Música Española de Cádiz.
El centenario de ‘Fantasía Baética’ y sonata de Ludwig van Beethoven con anotaciones expresivas de Manuel de Falla. Juan Pérez Floristán, piano. Programa: Ludwig van Beethoven (1770-1827) Sonata para piano n.º 18 en Mi bemol mayor Op. 31 n.º 3 (Allegro / Scherzo – Allegro vivace / Menuetto: Moderato e gracioso / Presto con fuoco). Manuel de Falla (1876-1946) Fantasía Baetica. George Gershwin (1898-1937) Tres preludios (I. Allegro ben ritmato e deciso / II. Andante con moto e poco rubato / III. Allegro ben ritmato e deciso). Gerardo Núñez (1961) Los Caños de Meca – bulería- (Arr. Juan Pérez Floristán). Alberto Ginastera (1916-1983) 3 Danzas Argentinas op. 2 (I. Danza del viejo boyero – II. Danza de la moza donosa – III. Danza del gaucho matrero).
Lugar y día: Auditorio del Palacio de Congresos de Cádiz. 23 de noviembre de 2020.