Más de 550.000 electores en/de la Bahía de Cádiz están llamados este domingo 9-J a participar en las elecciones al Parlamento Europeo, una de las instituciones fundamentales de la Unión Europea (actor clave en el establecimiento de la dirección hacia la que se orienta el proyecto europeo) y la única elegida por sufragio universal directo de la ciudadanía.
Finiquitada el viernes, sin grandes alardes, la reglamentaria campaña electoral de dos semanas en España en la que el argumentario de los dos principales partidos, rivalizando por quedar por encima del contrario, no se ha salido demasiado de los temas domésticos (el PP, metiendo miedo con Pedro Sánchez, su esposa y la ley de amnistía, y el PSOE presumiendo de la gestión de Pedro Sánchez y alertando de los recortes de la derecha/ultraderecha), tras este sábado de jornada de reflexión, el domingo toca votar: se abrirán las urnas entre las nueve de la mañana y las ocho de la tarde.
Y los resultados, más o menos definitivos, no empezarán a conocerse hasta las once de la noche, ya que la normativa europea establece que no se pueden difundir datos del recuento hasta el cierre de colegios en todos los países de la Unión Europea (donde ya se vota desde el jueves), siendo Italia el último a esa hora.
“LAS COSAS QUE SE APRUEBAN EN EUROPA TIENEN UNA INCIDENCIA DIRECTA SOBRE LOS GADITANOS”
En Cádiz, la campaña se ha desarrollado con escasos actos, y sobre todo a partir de convocatorias de cara a la prensa para machacar una y otra vez los mismos mensajes. Han pasado por la provincia (contando también con la precampaña) las cabeceras de lista de PSOE, PP y Sumar. Además, los socialistas han organizado mítines con el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, o la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. Y los populares, han recurrido a su sonriente líder en Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, como principal exponente.
Desde el PSOE gaditano se ha insistido en llamar al voto para “darle la vuelta a las encuestas otra vez” y “parar los retrocesos que representan la extrema derecha y frenar esa coalición de Vox y del PP que viene a restar libertad, a restar derechos y a crear más crispación, más confrontación y menos avances”. Al tiempo que se han ido desgranando las medidas “de impacto social” del Gobierno de coalición liderado por Pedro Sánchez que han beneficiado a la clase trabajadora que es, “el equipo donde debemos situarnos”: las subidas del SMI, de las pensiones, en las becas o el IMV. Todo ello, “gracias a una política redistributiva social con impuestos a la banca, a las grandes empresas y a las energéticas”.
Mientras, el PP de Cádiz ha defendido estos días que “la única forma de que la provincia y Andalucía sean fuerte en Europa” es votándole este domingo. Supone “la oportunidad de responder a un Gobierno de Pedro Sánchez que siempre va a contramano en la provincia. Cualquier otra papeleta sólo servirá para que Sánchez siga mintiendo, creando cortinas de humos y privilegiando a unos contra otros, para mantener a un gobierno en el que todo gira en torno a siete votos y en tapar la corrupción”. Así, para esta derecha que tiene claro que “gran parte de todo lo que es nuestra vida cotidiana depende de decisiones de Europa y depende de fondos europeos”, este 9-J es “fundamental para abrir la puerta para que Pedro Sánchez se vaya a la oposición y deje de hacer daño a la sociedad española”.
Y el otro partido más o menos movilizado en la provincia durante la campaña, Sumar, ha animado a la ciudadanía gaditana a acudir a las urnas “con ilusión, con alegría” porque “Cádiz se juega muchísimo en las elecciones europeas; las cosas que se aprueban en Europa tienen una incidencia directa sobre la ciudadanía, en el sector industrial, el pesquero, el sector agrícola, pero sobre todo, en todo lo que tiene que ver con las libertades y los derechos”. Y se ha advertido de que “la extrema derecha está avanzando a pasos agigantados” y de que PSOE y PP “han representado siempre políticas de derecha en la UE”. Frente a ello, “hay una alternativa clara, las organizaciones de izquierda de nuestro país hemos hecho una muestra de voluntad, de ponernos de acuerdo en lo común, en lo importante”. Aunque en esta coalición ya no aparece Podemos, que concurre en solitario, como en sus orígenes.
