Este domingo 28 de abril están convocadas elecciones generales anticipadas, ni tres años después de las últimas de 26-J de 2016 (que a su vez, fueron una llamada a las urnas pasados sólo seis meses de los comicios del 20-D de 2015, sin acuerdo para conformar gobierno). Y en un mes, el 26 de mayo, elecciones municipales, europeas y autonómicas en varias comunidades…
La legislatura que ahora se esfuma comenzó con el popular Mariano Rajoy de presidente y acaba con el socialista Pedro Sánchez en el cargo, tras salir adelante la moción de censura presentada a raíz de que una sentencia de la Audiencia Nacional condenando al PP por corrupción. Y ahora, una vez que el PSOE en minoría en el Gobierno (con Podemos como principal aliado en la oposición) no ha logrado sacar adelante sus prepuestos para 2019 y se ha visto con las encuestas a favor, ha optado por que los españoles configuren un nuevo parlamento, que permita estabilidad al Ejecutivo. Sí, en el que parece que irremediablemente tendrá presencia el neofranquismo: por primera vez desde el fin de la dictadura, sin esconderse.
Se han encendido todas las alertas ‘democráticas’, tras la inesperada entrada de Vox en el parlamento andaluz en las elecciones de diciembre (condicionando además la formación del primer gobierno de derechas en la Junta), a lo que contribuyó más allá del odio avivado en media España contra Catalunya por quienes han visto que aferrarse a la rojigualda y a la unidad indisoluble de la patria da votos, la confianza del votante progresista que se quedó en casa dando por hecha la enésima victoria del PSOE desilusionante de Susana Díaz en su principal feudo.
Ahora, tanto en un bando como en otro, están a la expectativa del tirón que tendrán a nivel estatal las ideas simplistas, rancias, trasnochadas, homófobas, racistas, machistas… que se supone que estaban ya medio enterradas, al menos en el discurso público, en este país, en pleno siglo XXI. En este contexto, la derecha, viendo como la extrema derecha nostálgica se lleva parte de sus votantes (y no son pocos), ha radicalizado sus vacuos mensajes, formas e insultos (y ha patrimonializado todavía más la bandera), y se ha fragmentado en tres (el propio Vox, PP y Ciudadanos, aunque este último partido trate de etiquetarse como liberal, al tiempo que está deseando formar gobierno con los conservadores, sin repudiar al partido de Abascal).
Y en el lado de la tarta llamada de la izquierda, el PSOE, cuesta abajo y sin frenos no hace demasiados meses, ve como recupera músculo gracias a esos electores que se pudieron marchar a Podemos y que ahora vuelven por aquello del ‘voto útil’, amedrentados por el auge real del coco, de las derechas. Desde Unidas Podemos no se pierde la esperanza, se quieren ver cogobernando con los socialistas y no desde la oposición, y confían en que con un discurso más sosegado e institucional, sin chillar pero lanzando verdades, se frene ese trasvase que pronostican los sondeos y vaticinan los principales medios (que a su vez se ven atacados por esas ‘verdades’). Advirtiendo una y otra vez de que un PSOE fuerte que pueda elegir como socio a los morados o a los naranjas (pese a que Sánchez y Rivera se hayan dicho de todo en campaña), se decantará por los segundos, obligado por los poderes fácticos.
Se intuye que la movilización este domingo puede ser determinante (o no) para que la balanza de la gobernabilidad y los posibles pactos (con vascos y catalanes, condicionantes) se decanten hacia un lado u otro. Dicen que los votantes de derechas votan sí o sí, siempre. Habrá que ver si el español de izquierdas, o sencillamente el que se niega a una involución social, se acerca a su colegio a ejercer su derecho. Y que el lunes no haya que salir a la calle a manifestarse indignado por los resultados…
543.000 GADITANOS DE LA BAHÍA, LLAMADOS A LAS URNAS
En la provincia de Cádiz están llamados a las urnas este domingo (desde las 9 y hasta las 20 horas) 1.000.032 electores (unos 6.300 más que en las últimas generales de 2016), de los cuales 971.364 constituyen el censo de residentes y 28.668 son los electores gaditanos residentes en el extranjero. 36.244 electores se estrenan, al haber cumplido los 18 años de edad. En los últimos comicios estatales participó el 64,1% del censo gaditano, un pobre porcentaje que se prevé que suba de forma notable en esta ocasión.