UN MILLÓN DE ELECTORES GADITANOS
Es la novena ocasión que los españoles votan ‘pensado’ en Europa desde que el Estado español ingresara en la UE en 1986. La primera vez fue el 10 de junio de 1987. Posteriormente, se han celebrado elecciones europeas en 1989, 1994, 1999, 2004, 2009, 2014 y las últimas, el 26 de mayo de 2019, coincidiendo con las municipales.
En España, según los datos recogidos por DIARIO Bahía de Cádiz, el censo electoral asciende en esta ocasión a 38.087.379 electores, de los que 35.361.672 son españoles residentes en el propio país, 2.422.716 españoles residentes en el extranjero (CERA) y 302.991 residentes extranjeros en España (CERE).
A su vez, de los 1.026.609 gaditanos con derecho a voto este 9-J (más de 8.200 han votado por correo de forma anticipada), un total de 991.825 residen en la provincia, 31.965 son residentes en el territorio pero ausentes al vivir en el extranjero, y 2.819 son ciudadanos de la UE que residen en España. Entre todos ellos se encuentran los 70.275 nuevos votantes al haber cumplido ya los 18 años.
Por su lado, entre los siete municipios mancomunados de la Bahía de Cádiz pueden participar en estas elecciones 556.717 electores (100.073 integran el censo electoral de la capital; 175.034, en Jerez; 78.195, en San Fernando; 73.330, en El Puerto; 70.934, en Chiclana; 34.555, en Puerto Real; y 24.596, en Rota). Del total, 539.497 potenciales votantes residen en sus localidades, 16.117 en el extranjero (la mayoría, en Francia, Alemania, Reino Unido, EEUU, Argentina, Brasil y Suiza), y 1.103 son ciudadanos de otros países de la UE residentes en la Bahía (principalmente alemanes, italianos, franceses y rumanos).
En la legislatura que termina el número de eurodiputados ha sido de 705. Pero ahora se vota para elegir a 720 (para representar a casi 450 millones de personas), un aumento que trata de reflejar los cambios demográficos registrados desde 2019. Al Estado español le corresponden dos de los nuevos 15 escaños: en total, aportará 61 representantes.
MÁS DE 8.000 PERSONAS EN CÁDIZ A DISPOSICIÓN DEL 9-J
Y como es habitual, la Subdelegación del Gobierno de España (y por arriba, el Ministerio del Interior) está al frente del amplio dispositivo especial de organización y seguridad de una nueva jornada electoral en Cádiz, movilizando a un total de 3.488 empleados públicos, entre efectivos de Policía Nacional (1.488), Guardia Civil (941), Policía Local (420, dándose el caso curioso de que en la capital se niegan a la vigilancia en los colegios al exigir unas dietas exageradas para el Ayuntamiento) y representantes de la Administración (639 efectivos, a los que se les ha dotado con el mismo número de tablets para grabar y remitir en tiempo real las incidencias y resultados).
Por otro lado, 4.584 gaditanos compondrán las mesas electorales, entre presidentes, vocales y suplentes que se repartirán en 576 locales electorales, sumándose 1.528 mesas, con 2.750 urnas y 864 cabinas, 1.088.000 sobres a disposición de los votantes (y millones de papeletas más), además de 24 kits/maletines para votos accesibles en Braille.
Esta convocatoria electoral tiene un presupuesto global de casi 199 millones de euros (donde se incluye el coste de toda la logística, los pagos a Correos, las gratificaciones a los miembros de las mesas -una dieta de 70 euros- o los extras que cobran los policías y empleados públicos implicados).
HASTA 34 PAPELETAS PARA ELEGIR
Como particularidad, en los comicios europeos la circunscripción electoral es única en España e integra a todo el territorio nacional: el votante de Pontevedra, el de Cáceres o el de Benalup encontrará en los colegios las mismas papeletas. Y no son pocas: hasta 34 candidaturas han sido proclamadas, abundando las opciones de derecha y extrema derecha.
De todas ellas, la más ‘cercana’ es Ahora Andalucía, autodenominada “candidatura de unidad, social, de encuentro y abierta para representar a Andalucía en Europa”. Entre las formaciones que engrosan esta coalición sobresale AxSí (los herederos del extinto PA). No tiene nada que ver con Adelante Andalucía, que rechazó entrar en este conglomerado y no concurre. La papeleta de Ahora Andalucía la encabeza el almeriense (y granadino) Javier García Fernández, doctor en Historia, sindicalista, militante del andalucismo político, y profesor universitario en Barcelona.
En cuanto a las candidaturas más ‘tradicionales’, no faltan las de PSOE, liderada por la todavía ministra para la Transición Ecológica Teresa Ribera; la del PP, con Dolors Montserrat repitiendo como número uno; Podemos busca remontar aprovechando el tirón de la castigada exministra de Igualdad, Irene Montero; Sumar, el proyecto de Yolanda Díaz (donde se integra IU) coloca al frente a una desconocida para el gran público, Estrella Galán; Ciudadanos, en proceso de liquidación imparable, prueba con Jordi Cañas a la cabeza; y el partido animalista, Pacma, con Cristina García.
Además, los gaditanos también pueden votar el 9-J a la coalición de izquierdas Ahora Repúblicas (donde se dan la mano Esquerra, Bildu, BNG y Ara Més); u otra más conservadora, la Coalición por una Europa Solidaria (donde se unen el PNV, Coalición Canaria y el partido balear El Pi).
Otras opciones regionalistas serían: Junts i Lliures per Europa (independentismo catalán por la derecha), Pais i Moviment Rural (en defensa de los intereses que más preocupan a los habitantes de la costa mediterránea), Juntos por Extremadura, Extremeños Prex Crex, el Partido Galego, y La España olvidada Existe (con participación de Teruel Existe) o Salamanca-Zamora-León (Prepal).
En el capítulo de opciones singulares y complicadas de encasillar entrarían: Escaños en Blanco, Recortes Cero, Partido Humanista, Volt (un partido que se tacha de “paneuropeo y pragmático”), Feministas al Congreso (que dice recoger el sentir de “muchas mujeres huérfanas de representación política”), Soberanía Alimentaria Española (autollamado partido de los agricultores), y Pirates/Rebeldes.
Claramente a la izquierda podrían situarse tres opciones con nombres muy próximos: Partido Comunista de los Trabajadores de España (PCTE), el Partido Comunista de los Pueblos de España (PCPE) y la Corriente Revolucionaria de los Trabajadores (CRT).
Mientras, por la ultraderecha y extrema derecha retrógrada y rancia, el menú es bien amplio: Falange Española; Futuro, que dice no ser ni de izquierdas ni de derechas (“el partido político de todas las personas que respetan a las personas como son”); Izquierda Española (la gran acogida que tuvo su nacimiento desde la derecha mediática es todo un síntoma); Frente Obrero (los nombres engañan muchas veces); Iustitia Europa (demonizando a la Agenda 2030); Cree en Europa (“a la izquierda del PP y a la derecha del PSOE”); la agrupación de electores Se acabó la fiesta, con un youtuber derechista al frente, Alvise Pérez y con opciones de rascar algún escaño, según los sondeos, peleándose por el mismo electorado tipo de Vox, con Jorge Buxadé en la cabecera.
LAS ÚLTIMAS ELECCIONES
En los últimos comicios al Parlamento Europeo de 2019 (que coincidieron con elecciones municipales), en el reparto de escaños se imponía claramente el PSOE, con 20. Por detrás, PP (12), Cs (7), Unidas Podemos (6), Vox (3), Ahora Repúblicas (3), Junts (2) y CEUS/PNV (1).
En el caso de la provincia de Cádiz, el PSOE también ‘ganaba’ aquel 26-M con casi el 38% de los sufragios; el PP se quedaba en el 19%, Cs en el 14,5%, Unidas Podemos en el 14,1%; y la ultraderecha en el 7,4%. Además, Pacma sumaba el 1,8% de los votos, más que AxSí, en aquella ocasión se presentaba en solitario (obteniendo 7.641 papeletas de entre las casi 545.000 depositadas; la participación total no llegó al 55% del censo).
El Parlamento Europeo representa los intereses de los ciudadanos de la UE; hay que diferenciarlo de la Comisión Europea, que es el poder ejecutivo de la UE, responsable de proponer y aplicar la legislación comunitaria; y del Consejo Europeo, que representa los intereses de los países.