En cuanto a las cifras andaluzas, podrán participar más de 6,5 millones de personas (alrededor del 18% del censo electoral de todo el Estado), y en toda España casi 36,9 millones. Y concretando en los siete municipios mancomunados de la Bahía de Cádiz, los potenciales votantes (según datos de INE) son 543.003, alrededor de 3.000 más que hace tres años: 102.833 en la capital (la única localidad de la comarca en la que caen los potenciales electores con respecto a 2016), 170.193 en Jerez, 77.498 en San Fernando, 70.399 en El Puerto, 65.080 en Chiclana, 33.236 en Puerto Real y 23.764 en Rota.
Sin dejar la provincia gaditana, en sus 45 municipios (por primera vez, San Martín del Tesorillo es considerado independiente en unos comicios) habrá 582 ‘colegios’ electorales y se constituirán 1.521 mesas. Como datos curiosos, habrá disponibles para el proceso 3.500 urnas, cabinas “suficiente para garantizar la confidencialidad del voto”, 11 millones de papeletas (un millón por cada una de las diez candidaturas que se presentan por la provincia para el Congreso y un millón más para las nueve del Senado), y se han distribuido 24 kits para votos braille para electores con discapacidad visual que les serán entregados en la mesa electoral que les corresponda. Un total de 645 representantes de la Administración del Estado trasladarán desde Cádiz al Centro de Totalización de Datos de Madrid los porcentajes de participación y el resultado del escrutinio.
Los gaditanos, como es habitual, han podido ejercer su derecho al voto por correo, previa solicitud ante la Oficina del Censo. El número de solicitudes ha sido de 29.516, y hasta el jueves a medianoche, habían entregado su voto en Correos 18.034 (el plazo se cerraba el viernes a las 14 horas). Más de 1,3 millones de personas en todo el país han pedido votar por correos (incluyendo las elecciones valencianas), según la información trasladada a DIARIO Bahía de Cádiz.
CASI 3.000 AGENTES POLICIALES
A las 00.00 horas del domingo, la Subdelegación del Gobierno en Cádiz pondrá en marcha un dispositivo extraordinario de seguridad con motivo del 28-A, en el que participan 2.997 agentes (cerca de 200 más que en 2016), sumando 1.288 efectivos de la Policía Nacional, 1.297 de la Guardia Civil y 412 de la Policía Local.
Policía Nacional y Guardia Civil refuerza, de manera coordinada con agentes de las Policías Locales, la vigilancia de mesas y colegios, la seguridad en centros de votación y recuento, así como en organismos oficiales, sedes de partidos políticos o en lugares susceptibles de acoger grandes concentraciones de personas (como los elegidos por los partidos para celebrar los resultados electorales).
El dispositivo se dará por finalizado a las 08.00 del lunes día 29, una vez concluidos los recuentos provisionales y los actos de las formaciones políticas.
SERVICIO DE TRASLADOS
Por otro lado, la Subdelegación coordina este domingo el traslado de aquellas personas que sufran impedimentos físicos o enfermedad que les impida desplazarse por sus medios hasta su colegio electoral y necesiten un servicio adaptado de transporte, para que ejerzan su derecho a participar en las elecciones. Estos traslados se financian con fondos de la Administración General del Estado.
De la misma forma, como es habitual, voluntarios de Cruz Roja estarán disponibles en toda la provincia para trasladar de forma gratuita a estas personas desde sus domicilios hasta los colegios a lo largo de la jornada electoral. Para ello, cuentan con vehículos adaptados, que están dotados del equipamiento idóneo para este tipo de transportes, tales como plataforma elevadora y equipos que facilitan el traslado de sillas de ruedas. También se dispone de equipos salvaescaleras, para edificios con difícil acceso. Cualquier persona que quiera solicitar este tipo de acompañamiento puede hacerlo en el teléfono 956 22 22 22 hasta las 18 horas del mismo domingo.
¿A QUIÉN VOTAR?
En estas elecciones generales se eligen 350 diputados y 208 senadores (por la circunscripción de Cádiz son nueve diputados, y cuatro senadores).
Los gaditanos podrán escoger este 28-A entre diez papeletas para el Congreso de los Diputados. A las consabidas de PSOE (con el cunero Fernando Grade-Marlaska, impuesto desde Ferraz, como cabeza de lista, PP (con la exalcaldesa jerezana María José García Pelayo, de número uno), Unidas Podemos (liderada de nuevo por la periodista portuense Noelia Vera), Ciudadanos (la lista la encabeza María del Carmen Martínez) y Vox (con un militar retirado, Agustín Rosety Fernández, como cabeza de cartel), también se unen: el Partido Animalista (Pacma), con Eduardo Jesús Rovira como número uno al Congreso por la provincia; el Partido Comunista Obrero Español (PCOE), con David Pelayo Segura de cabecera; Andalucía por sí (AxSí), con José Manuel Acosta como primer candidato; la coalición Recortes Cero-Grupo Verde, que tiene a Ana María Muñoz de número uno; y el Partido Comunista del Pueblo Andaluz (PCPA), con Francisco José Ferrer como cabeza de cartel a la Cámara Baja.
Todas estas formaciones, salvo el PCOE, presentan también candidatos por Cádiz al Senado (estas listas son abiertas, se elige a la persona).
Los sondeos, son sólo eso, sondeos, interesados o no por quienes los encarga, cocinan, publican y difunden. Y los que se han ido conociendo en los últimos tiempos, previos a los dos debates televisivos de la última semana de la campaña electoral, coinciden en la victoria holgada de los socialistas, quienes para seguir en el gobierno deberían pactar con la coalición de Podemos, IU y Equo (que tiene en mente entrar en ese hipotético gobierno, ahora sí, pese a que se intuye que perdería fuerza electoral) y quizás también volver a necesitar el complejo apoyo de partidos nacionalistas.
Esas encuestas también apuntan a que el partido de Pablo Casado (sufriendo sangría de votantes, que ve cómo se le escapan a Vox y Ciudadanos), Cs (sumando, y adelantando a los morados) y la ultraderecha (entrando en el Congreso por primera vez, sin esconderse tras otras siglas), en la mayoría de predicciones no terminarían de sumar para alcanzar la mayoría necesaria.
La otra posibilidad, más improbable si se toma en serio el argumentario y vetos teatrales de los de Albert Rivera, es que el PSOE llegara a esos 176 escaños mínimos junto a la bancada naranja; aunque entonces, el discurso progresista de Pedro Sánchez (como ha venido alertando Pablo Iglesias en sus mitines) quedaría en cuestión al unirse a una formación que en Andalucía acepta los votos en blanco y negro de la extrema derecha, aunque luego parece que se avergüenza de ello.
Concretando en la provincia de Cádiz, el sondeo preelectoral del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) de marzo le da una amplia victoria a los socialistas, con hasta cuatro escaños. Por detrás, Unidas Podemos y Vox se jugarían la segunda posición: ambas fuerzas obtendrían entre uno y dos diputados. Y disputándose la última plaza, Cs y PP se conformarían con un único representante, lo que significaría un descalabro sobre todo para los populares. Y es que en las elecciones generales de 2016, el PP fue el primer partido en la provincia (en votos), sumando tres representantes, los mismos que los socialistas, mientras Unidos Podemos alcanzó dos, y Cs uno.